Chile, Internacional, Litio

Expomin virtual: Demanda de carbonato de litio crecerá casi seis veces a 2030

En un panel dedicado exclusivamente al litio y al cobalto en territorio nacional, se abordaron las cifras crecientes para ambos minerales, que provienen principalmente de la electromovilidad.
11/11/2020
Minería Chilena
Tanto el litio como el cobalto son minerales que acaparan protagonismo, dadas sus propiedades en distintos tipos de baterías. Para tener un contexto del estado de ambos minerales en territorio nacional, Expomin Virtual convocó un panel con expertos titulado: “Litio & Cobalto: Perspectivas y Desafíos Tecnológicos”.

“Chile cuenta con una posición altamente privilegiada con 60 salares -muchos de ellos con potencial de litio- concentrando más de la mitad de las reservas de litio según estimaciones del USGS (Servicio Geológico de Estados Unidos)”, enfatizó Andrés González, analista de mercados de la Comisión Chilena del Cobre (Cochilco).

Asimismo, comentó que las explotaciones de litio se realizan exclusivamente en el Salar de Atacama, pero que actualmente existen cantidades similares potenciales en el Salar de Maricunga.

En el caso del cobalto en territorio nacional, entre los años 1844 y 1944 hubo una producción en La Cobaltera, ubicada en el distrito de San Juan, produciendo en orden de las 15.000 a 20.000 toneladas por año. Actualmente hay identificación de recursos en San Juan y en Tampillos.
Baterías

El analista de Cochilco apuntó a la creciente fabricación de baterías de ion-litio, y especialmente al auge de la electromovilidad, como el factor más relevante para el mayor consumo proyectado tanto para litio como para cobalto.

De acuerdo con González, la demanda agregada de carbonato de litio equivalente, crecerá de 323 kt en 2019 a 1.793kt para 2030. Es decir, casi seis veces. Para ese año, el 79% de la demanda la acaparará la electromovilidad, que el año pasado representó solo un 32% del consumo.

Dada la necesidad de reducir costos y aumentar la performance de las baterías, puntualizó que actualmente existe un mayor consumo de carbonato de litio por sobre el hidróxido, pero con el tiempo, dichas cifras comenzarán a invertirse paulatinamente. En ese sentido podría aumentar la baterías tipo MCM y baterías cobalto-manganeso.

En tanto, el cobalto crecerá de 124 kt a 398 kt al 2030. Cabe destacar que la República Democrática del Congo produce dos terceras partes del total del cobalto mundial, siendo una nación cuestionada por sus métodos de extracción que incluye prácticas ilegales como el trabajo infantil.
Precios y fabricación

Tanto en el caso del litio como el cobalto, vivieron un auge de precios que tuvo lugar hace tres años, pero posteriormente ambos han estado a la baja. Desde Cochilco consideran que lo anterior se debe a un crecimiento de la electromovilidad menor al proyectado junto con la amenaza de la reducción de subsidios para autos eléctricos por parte de China, como los principales elementos.

Según datos de Roskill, un 8% del total de costo de una batería de ion-litio corresponde al aporte del mineral de litio. “Dado que no es un costo altamente relevante, esto podría no ser suficiente para contar con una industria local de cátodos, o de partes de baterías. En caso de que Chile lograra entrar de lleno a la industria del cobalto, habría un incentivo adicional para que el país avance en la cadena de valor, para que fabricantes locales o extranjeros se instalen dentro de Chile para una posible fabricación”, concluyó Andrés González.

Panel

La instancia de Expomin contó también con un panel moderado por el ex subsecretario de minería, Ignacio Moreno. Uno de los panelistas fue Marcelo Henríquez, gerente EPC, Minera Santo Domingo, quien ve con buenos ojos la proyección del cobalto en Chile.

Entre los elementos ventajosos que consideró está el hecho de que el cobalto es un subproducto de las operaciones de cobre y níquel. “Chile siendo el mayor productor mundial de cobre, tiene capacidad instalada, tiene una serie de operaciones IOCG, así como están también los distritos de cobalto históricos. Por lo tanto, hay una importante oportunidad para las compañías de poder convertirse en actores, fuera de la República Democrática del Congo”. El gerente de Minera Santo Domingo recalcó la producción ética presente en Chile, en comparación con la extracción en África.

En el ámbito del litio, Ellen Lenny-Pessagno, country manager de Albemarle también abordó el ámbito de la sostenibilidad, considerando el uso de energías renovables y no utilización de agua fresca en los procesos.

Sobre los avances de la empresa, Lenny-Pessagno comentó que está encaminado el Centro de Economía circular con aporte de US$10 millones de Albemarle, y además está ad portas de salir un consorcio de electromovilidad con aporte de US$7 millones por parte de la empresa. “Al final de nuestro contrato aportaremos US$300 millones en I+D”, comentó.

El vicepresidente ejecutivo de la Empresa Nacional de Minería (Enami), Robert Mayne-Nicholls, se refirió a las exploraciones que realiza la empresa en el Salar de Aguilar y el Salar de Infieles. La estatal espera utilizar este último como “un laboratorio de pruebas”, mientras que el primero apuntaría a fines más comerciales, dado su mayor tamaño.

En cuanto al cobalto, Mayne-Nicholls hizo hincapié en su planta en El Salado y también en Vallenar: “Tenemos más de siete toneladas de cobalto dando vueltas diariamente”, y agregó que están haciendo pruebas tecnológicas de manera de hacer cátodos de cobalto.
https://www.mch.cl/2020/11/11/expomin-virtual-demanda-de-litio-crecera-de-381kt-de-2019-a-1-466kt-en-2030/

Colombia

Cerrejón anuncia preacuerdo con indígenas de Colombia, pero la comunidad lo niega

11/11/2020
La mina de carbón Cerrejón de Colombia anunció este martes un principio de acuerdo con indígenas wayuu que permitirá establecer mecanismos para cumplir con la sentencia T-614 de la Corte Constitucional y, al tiempo, impulsar el desarrollo de esta comunidad en los próximos años.

Sin embargo, los representantes de la comunidad negaron dicho acuerdo y acusaron a la empresa de mentir. Según los representantes de la comunidad no se logró un acuerdo con el sector de la comunidad del Resguardo Provincial (habitado por wayuus) y aseguraron que Cerrejón concentró los diálogos con un sector de la comunidad que se opone a las denuncias contra Cerrejón.

Desde hace varios años existe una disputa entre el resguardo indígena y la mina Cerrejón por el uso del agua y la contaminación, el polvo, el ruido y problemas de salud en el desértico departamento de La Guajira, en donde está ubicada la mina.

En 2019, la Corte Constitucional de Colombia ordenó a través de una sentencia a Cerrejón cumplir varios requisitos destinados a preservar la salud y el medio ambiente previniendo la contaminación y controlando las emisiones, mientras que relatores especiales de la ONU instaron al Gobierno a suspender algunas operaciones de la empresa minera.

Según un comunicado de Cerrejón, el principio de acuerdo contempla la construcción de un puesto de salud para la comunidad y un programa de rehabilitación ambiental con la siembra de 248.000 árboles, además de las actividades solicitadas por el tribunal.

“Dentro de las acciones definidas por la corte, Cerrejón establecerá un programa de limpieza en las instalaciones comunitarias y las áreas cercanas, para los próximos 5 años, y hay un compromiso para brindar apoyo técnico a la comunidad en la definición del estándar de calidad de aire aplicable al resguardo, con el apoyo de un experto y en conjunto con el Ministerio de Ambiente”.
Huelga

La actividad de Cerrejón se encuentra detenida desde el 31 de agosto por una huelga que iniciaron los trabajadores del mayor sindicato de la mina en demanda de mejores salarios y beneficios en salud, educación y vivienda, entre otros.

Pero la decisión de la empresa de cambiar los turnos de trabajo se convirtió en la principal dificultad para alcanzar un acuerdo entre las partes.

Cerrejón asegura que el cambio de turno es necesario para asegurar la sostenibilidad de la empresa en medio de un escenario de bajos precios de carbón y menor demanda, pero el sindicato sostiene que atenta contra la salud de los trabajadores.

La empresa reveló que propuso el lunes en una reunión conformar mesas técnicas para la implementación gradual del nuevo turno, pero el Sindicato de Trabajadores de la Industria del Carbón (Sintracarbón) dijo que “no hubo avance alguno”.

Cerrejón no ha revelado hasta el momento ninguna estimación del impacto de la huelga su producción y en sus ingresos.
Fuente: Reuters

Cerrejón anuncia preacuerdo con indígenas de Colombia, pero la comunidad lo niega

Bolivia, Litio

Evo Morales anuncia que convertirán al salar de Uyuni en la capital mundial del litio

11/11/2020
Explore The Bolivian Salt Flats
“Para el 2030 nos habíamos planteado instalar 41 plantas, la mayoría en el departamento de Potosí y una parte en el departamento de Oruro”, afirmó el ex mandatario.

