
Mariana nos enseña muchas cosas. En una tierra de fuerte explotación minera, de intensa densidad de población; pensábamos y dábamos por supuesto, que hubiera todos los controles y medidas de prevención contra posibles accidentes. Pero lastimosamente, era todo lo contrario. En Mariana, dos años atrás, sucedió el mayor y peor desastre minero de América Latina, que nosotros lo catalogamos como un crimen ambiental. Este desastre, este crimen todavía no fue reparado. Los acuerdos de reparación de los daños no fueron aceptados por las víctimas y la acción civil pública contra las empresas todavía no llega a los tribunales de justicia.
La recuperación es muy insuficiente. Incluso, hay otros diques de relave que están amenazando a las poblaciones en Minas Gerais y a otras partes de Brasil.
El desastre en Mariana, demuestra que esa minería mata, es insustentable, y que el discurso de preocupación social y ambiental de muchas compañías mineras es hipócrita”. Así de claro habla el misionero comboniano, padre Dário Bossi, directivo de la Red Iglesias y Minería y coordinador del encuentro “Ecoteología y Minería: Espiritualidades, resistencias y alternativas en defensa de los territorios”, que se realizará los días ...