Las organizaciones abajo firmantes, ante la amenaza de ratificación del Acuerdo de Asociación entre la Unión Europea y El Salvador (ADA), con profunda preocupación, a la opinión pública expresan:
I. ANTECEDENTES
Después de un proceso inconsulto, turbio y sin ninguna participación ciudadana, el Acuerdo de Asociación entre la Unión Europea y Centroamérica (Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Honduras, Nicaragua y Panamá) fue suscrito por El Salvador, en Tegucigalpa, Honduras, el 29 de junio de 2012.



Vamos al sentido común de las cosas. Tomemos la ciudad de Santiago, con sus seis millones, y coloquémosla por un momento al lado de Chuquicamata. Olvidemos el desierto “más seco del mundo”. Olvidemos la soledad tórrida de tanta piedra parda y seca, y solo imaginemos el rajo abierto y unos kilómetros más allá, Santiago, las primeras casas, luego los barrios, las comunas, y después de un trecho, claro, la plaza Italia –a la vista de la gigantesca faena minera-. Feo, ¿verdad? ¿Usted conoce Calama? Aun cuando Calama está a unos 30 kilómetros del agujero la contaminación arrecia.
El proyecto ubicado en Mejillones contará con una generación bruta de 532 MW (472MW netos) que se venderán bajo contratos a largo plazo a empresas mineras como SQM y Sierra Gorda. El costo de inversión de la iniciativa supera los 1.350 millones de dólares.
La Sierra de la Laguna se encuentra en la parte sur del estado de Baja California Sur, entre los municipios de La Paz y Los Cabos. Sin embargo en los últimos años, algunas compañías han visto en este punto, una forma de explotación minera de oro. El más reciente, Los Cardones.
El economista Juan Diego Calisto de la asociación CooperAcción con cifras en mano desnudó el mito de que mayor inversión minera es igual a desarrollo.