El exmandatario Evo Morales anunció que el flamante presidente Luis Arce reflotará el plan para convertir el Salar de Uyuni en la capital mundial del litio, uno de sus proyectos insignia, horas después de su regreso a Bolivia tras un año en el exilio.

Lo hizo en las puertas del salar, el más grande del mundo y también con los mayores depósitos de litio del planeta. Una promesa que cayó como un regalo de Navidad anticipado para los cerca de 30.000 habitantes de la ciudad de Uyuni, a pocos minutos de allí, que vive del turismo con visitas de miles de personas cada año.

Pero por la pandemia del coronavirus, la ciudad del suroeste de Bolivia ubicada a más de 3.600 metros sobre el nivel del mar está prácticamente paralizada.

“El plan que teníamos lo vamos a retomar ahora con el Lucho presidente”, aseguró el líder indígena, en una conferencia en el majestuoso Palacio de Sal, construido enteramente con bloques de ese mineral.

“Para el 2030 nos habíamos planteado instalar 41 plantas, la mayoría en el departamento de Potosí y una parte en el departamento de Oruro”, afirmó.

Su Gobierno planeaba construir ocho de esas plantas con la empresa china Xinjiang Tbea Group-Baocheng, con la que firmaron acuerdos en febrero del año pasado. Cuatro eran en el Salar de Uyuni y tres en los salares de Coipasa y Pastos Grandes, más al norte.

El paso de Morales
Uyuni recibió al líder aymara con una multitudinaria bienvenida. Durante el mandato de Morales (2006-2019), se construyeron postes de luz, un aeropuerto y carreteras para llegar a la ciudad, que en los últimos años fue punto de paso del Rally Dakar.

“Él es todo, lo defenderemos siempre”, dijo Félix Balbuena, de 45 años, que fue a recibirlo junto a toda su familia desde el pueblo de Colchani, muy cerca de Uyuni.

Morales renunció a la presidencia el 10 de noviembre del 2019 tras perder el apoyo de las fuerzas armadas en medio de protestas por su polémica cuarta reelección.

Poco después, salió de Bolivia y se refugió en Argentina durante 11 meses. Regresó el lunes e inició una caravana de 1.100 km desde la ciudad fronteriza de Villazón, pasando por varios pueblos del sur de Bolivia hasta la zona cocalera de Cochabamba.
Fuente: Diario Financiero

Evo Morales anuncia que convertirán al salar de Uyuni en la capital mundial del litio

Argentina

AngloGold suspende operaciones en mina argentina Cerro Vanguardia

11/11/2020
Foto: AngloGold
AngloGold Ashanti dijo el martes 10 de noviembre que suspende voluntariamente las operaciones en su mina de oro y plata Cerro Vanguardia en Argentina durante 10 días, ya que se han detectado casos positivos de coronavirus entre su fuerza laboral.

La compañía dijo que las actividades esenciales durante la suspensión continuarían y que se espera que el impacto de la paralización en la producción sea de 8,000 onzas.

Se espera que las operaciones en Cerro Vanguardia se reanuden el 20 de noviembre, sin embargo, los movimientos hacia y desde el sitio estarán restringidos solo al personal esencial, hasta el 30 de noviembre.

Cerro Vanguardia, en la que AngloGold Ashanti tiene una participación de 92.5%, es la única operación de la empresa en Argentina. Fomicruz, empresa estatal que opera en la provincia de Santa Cruz, posee el 7.5% restante.

Cerro Vanguardia produjo 225,000 onzas en 2019.

El Dato

Se espera que las exportaciones mineras de Argentina caigan un 25% este año después de que la actividad se detuviera bajo uno de los bloqueos de coronavirus más estrictos del mundo.

Las exportaciones del sector minero, compuesto principalmente de litio, oro y plata, totalizarán alrededor de USD 2.400 millones en 2020, dijo el secretario de Minería, Alberto Hensel. La inversión del sector privado en exploración de minerales se redujo a USD 160 millones en 2020, frente a los USD 241 millones del año anterior.

El gobierno de Argentina ordenó un cierre estricto en marzo, que afectó especialmente al sector minero, ya que depende de los trabajadores que a menudo necesitan viajar para llegar a los lugares de trabajo.
Fuente: Mining Weekly

AngloGold suspende operaciones en mina argentina Cerro Vanguardia

Bolivia, Internacional, Litio

Industria alemana renueva sus esperanzas en litio boliviano

11/11/2020
Con la llegada del nuevo gobierno de Luis Arce, la industria alemana renueva sus esperanzas en litio boliviano.
El salar de Uyuni es el lago salado más grande del mundo y ahí se encuentran hasta 20 millones de toneladas de litio que los países industrializados necesitan para la producción de baterías.

En 2018, Juan Carlos Montenegro, jefe de la empresa estatal de litio YLB, hablaba sobre un megaproyecto junto con pequeñas y medianas empresas de Alemania, que incluye la extracción de 40.000 toneladas de hidróxido de litio por año en el salar, con condiciones impuestas por Bolivia.

“El litio marca el comienzo de la era industrial en nuestro país”, declaró Montenegro en ese momento.

Pero en 2019, el entonces presidente de Bolivia, Evo Morales, detuvo por decreto el acuerdo con los alemanes. Previamente había habido protestas por parte de la población de los alrededores de Uyuni, que exigían una mayor participación en el acuerdo.

Después Morales se fue al exilio y el acuerdo se perdió en la confusión política interna. Ahora, tras la victoria del izquierdista Luis Arce -exministro de Economía bajo el mandato de Morales- las posibilidades de reanudación del proyecto aumentan.

Dos años y medio después, el proyecto volvería a cobrar vida. “Si las compañías alemanas se ajustan a las condiciones, entonces continuaremos la cooperación”, dijo Arce en una entrevista con el Frankfurter Allgemeine Zeitung poco después de ganar la elección.

El político es considerado como un pragmático que abrió económicamente Bolivia en la época de Evo Morales y llevó al Estado andino a un auge único en América Latina. Uno que no solo entiende acerca del tipo de riqueza que Bolivia tiene, sino que también sabe que se necesitan especialistas del extranjero para explotarla. Las esperanzas son mayores por el lado alemán.

«Un proyecto de igual a igual»
Heiner Marx es el director ejecutivo de la empresa especialista en potasa K-Utec. Su compañía iba a construir las instalaciones de producción de litio en Uyuni. El acuerdo es “un proyecto de igual a igual”, subrayó Marx.

“Hemos hecho a Bolivia una propuesta muy interesante que también tiene en cuenta criterios sociales y ecológicos. Una parte sustancial del valor agregado debe permanecer en la región”. Los productos de desecho del proceso de fabricación podrían transformarse en fertilizantes y los especialistas podrían recibir capacitación local sobre el modelo alemán. Las células solares deben cubrir las necesidades de energía de la planta.

Después de “casi dos años perdidos” en Uyuni, Marx enfatiza que la compañía ahora quiere llegar a un acuerdo con el nuevo gobierno de Bolivia. Esto no es solo en interés de su compañía, sino de la industria alemana en su conjunto (Volkswagen, Daimler y BMW, entre otras).

Superar la oferta original
Originalmente, se planificaron inversiones de 1.200 millones de euros (USD 1.400 millones) en Uyuni. La alianza estratégica del grupo estatal YLB, por un lado, y el promotor de proyectos de Baden-Württemberg ACISA y K-Utec, por el otro, debía extraer decenas de miles de toneladas de litio cada año a partir de 2022.

Los bolivianos tendrían el 51% de las acciones, mientras que los alemanes el 49%. El proyecto iba a durar 70 años.

Los expertos ven buenas posibilidades si las empresas alemanas mejoran su oferta. “Es comprensible que países como Bolivia quieran mantener una mayor cuota de valor agregado en el país. Es una tendencia que observamos en los mercados de materias primas de todo el mundo”, afirmó Michael Schmidt, de la Agencia Alemana de Materias Primas.
Schmidt estima que la demanda de litio de Alemania podría multiplicarse hasta 31.000 toneladas anuales en los próximos cinco años.
Fuente: Europa Press

Industria alemana renueva sus esperanzas en litio boliviano

Chile

Consejo de Defensa del Estado y Codelco alcanzan principio de acuerdo en caso Salar de Pedernales

La empresa estatal precisó que el contenido de la propuesta se conocerá luego de que el Tribunal Ambiental de Antofagasta lo analice y evalúe.

11/11/2020
MINERÍA CHILENA
El Consejo de Defensa del Estado (CDE) y Codelco alcanzaron un principio de acuerdo para la reparación de daño ambiental en el Salar de Pedernales, en la Región de Atacama, en el contexto de la demanda interpuesta por el CDE en julio.

La empresa estatal precisó que el contenido de la propuesta se conocerá luego de que el Tribunal Ambiental de Antofagasta lo analice y evalúe.

