Más del 50 por ciento de los proyectos que administra la Corporación Minera de Bolivia (Comibol) no están en funcionamiento y atraviesan por graves dificultades debido a la falta de recursos económicos, personal capacitado e institutos de investigación, reveló ayer el expresidente de la institución, Héctor Córdova.
Proyectos mineros como el complejo Metalúrgico de Karachipampa, la industrialización de Litio, el hierro del Mutún, la producción de azufre de Capurata, la fundición de Telamayu, el yacimiento de Mallku Khota, entre otros, aún no en tran en funcionamiento pese a que se proyectan desde antes del Gobierno de Evo Morales.



El punto cuatro del anexo del acuerdo, referido a Cerro Negro, establece que: una vez resuelto el contrato de arrendamiento entre Comibol (Corporación Minera de Bolivia) y la Empresa Minera Himalaya (EMH), la Cooperativa Cerro Negro debe presentar un proyecto integral para la explotación de la concesión “Resguardo de la Tempestad”, que se realizará a través del contrato de arrendamiento a suscribirse.
La Cámara de Senadores sancionó anoche la ley que ratifica el Contrato de Asociación entre la estatal Comibol y sociedad Illapa-Sinchi Wayra de capitales suizos, para la exploración de las minas Bolívar y Porco con una inversión inicial de 100 millones de dólares, garantizando una producción de complejo de plomo, plata y zinc los próximos 15 años en Oruro y Potosí.
El conflicto de los mineros cooperativistas y asalariados de Porco se halla en cuarto intermedio a raíz de un acuerdo al que se llegó ayer para consultar en La Paz la forma de redacción del contrato de Migración que debe firmar la empresa Sinchi Wayra con la Corporación Minera de Bolivia (Comibol), de acuerdo a la información proporcionada por el curac curaca de Porco, Carlos Gutiérrez Choque.
En la localidad de Porco se percibe un clima de enfrentamiento entre cooperativistas y mineros asalariados por el control del yacimiento minero que actualmente es explotado por la empresa Sinchi Wayra, según se evidenció ayer.