Tres directivos de la mayor mina de cobre a cielo abierto de Europa situada en Sevilla, Las Cruces, han sido condenados a un año de cárcel, una multa de 6.750 euros cada uno y una indemnización de 293.209 euros por contaminar con arsénico un acuífero. Después de casi una década de investigación, los tres altos cargos han aceptado la pena por un delito medioambiental y otro de daños impuesta por la Audiencia de Sevilla, después de llegar a un acuerdo con la Fiscalía de Medio Ambiente para reducir la petición inicial de cinco años y medio de cárcel para cada uno.