De autorizarse el acuerdo, la empresa cuprífera podrá iniciar el desarrollo del proyecto estructural Rajo Inca, que busca extender la vida útil de Salvador en, al menos, otros 40 años y que tiene prevista una inversión de US$1.200 millones.
https://www.mch.cl/2020/11/11/consejo-de-defensa-del-estado-y-codelco-alcanzan-principio-de-acuerdo-en-caso-salar-de-pedernales/

Latinoamerica

Nuevo estudio revela que minería afecta el 20% de los territorios indígenas de la Amazonía

El informe de World Resorces Institute indica que la minería está dentro de 1131 tierras indígenas en la Amazonía.
14/10/2020
El precio del oro alcanzó un pico histórico este año. La onza superó los 2000 dólares en agosto y actualmente no baja de los 1900 dólares. Si bien en los últimos años el alza del precio del metal ha sido una constante, fue durante la pandemia del coronavirus que se registró esta cifra récord.

La creciente demanda por el oro ejerce fuerte presión sobre la Amazonía, territorio donde la minería legal e ilegal cubre aproximadamente 1.28 millones de kilómetros cuadrados. Esta expansión minera ha alcanzado también a las tierras indígenas amazónicas, llegando a ocupar hasta un 20 % de estas, aproximadamente 450 mil kilómetros cuadrados.

La minería ilegal ha afectados a 370 territorios indígenas de la Amazonía. Foto: WRI.

Estas cifras son el resultado de un estudio Socavando los derechos: tierras indígenas y minería en la Amazonía elaborado por el World Resources Institute (WRI) y la Red Amazónica de Información Socioambiental Georreferenciada (RAISG) que por primera vez ofrece un panorama del impacto de la actividad minera dentro de los territorios indígenas de seis países: Brasil, Bolivia, Colombia, Ecuador, Perú y Venezuela.

Según la investigación, los mineros ilegales han invadido 370 territorios pertenecientes a comunidades indígenas de la Amazonía, y si se suman las concesiones entregadas por los gobiernos la cifra sube a 1131. Además, el estudio del WRI indica que las operaciones de minería ilegal arrojan constantemente metales pesados, como el mercurio, en al menos 30 ríos amazónicos.

Patricia Quijano, investigadora de WRI y coautora de este estudio, precisa que la pandemia incrementó el precio del oro y exacerbó el interés por la explotación de este metal. Agregó que el estudio también aborda la situación legal y los derechos de los pueblos indígenas sobre sus territorios en relación a las concesiones mineras.

Los pueblos indígenas enfrentan el avance de la minería legal e ilegal en sus territorios. Foto: WRI.

“La minería, con esa ferocidad de destrucción de la Amazonia, debe tener como 70 años. Y en los últimos diez años ha sido feroz en la devastación de muchos territorios indígenas”, dice José Gregorio Díaz Mirabal, coordinador general de la Coordinadora de las Organizaciones Indígenas de la Cuenca Amazónica (Coica).

Las cifras de la devastación

Díaz Mirabal manifiesta que pese a la deforestación que ha ocurrido dentro de los bosques de los territorios indígenas a causa de la minería, son justamente los pueblos indígenas los que mantienen el mejor índice mundial de conservación de territorio y biodiversidad.

Esta afirmación se sostiene también en el informe. Según la publicación de WRI, en Perú, Ecuador y Bolivia la deforestación es tres veces mayor en los territorios indígenas con presencia de minería, en comparación con aquellos que están libres de actividades mineras. En Colombia y Venezuela las cifras de pérdida de bosque supera hasta en dos veces la deforestación de los territorios libres de minería.

El estudio se sustenta en información de RAISG sobre la cantidad de concesiones mineras entregadas en los seis países mencionados, así como en datos sobre los lugares de minería ilegal en la Amazonía.

Pedro Tipula, coordinador del proyecto SICCAM del Instituto del Bien Común (IBC), señala que para este análisis se consideró la información cartográfica de RAISG que ha compilado datos desde el año 2007 sobre las concesiones de minería legal en los países amazónicos, así como en el mapeo regional realizado entre los años 2015 y 2018.

“A pesar de la pandemia, la actividad ilegal de la minería no ha parado, es más, está en una ola creciente toda la región amazónica. La ilegalidad está creciendo en áreas naturales protegidas y territorio indígenas”, dice Tipula.

Según el análisis geoespacial, del total de concesiones mineras legales a gran escala en la Amazonía, el 45 % de se encuentra en exploración y explotación, el resto son concesiones inactivas.

En cuanto a la minería ilegal, el estudio señala que la mayor parte del área de minería ilegal se encuentra en Perú y Bolivia. Además, por lo menos 30 ríos han resultado afectados por esta actividad ilegal o actúan como rutas de entrada de maquinaria e insumos y salida de minerales.

Las áreas o sitios conocidos de operaciones mineras ilegales se superponen con al menos 370 tierras indígenas. De ellas, 260 están en Perú; 37 en Brasil y 29 en Colombia. En cuanto a los ríos afectados por la minería ilegal, estos están dentro o en la frontera de 88 territorios indígenas.

Quijano, de WRI, señala que hasta ahora no se había realizado un análisis a nivel Amazonía que estableciera la relación entre minería y deforestación de manera específica y explicita en tierras indígenas. “La minería, tanto legal como ilegal, es un lastre que arrastramos en la región y que genera mucho impacto y riesgo a las comunidades y al ambiente. Cuando no hay mano dura ni supervisión adecuada por parte del gobierno, la minería ilegal se extiende y conlleva pérdida de ecosistemas críticos que terminan en desmedro de los pueblos indígenas”, precisa la experta.

La defensa de los territorios indígenas

Patricia Quijano, coautora del estudio, menciona que también han documentado las estrategias que han desarrollado los pueblos indígenas para frenar el avance de la minería en sus territorios. “Los pueblos indígenas que han visto la minería como amenaza han logrado, a través de distintas estrategias, algunos buenos resultados; aunque en otros casos la controversia aún continúa”.

Una de las experiencias que se menciona en el estudio es la del pueblo indígena Yaigojé Apaporis y su respuesta ante una empresa minera que, en el año 2007, solicitó concesiones para la explotación de oro dentro de su territorio. En ese momento, el pueblo indígena solicitó al gobierno que sus tierras sean declaradas parque nacional, con el fin de detener el ingreso de la minería.

El mapa muestra los lugares de la Amazonía con minería legal e ilegal. Fuente: WRI.

En el 2009 se estableció el Parque Nacional Natural Yaigojé Apaporis, pero no fue suficiente. Dos días después de la creación de esta zona protegida, el gobierno colombiano otorgó una concesión minera dentro del parque. El caso fue llevado a la justicia de Colombia, la misma que ordenó la suspensión de cualquier actividad dentro del área protegida. No obstante, el problema aún se debate en los tribunales internacionales.

“En Colombia no querían minería y estuvieron dispuestos a perder sus derechos para que ellos mismos puedan realizar el aprovechamiento de sus tierras”, señala Quijano.

Juan Carlos Preciado, asesor legal en Derechos Colectivos Ambientales e Indígenas de la Fundación Gaia Amazonas, se refiere al aspecto cultural del oro y el valor del metal para los pueblos indígenas. “Los pueblos Indígenas han trabajado desde su sistema de conocimiento para proteger su territorio y para guardar el oro”, indica.

Preciado también menciona cómo han trabajado los pueblos indígenas con el estado colombiano para que considere las medidas que estos proponen para afrontar la minería. “En el departamento de Amazonas, por ejemplo, los pueblos indígenas han logrado coordinar con el Estado para ejercer sus derechos de tener un gobierno propio y se ha planteado un ‘no’ rotundo a la minería”.

La comunidad de Centro Providencia discute los principales puntos del Régimen Especial de Manejo (REM) del Parque Resguardo Yaigojé Apaporis. Foto: Parques Nacionales Naturales de Colombia.

Otro de los casos que presenta este estudio está en Perú, en Madre de Dios, una de las regiones más afectadas por la minería ilegal en la Amazonía. Se trata del caso de la comunidad de Tres Islas, de los pueblos indígenas Shipibo y Ese’Eja, que se presentaron ante los tribunales peruanos y la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) para proteger sus tierras de la minería.

En Tres Islas, el gobierno peruano entregó más de 100 concesiones mineras y varias concesiones madereras dentro del territorio de la comunidad sin informar ni consultar previamente, como indica el Convenio 169 al que se acogió Perú desde el año 1993.

Como respuesta, en agosto de 2010, la comunidad decidió construir una caseta y una puerta de madera para controlar el acceso a sus tierras. Las empresas y la comunidad se enfrentaron legalmente y llevaron el caso hasta el Tribunal constitucional peruano, que finalmente dictaminó que Tres Islas tenía derecho a controlar el ingreso de terceros a su territorio.

La comunidad de Tres Islas también demandó al gobierno regional de Madre de Dios por las concesiones mineras otorgadas sin un proceso de consulta previa. Las 127 concesiones fueron declaradas nulas y se ordenó el cese de todas las actividades derivadas de las mismas.

