Como tantas actividades irremediablemente «sucias», la minería suele ser resistida por los pobladores de las zonas afectadas aun cuando sus propios ingresos dependan de ella.
Y el último y más contundente ejemplo de esta dicotomía se ha manifestado en Jáchal, San Juan, tras el derrame de más de un millón de litros de agua con cianuro.
En este contexto, los convencidos de que al país le convendría impulsar la minería por tratarse de una fuente de ingresos casi inagotable, acaban de sufrir un nuevo y muy duro revés debido a la desaprensión de una de las más importantes empresas mineras del mundo, la Barrick Gold, cuya sede está en Canadá.
Los voceros de la empresa salieron a decir que el derrame no plantea riesgos para la salud de los sanjuaninos, pero, desde luego, estos no confían en sus palabras por tratarse de cianuro, una sustancia que tiene una reputación siniestra.



La conservación en las áreas naturales protegidas (ANP) está en riesgo por un proceso de desmantelamiento de la estructura de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp), que incluye despidos de directores de reservas, guardaparques y administrativos, que afectaría hasta 300 personas, señalaron afectados.
Como se sabe, el viernes 25 de septiembre se inició un paro en las provincias y distritos de la zona de influencia del proyecto minero Las Bambas. Líderes y las autoridades de las provincias de Grau y Cotabambas en Apurímac, tomaron la decisión de paralización durante el encuentro interprovincial en la comunidad de Huancuire, Cotabambas, con la participación de más de 600 personas, realizado el pasado 12 de setiembre.

En el foro 18 “Por la defensa del territorio contra las mineras y la reserva de la biosfera” los asistentes acordaron este sábado manifestarse en los días que se realizará la Convención Internacional de Minería en Acapulco.
Todo el sector minero confesó estar «muy preocupado» por el derrame de cianuro generado por la multinacional canadiense Barrick Gold tras la rotura de una manguera, según pudo saber El Destape. Al resto de las empresas que operan en la Argentina las inquieta la continuidad de la actividad luego del presunto incidente. La desconfianza sobre los efectos mortales para las poblaciones de humanos y animales de las zonas de producción vuelve a instalarse con fuerza. El futuro desarrollo de la actividad vuelve a estar en riego.
Nicolás Nina, representante del Comité Agropecuario de Recursos Naturales y Medio Ambiente de la provincia Saucarí de Oruro, denunció que en inmediaciones de la localidad de Chuquiña las operaciones mineras a cielo abierto de la empresa Inti Raymi causaron una contaminación ambiental de tal magnitud que provocó la muerte masiva de animales e incluso causó que algunas crías nazcan con mutaciones.
Luego de observar en forma directa diferentes problemas derivados del nuevo modelo de extracción minera, llegué al municipio de Mazapil, al noroeste del estado de Zacatecas. Una zona semiárida localizada dentro del cinturón de plata del país, donde se manifiesta un capricho mineralógico que incluye oro, plata, cobre y zinc.
Un grave peligro se cierne sobre bahía Magdalena y el golfo de Ulloa, dos áreas mundialmente conocidas localizadas en la costa del Pacífico de Baja California Sur. Bahía Magdalena es famosa por ser una de las tres únicas lagunas de reproducción de la ballena gris (Eschrichtius robustus) en el mundo y es el sitio de mayor productividad pesquera del estado.
El pasado jueves, cerca de las 13.30 horas, la división Salvador de Codelco, alertó a la Capitanía de Puerto de Chañaral del rompimiento de una tubería que transporta concentrado de cobre cerca de la localidad de Llanta. El hecho activó todas las alarmas y, tanto la Armada como la autoridad sanitaria, decretaron diversas investigaciones y un sumario sanitario, pues los derrames llegaron, primero al río Salado y luego al mar en el sector de Caleta Palito, cerca del Parque Nacional Pan de Azúcar, lugar donde desemboca el cauce que viene desde la cordillera.