Según el estudio de WRI, el 93 % de la deforestación en Tres Islas entre los años 2000 a 2015 ocurrió en las tierras que se superponían con áreas mineras legales e ilegales. “La deforestación se redujo drásticamente entre 2010 y 2015, coincidiendo con que la comunidad recuperó el control del acceso a sus tierras”, indica el estudio.

“La iniciativa de este pueblo indígena de colocar puestos de vigilancia para controlar su territorio llegó hasta el Tribunal Constitucional, pero siempre hay cosas inconclusas, pues la ejecución plena del fallo del tribunal aún no se ha cumplido. Creo que existen suficientes leyes en el país, pero falta que se apliquen completamente y que las medidas de monitoreo y supervisión se concreten”, agrega Tipula.

“Este es un caso emblemático”, dice la abogada Raquel Yrigoyen Fajardo, del Instituto Internacional de Derecho y Sociedad (IIDS), a cargo de la defensa de Tres Islas. “Estos litigios son larguísimos, es un gran esfuerzo para los pueblos indígenas seguirlos y muchas veces se desaniman de continuar”, agrega la abogada en referencia al largo camino que ha tenido que seguir la comunidad de Tres Islas en los tribunales desde el año 2010 cuando presentó su primera demanda ante el Poder Judicial de Perú.

“Aun cuando ganan los pueblos indígenas, existe ineficacia en el cumplimiento de los fallos y esto tiene que ver con la lentitud de las instituciones”. añade Yrigoyen.

Un caso de Bolivia también fue analizado en este informe. Se trata de la construcción de la carretera que cruza el Territorio Indígena y Parque Nacional Isiboro-Sécure (Tipnis). Aunque no se trata de un tema minero, el caso ha servido para destacar la importancia de las alianzas estratégicas entre diferentes pueblos indígenas con el objetivo de lograr un cambio.

Los pueblos indígenas Mojeño, Yuracaré y Chimán se unieron para exigir al gobierno que suspenda la construcción de esta vía, que causaría daños ambientales y abriría sus tierras a desarrollos no deseados, incluida la minería, explica el informe.

Manifestantes en contra del proyecto de carretera en el TIPNIS. Foto: Szymon Kochański / Wikimedia Commons.

En octubre de 2011, el Tipnis fue declarado zona intangible y se detuvo la ejecución de la carretera. Aunque en años posteriores se dieron leyes para reactivar este proyecto, hasta el momento no se ha concretado y la obra no ha avanzado.

“La presión por los proyectos extractivistas es cada vez más fuerte. Todos los países de la cuenca amazónica sienten esa misma tensión”, dice Alex Villca, líder indígena de Coordinadora Nacional de Defensa de los Territorios Indígenas Originarios Campesinos y Áreas Protegidas de Bolivia (Contiocap).

Para Villca los territorios indígenas les pertenecen solo en ‘papeles’, porque también se entregan a las empresas. “En el Parque Nacional Madidi, 210 mil hectáreas han sido concesionadas a empresas petroleras. Si a eso sumamos las cuadriculas mineras y seguimos viendo que se entregan concesiones forestales, nuestros territorios terminan superpuestos por intereses económicos”.

El coordinador de Coica, Díaz Mirabal, señala que el oro pasó de ser un símbolo cultural de los pueblos prehispánicos a un objeto de riqueza. “Ahí está la raíz de la maldición del oro para los pueblos indígenas”, dice.

Comunidad indígena en el Parque Resguardo Yaigojé Apaporis. Foto: Parques Nacionales Naturales de Colombia.

Díaz Mirabal considera que se ha llegado a un punto de no retorno en la capacidad de la autodestrucción. “A pesar de todo seguimos creyendo que no se puede destruir nuestra casa. Pero nos preocupa que los préstamos para la conservación de los organismos internacionales no lleguen a los pueblos indígenas. Si seguimos así se estará financiando la destrucción”.

Los estados que compran materias primas y los bancos que los financian, según Díaz Mirabal, deben cambiar sus políticas. “Los prestamos deben llegar condicionados, plantear nuevas reglas, nuevos pactos, nuevos acuerdos. Con la propuesta actual de los países para enfrentar el cambio climático no llegaremos ni al 2030, pues con un aumento de la temperatura de 2 grados, nos quemamos todos. Se deben tomar otras medidas, pues aún hay esperanza de conservar los territorios que no han sido destruidos”.

El artículo original fue publicado por Yvette Sierra Praeli en Mongabay Latam.

https://mongabay-latam.lamula.pe/2020/10/14/nuevo-estudio-revela-que-mineria-afecta-el-20-de-los-territorios-indigenas-de-la-amazonia/mongabaylatam/

Chile, Litio

Codelco explorará litio desde el 2021

La compañía recibió la Declaración de Impacto Ambiental (DIA), lo que le permite iniciar en abril su exploración.
Argentina Bolivia y Chile son los llamados países del ‘triángulo del litio’ y donde se concentran las mayores reservas.
POR:Portafolio 09/11/2020
La chilena Codelco, primer productor de cobre del mundo, recibió recientemente la aprobación de los reguladores ambientales para iniciar la exploración de litio en el salar de Maricunga, en el norte del país, algo que el Gobierno calificó este lunes de “extraordinariamente importante”.

“Estamos frente a un paso muy importante de las empresas del Estado que nunca habían explorado y explotado el litio”, indicó el ministro de Minería, Baldo Prokurica.
A esto hay “que sumarle el acuerdo de la Empresa Nacional de Minería Enami, que también tiene acuerdos con empresas internacionales para poder explotar los salares nacionales Infieles y Aguilar”, agregó.

Codelco recibió por unanimidad la semana pasada la Declaración de Impacto Ambiental (DIA), lo que le permite iniciar en abril, con una duración mínima de seis meses y máxima de diez, la exploración en la segunda reserva de litio más grande de Chile. Nacionalizada en 1971 por el presidente socialista Salvador Allende, la minera entrega todas sus ganancias al Estado y emplea a unas 60.000 personas en la zona.

La principal minera chilena de litio, SQM, el segundo productor mundial del metal, también tiene participaciones en el salar de Maricunga.

“El litio es un elemento que ha tomado fuerza producto de la electromovilidad y en donde pretendemos que en el Gobierno del presidente Sebastián Piñera podamos subir la producción para llegar de 100.000 actualmente a 230.000 toneladas en 2025”, explicó Prokurica a los medios de comunicación.
https://www.portafolio.co/internacional/codelco-explorara-litio-desde-el-2021-546479

Internacional, Litio

El sector geotérmico de Turquía espera poder contribuir con litio a la industria automotriz nacional

Kizildere geothermal power plant, Turkey (source: Zorlu Energy, video screenshot)
carlos Jorquera 10/11/2020
El sector geotérmico turco ve grandes oportunidades para extraer litio de las salmueras geotérmicas producidas en las plantas de energía geotérmica en Turquía. Esto podría contribuir al sector nacional de fabricación de automóviles en el país.

Con el aumento del interés y la demanda de carbonatos de litio, se están realizando esfuerzos para derivar litio a partir de salmuera geotérmica en California en los EE. UU., En Cornualles/Reino Unido, Upper Rhine Valley en Alemania y Francia. Turquía también quiere unirse a las filas, como informó a principios de este verano la Agencia Anadolu (AA).

En una entrevista con AA, Ufuk Sentürk, presidente de la Asociación de Inversores de Plantas de Energía Eléctrica Geotérmica de Turquía (JESDER), describe que las plantas de energía geotérmica en Turquía podrían estar en condiciones de producir hasta 17.000 toneladas métricas de litio. Con eso, podría jugar un papel importante en el suministro de litio utilizado para baterías en automóviles eléctricos.

Turquía ha sido el hogar de varios fabricantes de automóviles importantes, entre los automóviles construidos en el país se encuentran los automóviles de Toyota, Renault, Fiat Chrysler, Ford y Hyundai. El país también está impulsando el desarrollo y la fabricación de su primer proyecto de automóvil nacional y completamente eléctrico con tecnologías locales de almacenamiento de energía. La obtención de litio de las operaciones geotérmicas locales claramente podría contribuir en gran medida a estos esfuerzos, según Sentürk.

El litio y otros metales raros, como el manganeso y el zinc, podrían extraerse de la salmuera geotérmica de las operaciones geotérmicas del país. La ubicación y la composición real de los fluidos depende en gran medida de la ubicación de las plantas.

“Las reservas de litio de Turquía ocupan el puesto 25 en el mundo y estamos listos para brindar cualquier tipo de apoyo para la extracción de estas reservas”.

El Ministerio de Energía y Recursos Naturales del país ha establecido una instalación para producir litio a partir de desechos líquidos de las refinerías de las minas de boro. Se espera que la producción de carbonato de litio comience en la instalación a fines de este año.

La empresa minera oficial de Turquía, Eti Maden, ha desarrollado el nuevo método de producción y ha producido carbonato de litio y productos comerciales de boro yendo más allá de los métodos tradicionales con sus estudios de investigación y desarrollo (I + D) que abarcan tres años.

Para utilizar esta tecnología, el ministerio acordó comisionar pronto una instalación con una capacidad de producción anual de litio de 10 toneladas. Habrá que ver hasta qué punto puede contribuir la geotermia.

El sector geotérmico de Turquía espera poder contribuir con litio a la industria automotriz nacional

Honduras

La conexión escondida de una siderúrgica de EEUU con la polémica mina de Los Pinares en Honduras

Univision Investiga
El conflicto ambiental en Guapinol, Honduras, donde pobladores locales resisten en contra de que se explote óxido de hierro en un parque natural, ha sido violento. Una alianza periodística transfronteriza* ahora descubre que la Corporación Nucor, la principal productora de acero de Estados Unidos, fue la poderosa socia tras bambalinas del proyecto minero.
*Colaboraron con este artículo Gerardo Reyes, director de Univision Investiga y María Teresa Ronderos, directora de CLIP.
Por: Jennifer ÁvilayDanielle Mackey
09/11/2020
Ilustración de Miguel Méndez
Discretamente y sin anuncios públicos la principal productora de acero de Estados Unidos, la multinacional Nucor, estuvo durante por lo menos cuatro años asociada a un proyecto de explotación de hierro en una mina en Honduras, fuertemente cuestionado por la presunta persecución a los líderes sociales que protestan por el impacto ecológico que tendría en un parque natural, según documentos obtenidos por una alianza periodística internacional entre Contracorriente, el Centro Latinoamericano de Investigación Periodística (CLIP) y Univision Investiga.

Nucor, que cotiza en la bolsa de Nueva York, se asoció en 2015 con el conocido empresario hondureño Lenir Pérez y su esposa Ana Isabel Facussé, dueños de Inversiones Los Pinares. Esta última es la empresa que ha protagonizado una batalla con los pobladores de Guapinol, municipio de Tocoa, que se oponen a la incursión minera en el parque nacional Carlos Escaleras, al norte del país centroamericano. Un conflicto que ha dejado muertos, heridos y varios encarcelados.

Según el registro público de Panamá, la firma estadounidense se asoció al proyecto desde marzo de 2015 con la compañía panameña NE Holdings Subsidiary, y desde agosto de 2016 a través de una segunda firma panameña, NE Holdings. El matrimonio Pérez Facusse había traspasado anteriormente, en 2015, la totalidad de las acciones a esas sociedades de otras tres empresas suyas en Honduras, según consta en documentos públicos. Una de esas empresas fue precisamente Inversiones Los Pinares (antes llamada Emco Mining), dueña de la controversial concesión minera.

Inversiones Los Pinares no ha comenzado aún a explotar la concesión minera que le otorgó el Estado de 200 hectáreas dentro de un parque nacional de reserva forestal. No obstante, desde 2018, la empresa minera inició la construcción de una carretera a la mina que servirá para transportar el óxido de hierro hasta la planta peletizadora de acero en la ciudad de Tocoa. Esta fábrica, fundirá el hierro con el carbón o coque y lo convertirá en bolitas del aglomerado, un proceso de peletización para producir acero. Esta parte del proyecto minero es propiedad de Inversiones Ecotek S.A. de C.V creada en 2017 en Honduras por Pérez y Facussé en la que Inversiones los Pinares tiene el 99,6% de las acciones y la Empresa Minera La Victoria S.A el 0.4%. Esta última intentó desarrollar otro proyecto minero que resultó conflictivo y también es propiedad del empresario Lenir Pérez.

Según los registros panameños, la asociación entre hondureños y estadounidenses contemplaba un acuerdo por el cual una subsidiaria de la corporación estadounidense, Nucor Trading, registrada en Suiza, compraría la materia prima producida por la mina.
La asociación se realizó bajo el mayor hermetismo. En respuesta a un cuestionario de la alianza periodística, Nucor no ofreció explicaciones del por qué firmó el acuerdo tras bastidores y no registró su inversión en Honduras. Dijo por escrito Katherine Miller, directora de Asuntos Públicos y Comunicaciones Corporativas de la Corporación Nucor, que, como es «común con las empresas de riesgo compartido cuyas sedes están en el extranjero, los participantes escogieron un lugar neutral y equitativo con las partes para formar el negocio», refiriéndose a Panamá.
Instalaciones de Nucor en Estados Unidos Crédito: Cortesía Nucor

La corporación ha informado sobre la existencia de subsidiarias en sus reportes a la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos (SEC), pero hasta donde esta alianza pudo constatar, no ha reportado a la SEC las dos subsidiarias involucradas en el proyecto minero en Honduras. La empresa no respondió dos preguntas relacionadas con el tema de los reportes a la SEC ni a una insistencia posterior para que las contestaran.

«Siempre estamos buscando oportunidades para asegurarnos una fuente abundante de productos del mineral de hierro que nos ayude a fabricar el acero», respondió Miller al cuestionario. La vocera explicó que Honduras ofrece una ventaja logística porque ha sido un lugar donde Nucor evaluó oportunidades para fortalecer su cadena de suministro «a través de una inversión minoritaria en NE Holdings, Inc».

La empresa explicó que se retiró del proyecto a raíz de la agitación social que suscitó en la comunidad. «Como los disturbios en el sitio (Guapinol) se volvieron crecientemente violentos y nuestra preocupación por la seguridad del personal aumentó, Nucor, en consulta con sus contrapartes hondureñas, decidimos vender las acciones en NE Holdings en octubre de 2019», dijo la vocera Miller. «Nucor ya no tiene intereses como propietaria, ni influencia en la dirección de la compañía».

Proyecto minero Los Pinares, panorámica grabada en octubre de 2020. Crédito: Cortesía Lenin Pérez

Nucor cuenta con otra subsidiaria, Nucor South America, registrada en el paraíso fiscal de Delaware. Según los documentos de NE Holdings, Nucor South America podía retirarse del negocio vendiendo sus acciones a Aluminios y Techos de Guatemala (Alutech).
Los registros de Alutech, consultados por esta colaboración periodística en Guatemala, reportan que es una empresa propiedad de Pérez y Facussé dedicada a la distribución de elementos para la construcción, pero de objeto social amplio. La empresa no registra una compra de acciones en 2019. El único cambio significativo reciente que registró fue en octubre de 2018, cuando aumentó su capital de 5 mil a 60 millones de quetzales (de 650 dólares a unos 7.6 millones de dólares).
Ni Nucor, ni el empresario Pérez, a quien Univision Investiga entrevistó en Miami, quisieron dar mayores detalles del negocio, tales como el monto de la inversión, cuál sería el plan de manejo ambiental o social, entre otras. Pérez insistió en que un acuerdo de confidencialidad con la siderúrgica le impedía hablar.
Pérez dijo en un mensaje de whatsapp anterior a la entrevista personal: «Nucor no está con nosotros; tuvo la intención de arrancar el proyecto pero con todo este problema se retiró. Ellos son una empresa seria y no pude concretar la transacción por este problema».
En su respuesta a la alianza periodística Nucor asegura haber vendido sus acciones en NE Holdings en octubre de 2019, pero los documentos panameños señalan que dos meses antes, en agosto, sus funcionarios ya habían salido de la junta directiva de esa empresa.


Nucor Steel en Berkeley, California. Crédito: Foto tomada de la sección de medios de Nucor Corporation.

La siderúrgica tampoco respondió por qué, en cambio, en esa misma fecha, según los citados registros de Panamá, dos ejecutivos de Nucor fueron ratificados en la junta directiva de la otra empresa, NE Holdings Subsidiary. Se trata de Christopher Adam Goebel, quien aparece en LinkedIn como gerente de operaciones, y John Lowry Pressly, quien aparece identificado en una publicación institucional de la empresa como gerente general de Latinoamérica. Pressly no respondió mensajes enviados por Univision Investiga al correo electrónico corporativo de Nucor, pero transfirió la petición de entrevista a la vocera de la empresa. Estos mismos funcionarios de Nucor también figuran entre los directivos de Ecotek, la empresa dueña de la planta peletizadora que se planea construir en Tocoa.
Consultada al respecto, la vocera de Nucor no confirmó ni negó las posiciones de Goebel y Pressly. Sólo dijo que los documentos serán actualizados en los próximos días para reflejar que la empresa ya no está involucrada en el proyecto.
Esta no es la primera incursión de Nucor Corp en el sector siderúrgico en Honduras pues pagó 12 millones de dólares por acciones de Aceros Alfa, la acería más grande de ese país, según sostiene en su perfil público la abogada Grossnie Velásquez de Consortium Legal que facilitó el negocio. Esta alianza preguntó a Velásquez la fecha de esta inversión pero declinó responder por la confidencialidad del arreglo. Nucor tampoco se refirió a esa inversión cuando se le preguntó sobre sus negocios en Honduras.


Distintas organizaciones acompañan al Consejo Nacional de Organizaciones Populares e Indígenas de Honduras (COPINH), organización que dirigía Berta Cáceres al ser asesinada. En una marcha de antorchas exigieron justicia por el asesinato de la ambientalista, La Esperanza, 2 de marzo de 2020. Crédito: Martín Cálix/ Contracorriente

El principal socio hondureño de Nucor en Aceros Alfa es Juan Antonio Kattan, miembro de la reconocida y adinerada familia que creó la empresa y que tiene negocios en los sectores bancario y petrolero. Hoy Nucor, a través de otra subsidiaria registrada en Delaware llamada Nucor Harry US Holdings y reportada ante la SEC, es propietaria del segundo mayor paquete de acciones de Aceros Alfa, después de la empresa American Holdings LTD, según documentos del registro público de Honduras.
Otro de los socios de Aceros Alfa, Jacobo Atala Zablah, es integrante de la familia dueña de la hidroeléctrica Agua Zarca, contra la cual estaba protestando la emblemática ambientalista hondureña Berta Cáceres antes de ser asesinada en 2016. No existe ningún proceso legal que comprometa a la firma, ni a sus socios, en el crimen.
La movida legal

La mina de Inversiones Los Pinares queda en un área que hasta diciembre de 2013 hacía parte del núcleo central del Parque Nacional Montaña de Botaderos Carlos Escaleras Mejía, donde nacen 34 ríos que riegan la verde región. Este parque fue bautizado en honor de un ambientalista asesinado en 1997, cuando se oponía a la instalación de la planta procesadora de palma africana de Dinant, una empresa propiedad del fallecido Miguel Facussé, suegro de Lenir Pérez y padre de Ana Isabel Facussé.

¿Cómo fue posible para estas empresas desarrollar un proyecto minero dentro de una reserva natural que la ley había catalogado como inviolable?

El 8 de octubre de 2012, el Gobierno hondureño decretó la protección de 96,724.4 hectáreas de territorio para conservar ecosistemas, flora, fauna, recursos históricos, culturales y antropológicos identificados hasta ese momento y los que se encontraran en el futuro. En abril de 2013, Emco Mining (hoy Inversiones Los Pinares) solicitó dos concesiones para exploración minera no metálica de óxido de hierro en un territorio que en ese momento aún era parte de la zona núcleo de la reserva, según información del Instituto Nacional de Geología y Minas de Honduras (INGEOMIN).

Ocho meses después de esa solicitud, en diciembre de 2013, el Congreso Nacional de Honduras, mediante Decreto 252-2013, modificó la delimitación del parque y le sustrajo 217 hectáreas a su zona núcleo. Con ese cambio, la mina quedó en la zona de «amortiguamiento», donde la ley hondureña sí permite actividades como la minería no metálica, entre las que se cataloga a la extracción de óxido de hierro en el país. Sin embargo, este proceso fue inicialmente cuestionado por el Instituto de Conservación Forestal, Áreas Protegidas y Vida Silvestre (ICF), que declara y planea las reservas naturales.

En 2014, el ICF declaró «no factible» el proyecto de explotación de óxido de hierro en el parque Escaleras al dictaminar que su impacto sobre flora y fauna sería severo. Es una mina a cielo abierto y, aún con la reforma, la concesión está muy cerca del núcleo del parque. El reporte además determinó que 32 hectáreas de bosques latifoliados (tropicales de maderas más duras) y un río a cien metros del proyecto que abastece de agua a la comunidad Corozales, podrían verse afectados por la mina.

A pesar de este informe, y que, según una fuente del ICF, el Congreso Nacional nunca consultó con ellos la reducción de la zona núcleo del parque, la Secretaría de Recursos Naturales otorgó la licencia ambiental al proyecto. José Galdámez, ministro de esta secretaría cuando se le otorgó a Los Pinares la licencia ambiental fue después cuestionado por una licencia en otra zona protegida en Tegucigalpa, la capital del país. Galdámez finalmente salió de su cargo.

Pérez explicó a Univision Investiga que su empresa promovió reuniones en la región con el gobierno para que escuchara las inquietudes de los habitantes de la zona a fin de «replantear» el área del parque nacional.

«El parque tenía 12 meses de haber sido declarado parque nacional y nos reunimos todos los actores y se pidió replantearlo», explicó Pérez en un correo electrónico. «Trabajamos limpio», agregó el empresario.

Con una reforma legal que les vino como anillo al dedo a los mineros y la aprobación de la licencia ambiental en firme, pocos meses después les fueron otorgadas a Inversiones Los Pinares las concesiones ASP y ASP2, de 100 hectáreas cada una, para explotar el óxido de hierro. Además, la Minera La Victoria, que también aparece como socia en los holdings panameños, obtuvo dos concesiones de 1000 hectáreas cada una en el colindante departamento de Atlántida, para extraer óxido de hierro.


La minera sostiene que la construcción de esta carretera beneficia a los pobladores. Crédito: Cortesía Lenin Pérez

Por este tipo de concesión minera, según el artículo 56 de la nueva ley minera de 2013, las empresas deberán pagar el equivalente a cincuenta centavos de dólar por hectárea por año para explorar y dos dólares por hectárea por año por explotar el mineral. Esto significa que desde que empezó la exploración en 2013, Inversiones Los Pinares ha debido desembolsar 100 dólares por año, y solo deberá pagar 400 dólares al año cuando comience a explotar su mina. Por ser más grande su concesión, el canon de La Victoria -cuya concesión va hasta 2023- será un poco mayor: unos 500 dólares anuales. Adicionalmente, las dos tendrán que pagar regalías sobre la producción de óxido de hierro, al municipio, a la autoridad minera y una tasa de seguridad que sumados dan 2.5% sobre el valor exportado (FOB) o en planta, según sea el caso.

El hierro y la resistencia

Además de la rápida reducción del área protegida del parque natural que permitió la explotación del mineral, detrás de estas concesiones hay varios conflictos socio-ambientales. En 2016, cuando la Minera La Victoria empezó su proyecto exploratorio en Atlántida, las comunidades vecinas salieron a protestar por los daños que, según ellos, esta mina causaría y la empresa paró el desarrollo del proyecto hasta la actualidad.

Ese mismo año, el conflicto se mudó a Tocoa en el departamento de Colón, donde según la base de datos de Ingeomin, el Estado había otorgado 39 licencias de minería entre 2015 y 2020. De estas sólo hay actualmente ocho activas y las 31 restantes caducaron. Cuando la gente del pueblo de Guapinol, en ese municipio, se enteró de que una minera había obtenido una concesión para explotar una de esas licencias, decenas de habitantes salieron a protestar. Temían que las minas les afectaran los ríos que los surten y además denunciaban irregularidades graves en los procesos de autorización de las concesiones.

Organizados en el Comité Municipal de Defensa de los Bienes Comunes y Públicos, presentaron ante la Alcaldía desde 2017, cinco solicitudes de cabildo abierto para que la comunidad pudiera decidir si quería o no minería en el sector. Hicieron recolectas de firmas, plantones frente a la alcaldía y bloquearon vías, sin éxito.

Después de que en 2018 Inversiones Los Pinares comenzara a construir la carretera para tener acceso a la montaña de Botaderos, la comunidad vio que el agua del río Guapinol se enlodó y no podían usarla. En agosto de ese año, montaron un campamento que durante dos meses bloqueó el camino que Inversiones Los Pinares estaba construyendo.


Campamento Guapinol 2018. Crédito: Fernando Silva/ Contracorriente

Según Juana Esquivel, directora de la Fundación San Alonso Rodríguez de Tocoa, la protesta es a favor de la naturaleza, porque “es la vida (…) aquí, en estas tierras, han vivido nuestras abuelas y abuelos. Defendemos ese legado y nuestro derecho a no ser desplazadas y migrar a otros países, ese derecho a quedarnos y a vivir en armonía con la madre tierra como lo hemos hecho hasta antes que estas empresas vinieran a generar el terror colectivo con amenazas, hostigamiento y la destrucción de la vida”.

El dueño de la minera, Pérez, ve las cosas de otra manera. Según dijo en la mencionada entrevista, la construcción de la carretera llevó progreso a la zona donde además construyó cuatro escuelas con un valor promedio de 50 mil dólares cada una y 147 letrinas. Su empresa, agregó, estaba empleando ya a mil personas y por eso asegura que la mayoría de los habitantes de La Ceibita, un pueblo en la región donde se planea montar la peletizadora, respaldaron el proyecto. Sostiene que en Guapinol también la gente lo apoya y envió a esta alianza periodística firmas y testimonios de personas que acudieron a las reuniones de “socialización del proyecto’’ a finales de noviembre de 2017. La socialización es un proceso mediante el cual las comunidades afectadas expresan sus opiniones sobre la conveniencia o no de un proyecto minero.


Foto de escuelas. Estas son dos de las cuatro escuelas que Pérez dice que su empresa construyó en la zona a un promedio de 50,000 dólares cada una. Crédito: Cortesía Lenir Pérez

Según datos de Inversiones Ecotek, la dueña de la peletizadora, el 79 por ciento de las comunidades vecinas que consultó “están de acuerdo y ven de manera favorable el proyecto, mientras un 7 por ciento no está de acuerdo y un 14 por ciento le es indiferente la presencia de este proyecto en la zona.

Pérez dice que es perseguido por organizaciones de izquierda que llevan a los visitantes a la zona “y ponen a las señoras a llorar’’ para hacer publicidad en su contra. “Somos víctimas de una historia que no existe’’, afirmó.

Por su parte, la empresa estadounidense dijo que “aunque salieron de la inversión, Nucor está convencido de que el proyecto ofrecerá una oportunidad a la población de Honduras para conseguir trabajos significativos de largo plazo y alta calidad bajo condiciones social y ambientalmente responsables”.
Disturbios y acusaciones

El bloqueo a una calle y el intento del personal de la mina por despejarlo causó una primera confrontación entre cientos de pobladores y la empresa el 7 de septiembre de 2018. Varios pobladores salieron golpeados y una persona fue herida de bala. Según el expediente judicial del caso, los manifestantes retuvieron entre tres y cinco horas a Santos Corea, jefe de seguridad de la minera, mientras quemaban un contenedor y destruían un vehículo. El 27 de octubre, miembros de la policía y del Ejército desalojaron a los manifestantes del campamento de la carretera. Los enfrentamientos entre la fuerza pública y la comunidad continuaron los días siguientes, y el 29 de octubre dos militares murieron por fuego cruzado. No hay investigación judicial formal por las muertes ocurridas en esos días, pero la compañía minera denunció a los manifestantes y el Ministerio Público procesó a 32 de ellos por diversos delitos relacionados con el altercado del 7 de septiembre. Entre los acusados se encontraban cuatro delegados de la parroquia católica de Tocoa y un empleado de la Fundación San Alonso.

En 2019, doce de los ambientalistas demandados se presentaron voluntariamente ante las autoridades para afrontar cargos de usurpación, privación injusta de la libertad, asociación ilícita, robo e incendio agravados contra la empresa. La Fiscalía basó su acusación en un informe de inteligencia policial que asegura que 51 personas estuvieron involucradas en la actividad delictiva en contra de la compañía y que al menos otras 300 las habrían apoyado. Según la Fiscalía, la Policía informó que una organización delictiva a la que llamó “Los Antimineros” planeó esas acciones.

Los líderes del Comité Municipal de Defensa de los Bienes Comunes y Públicos, que han sido los más expuestos en este proceso, señalan incongruencias en la demanda de la empresa. Por ejemplo, uno de los acusados, Juan López, no había estado en el altercado del 7 de septiembre pues ese día se encontraba escribiendo un comunicado en la sede de la Fundación San Alonso Rodríguez, la organización cívica donde trabaja. Asimismo, dicen los líderes que otro de los acusados, Antonio Martínez Ramos, murió en 2015, es decir, tres años antes de que ocurrieran los hechos.

«Podemos ver claramente requerimientos contra personas que no estaban en el lugar, otra persona que había fallecido antes de este conflicto, otras que nunca participaron en la protesta ciudadana», dice Esquivel de la Fundación San Alonso Rodríguez, quien también está en el Comité Municipal. Dijo además Esquivel que «no ha habido respuesta alguna a las decenas de denuncias ciudadanas por posible corrupción en el otorgamiento de las concesiones».

Al respecto, Lenir Pérez sostuvo que la identificación de los acusados y sus acciones es responsabilidad de la Fiscalía que es la parte acusadora.


Carmen lava el uniforme del equipo de fútbol femenino de la comunidad de Guapinol mientras la menor de sus hijas juega a un lado de ella, dentro del río. Esta mujer estuvo en la resistencia al proyecto minero y su esposo migró hacia Estados Unidos cuando estalló el conflicto. Crédito: Martín Cálix/ Contracorriente.

Actualmente aún hay ocho personas en prisión preventiva, otras cinco que ya fueron liberadas (entre ellas, Juan López) continúan enfrentando el proceso, la justicia retiró los cargos contra siete más y nueve están prófugos. Dos de los acusados fueron asesinados: Roberto Argueta Tejada en agosto de 2019 y Arnold Morazán Erazo en octubre de 2020.

El empresario Pérez dijo en la entrevista que garantiza que no ha habido agresión alguna del lado de su empresa “pongo carta abierta para que destruya mi nombre, si le miento”, dijo. Aseguró que Morazán Erazo había comenzado a trabajar en proyectos de beneficio comunitario que la empresa estaba entregando en Guapinol y que estaba organizando un plan para sacar a los actuales líderes del patronato (organización comunitaria). Pérez sostiene que han sido asesinados nueve empleados y colaboradores de la minera.

Las peores amenazas de seguridad, agregó el empresario, se enfilaron contra los defensores del proyecto y asegura que fueron orquestadas por sacerdotes jesuitas, la Fundación San Alonso, y todo su engranaje. “Yo cierro la mina y sigo con mis negocios”, dijo Pérez, “pero ellos pierden la oportunidad de desarrollarse y no es una sola persona sino todo mundo”. Por eso, dijo, salió Nucor, y Honduras perdió una gran oportunidad de inversión.
«Patrón de violencia»

Después de haber estudiado el trasfondo jurídico del conflicto, la Clínica jurídica de derechos humanos de la facultad de derecho de la Universidad de Virginia en Estados Unidos, publicó un informe en el que pidió la liberación de los ambientalistas encarcelados.

«Esta causa (la que lleva el Estado contra los manifestantes) sigue un patrón de violencia, acoso e intimidación hacia los defensores de los derechos humanos en Honduras», dice su informe publicado el 31 de agosto de 2020. Más adelante sostiene que la criminalización de los líderes comunitarios “ilustra la tendencia del gobierno a favorecer los intereses económicos por encima de los derechos humanos y su voluntad de atacar la libertad de asociación, expresión y reunión pacífica de los ciudadanos».

Los académicos concluyeron que la actuación del gobierno de Honduras incluye medidas “potencialmente ilegales” porque, como explicaron, podría estar violando la legislación internacional de Derechos Civiles que garantiza el derecho de apelar una detención. Además, cuestionaron que el Estado esté aplicando leyes que usa para desarticular al crimen organizado como herramienta para enfrentar la legítima protesta ciudadana.

Pérez, quien está en el centro de la atención en Honduras en los últimos meses por haberse ganado el contrato de construcción del nuevo aeropuerto internacional en la base militar estadounidense Palmerola, asegura que él sólo pidió que procesaran a quienes asaltaron y quemaron las propiedades de la mina.

«Si yo voy a quemar su casa, secuestro a su familia, eso es un delito», dijo Pérez.

Ana Isabel Facussé, su esposa y su socia en todas sus empresas, es hija del fallecido Miguel Facussé, prominente empresario de la palma africana, descrito en un obituario publicado en Los Angeles Times como un «despiadado magnate hondureño».

Los activistas que se oponen a la minería en el parque nacional se basan además en los estudios que han hecho las autoridades hondureñas sobre el daño que la minería puede causar a esta zona protegida. El Plan de Manejo aprobado por el ICF destaca la riqueza de biodiversidad del parque y cómo ésta ha sido afectada por actividades como la exploración para la minería, la agricultura extensiva y la presencia de grupos criminales que han utilizado esta zona para la ganadería y cultivos ilegales.

«La actividad minera como tal no es mala, sino la intensidad con que se realice y si se hace en zonas frágiles como en un área protegida o en una zona núcleo, sí es mala aun si la intensidad es baja», dijo un experto que trabajó en el departamento de Vida Silvestre del ICF, el mismo que en 2014 había declarado no factible el proyecto minero en zona protegida. «Lo que se ventiló en el Congreso de reducir el parque o cerrar la zona núcleo no era lo más prudente porque estamos disminuyendo las zonas de conservación».


Defensores del río Guapinol. Crédito: Martín Cálix/ Contracorriente

Ejercer la defensa del medio ambiente en Honduras es un oficio peligroso. En este país se han registrado al menos 685 actos violentos contra defensores ambientales y de la tierra desde 2009, cifra sólo superada en la región por Brasil y de lejos la más alta ajustando al número de habitantes, según documentó este año la investigación periodística Tierra de Resistentes en la que participaron Contracorriente y CLIP.

El Comité Municipal de Defensa de los Bienes Comunes y Públicos fue honrado en 2019 con el prestigioso premio Letelier-Moffitt Human Rights Award en Washington, DC. También quedaron finalistas este año del Premio Sakharov a la Libertad de Pensamiento, que el Parlamento Europeo le ha otorgado a Nelson Mandela y Malala Yousafzai, entre otras figuras pacifistas.

Un grupo de 39 parlamentarios del Parlamento Europeo envió una carta protestando por la detención preventiva de varios líderes de Guapinol. «Ahora los defensores de derechos humanos han pasado más de un año en prisión preventiva sin ninguna justificación legal sólida y la criminalización con la cual se enfrentan ellos y sus comunidades se ha incrementado», dijeron los parlamentarios. Altos funcionarios de la OEA y la ONU hicieron eco de la misma preocupación.

«Creo que es fundamental que la gente se cuestione por qué hay ocho personas todavía en la cárcel por defender un derecho tan fundamental como el derecho al agua», dice el eurodiputado español Miguel Urbán Crespo, quien forma parte de la Subcomisión de Derechos Humanos del Parlamento Europeo.


Lenir Pérez, derecha, dueno de la minera Los Pinares, sostiene que la trocha construida por su empresa trajo progreso y bienestar a los habitantes de la zona. Crédito: Cortesía Lenir Pérez

El empresario Lenir Pérez, ante las preocupaciones internacionales, dice que el problema es que hay una estructura montada con una capacidad grande de convencer al padrinazgo internacional de toda «una película» que no es verdad.

«Con esta estructura, todo mundo necesita una historia, con la historia crecen su perfil de ONG, vienen a Estados Unidos a dictar conferencias, reciben premios en Europa, ellos están felices por los presos porque lo que les interesa es el lío», agregó Pérez, quien aseguró que ha intentado establecer comunicación con líderes comunitarios pero que se han negado.

Consultados tres dirigentes comunitarios al respecto, dijeron que no han recibido una propuesta formal de la empresa para una negociación. Una de ellas, cuyo nombre no revelamos por seguridad, dijo que sólo recibió una visita de un señor de parte de Lenir Pérez que no trabaja con la empresa, «básicamente llegó a intimidarme». Otros dijeron que la Secretaría de Mi ambiente intentó reunirlos para que negociaran con la empresa, «que aprovecharan». Pero que finalmente no lo hicieron «porque [negociar] les corresponde a las comunidades víctimas».
Nucor y Trump

En 2014, John Ferriola –el entonces CEO de Nucor– le dijo a Time Magazine que Honduras podría ser central en la estrategia de Nucorde revivir la industria del acero en Estados Unidos. Nucor produciría la peletización que, combinada con acero reciclado, mejoraría la calidad del producto y reduciría costos. Con esto, la empresa comenzaría a expandir sus operaciones de peletizado en Latinoamérica. “Cuando ves toda el área, dices ‘Oye, si alguien tiene sitio allí, allá, aquí y allá, capta el mercado’», dijo Ferriola.

A pesar de los anuncios, cuando Nucor realizó inversiones en Honduras en la explotación de la minería de hierro o en la producción de acero, no lo hizo a la luz del día, sino que, subsidiarias suyas (Nucor South America y Nucor Trading) se asociaron con holdings de hondureños creados en un paraíso fiscal como Panamá.

Nucor destacó que su inversión en NE Holdings fue consistente con su compromiso de “llevar sus negocios con los más altos estándares de responsabilidad social y ambiental”. Además, dijo que le piden a sus proveedores y socios que mantengan estos estándares, según los expresan varios códigos.


El presidente Donald Trump en una reunión con directivos de empresas de aluminio y acero en la Casa Blanca en marzo de 2018. A su izquierda, John Ferriola, entonces CEO de Nucor. Crédito: MANDEL NGAN/AFP via Getty Images

Nucor fue un importante donante de la campaña del presidente Donald Trump en 2016 y en 2020; por ejemplo, para las elecciones que el candidato republicano acaba de perder, un comité de acción política (PAC) asociado a la empresa donó el máximo permitido de 10 mil dólares al entonces candidato republicano, según develó Quartz. Luego, reformas del gobierno Trump para beneficiar al sector , terminaron favoreciendo a la empresa, según una investigación del New York Times. Una de las más significativas ventajas que le dio fue arancelaria y favoreció a Nucor en detrimento de otras compañías estadounidenses, creando una creciente tensión dentro de la industria.

Además, Nucor aportó un millón de dólares para la realización del documental «Muerte a manos de China» de Peter Navarro, un economista que fue el principal asesor de Trump en temas de comercio, según The New York Times. El documental argumenta que China, un gran productor de acero, es una amenaza al poder económico estadounidense.

En agosto de 2017, después de que Trump se rehusara a condenar a los supremacistas blancos involucrados en una protesta en Charlottesville que dejó a una mujer muerta y a varios heridos, 11 de los 28 altos ejecutivos que integraban el Consejo de Manufactura Estadounidense renunciaron en protesta. El representante de Nucor, que forma parte de este consejo, fue uno de los que no renunció ni denunció el racismo del presidente.

«Nucor se ha beneficiado de una relación muy cercana con la Casa Blanca de Trump», dice Leonardo Valenzuela Pérez, investigador de la organización de derechos humanos Unitarian Universalist Service Committee (UUSC) en Boston. «Esta administración ha favorecido medidas comerciales proteccionistas que benefician directamente a Nucor y ha denunciado las prácticas de rivales comerciales como China. Mientras tanto, Nucor parece estar hipócritamente escondiendo sus negocios fuera del país, impactando negativamente a comunidades rurales y su medioambiente».

La situación es particularmente irónica dada la obsesión de la administración de Trump por detener a los migrantes que vienen desde Centroamérica. «La imposición brutal de proyectos mineros y de generación eléctrica durante la última década ha seguido una lógica de silenciamiento de cualquier oposición, que ha incluido asesinatos y expulsión, forzando a muchas personas a migrar a los Estados Unidos», añadió Valenzuela.


En el punto fronterizo de Corinto, del lado guatemalteco, una joven llora, pidiendo se les permita ingresar a Guatemala junto a un grupo rezagado de la caravana de migrantes que salió en plena pandemia de Honduras hacia Estados Unidos. En Guatemala la caravana se disolvió. Puerto Barrios, Guatemala, 1 de octubre de 2020. Crédito: Foto: Martín Cálix/ Contracorriente

En entrevista con esta colaboración, el congresista Hank Johnson, un demócrata de Georgia que ha seguido el caso de Honduras de cerca, dijo que con frecuencia las comunidades indígenas rurales y la gente pobre centroamericana sufre por estas prácticas de las empresas (refiriéndose al daño ambiental y la represión a la protesta social).

«Son forzados a dejar su tierra por estas empresas y a emprender el peregrinaje a América», explicó, y al llegar, dice el congresista, «son canalizados hacia un sistema de detención privada con ánimo de lucro».

A lo largo de 2018, el proyecto de la planta de peletización obtuvo una licencia ambiental operativa provisional pues se consideró que la socialización del proyecto con las comunidades de influencia directa aún no estaba completa, como lo exige la norma, según consta en el expediente de licencia ambiental de Ecotek. La población de Tocoa, la ciudad más grande cerca a Guapinol y demás poblaciones involucradas en el conflicto, le pidieron a la Alcaldía que declarara el municipio libre de minería y las autoridades lo aprobaron. Aun así, las construcciones no se han detenido. Pérez dijo que en 12 meses planean empezar la operación de la mina.


Berta Cáceres Crédito: Goldman Environmental Prize

En septiembre de 2020, los asistentes del Comité de Relaciones Exteriores del Congreso de Estados Unidos sostuvieron una reunión confidencial con tres defensores de derechos humanos hondureños, incluyendo a Juan López, como representante del Comité Municipal de Defensa de los Bienes Comunes y Públicos, para conocer la situación de Guapinol. López fue uno del grupo contra quienes hay cargos por las protestas contra la mina, que en 2019, se presentó voluntariamente ante la justicia hondureña.

El congresista Johnson, aseguró que es importante entender el involucramiento de una gran empresa estadounidense en un negocio problemático en Honduras dentro del contexto de una relación muy cercana entre el presidente Trump y el muy cuestionado gobierno del presidente Juan Orlando Hernández. Explicó que el mandatario hondureño está bajo investigación en Estados Unidos, luego de que una Corte Federal condenara a su hermano por tráfico de drogas en 2019. «Esto apunta a la depravación moral de la administración Trump que ha sellado una sociedad con este narco-estado corrupto», dijo el congresista. «La corrupción está en ambos lados».

Actualmente Honduras no tiene embajador estadounidense, pero el embajador James Nealon que estaba cuando la Corporación Nucor hizo la inversión en el proyecto, dijo a Univision Investiga que no había tenido conocimiento de dicho negocio, ni de visitas de los empresarios al país.

Cuando en 2019, Juan López aceptó el premio Letelier-Moffitt en Washington a nombre de sus colegas recordó las palabras pronunciadas por la ambientalista Berta Cáceres cuando en 2015 ella había recibido el premio Goldman ambiental: «Despertemos humanidad, ya no hay tiempo».

Diseño de Miguel Méndez

* Esta investigación fue realizada por una colaboración periodística entre Contracorriente (Honduras), Univision Investiga (Estados Unidos) y el Centro Latinoamericano de Investigación Periodística (CLIP). Fue además apoyada por la Beca Adelante de la International Women’s Media Foundation (IWMF). El Investigative Dashboard de OCCRP y Finance Uncovered contribuyeron asimismo con averiguaciones puntuales sobre el caso.

https://www.univision.com/noticias/america-latina/la-conexion-escondida-de-una-siderurgica-de-eeuu-con-la-polemica-mina-de-los-pinares-en-honduras