Perú

El conflicto por las tierras se extiende en el corredor minero

IMPACTOS. Una mujer quechua, en Challhuahuacho (Apurímac), observa la fila de camiones de Las Bambas.
Foto: OjoPúblico/ Álvaro Franco
En un contexto de conflictos sociales y mucha expectativa, el presidente del Consejo de Ministros, Guido Bellido, ha viajado seis veces al corredor minero para atender las demandas de las comunidades de Apurímac y Cusco. Pero aún no logra acuerdos y las demandas continúan. En Chumbivilcas, la vía sigue bloqueada desde hace dos meses. Las comunidades solicitan, entre otros temas, el pago por sus tierras que fueron incorporadas en 2016 a la vía nacional que usan MMG Las Bambas, Hudbay y Glencore para transportar mineral. En total son 20 comunidades quechuas que se han sumado a estas demandas.
José Víctor Salcedo
@Josvicsa
21/09/2021

En los últimos 15 años, la vía que recorre las principales operaciones mineras en el sur del Perú ha sido escenario de múltiples conflictos entre las comunidades quechuas, el gobierno y las empresas. El presidente Pedro Castillo obtuvo precisamente en esta zona un porcentaje elevado de votación, sobre todo en Cusco y Apurímac. Las expectativas sobre una mejor atención a sus demandas crecieron cuando se nombró a la cabeza de la Presidencia del Consejo de Ministros (PCM) a Guido Bellido Ugarte, natural de Chumbivilcas, una de las provincias donde se registra hace meses uno de los conflictos mineros.

Han pasado dos meses desde que 10 comunidades bloquearon la carretera –conocida como corredor minero– por donde se traslada el mineral. Bellido Ugarte ha prometido soluciones y ha viajado seis veces a la zona, pero el gobierno aún no logra resolver los diferentes conflictos reportados en ambas regiones.

El corredor minero del sur atraviesa 37 comunidades campesinas quechuas: 12 de ellas ubicadas en la provincia de Cotabambas (Apurímac), 24 en Chumbivilcas y Espinar (Cusco) y una en Caylloma (Arequipa). Además de las denuncias de contaminación, veinte de estas comunidades reclaman desde el 2016 que se anule la recategorización de seis tramos de la carretera que antes eran vías comunales y departamentales, pero que se convirtieron en vías nacionales a pedido de los gobiernos regionales y fueron incorporadas al corredor minero.

De las veinte comunidades afectadas identificadas por OjoPúblico, 12 son de Chumbivilcas: Huininquiri, Idiopa Ñaupa Japo Urinsaya, Tincurca Huaylla, Lacca Lacca Yanque, Parccobamba, Cancahuani, Cruzpampa, Huascabamba, Huaylla Huaylla, Hatun Ccollana, Sayhua y Tuntuma. En la actualidad, salvo las dos últimas, las otras 10 realizan un paro indefinido y han bloqueado el corredor en sus respectivas comunidades.

Además, hay una comunidad de Espinar (Tintaya Marquiri) y siete de Cotabambas, en la región Apurímac: Arcospampa Congota, Pisacasa, Miraflores, San Miguel, Quehuincha, Pitec y Pumamarca.

El corredor minero del sur atraviesa 37 comunidades campesinas quechuas, en Apurímac, Cusco y Arequipa».

“Todos los días, desde las diez de la mañana hasta las cuatro de la tarde, pasan los camiones que nos contaminan. Son 14 kilómetros del corredor en nuestra comunidad y más de 160 familias afectadas”, dice Huamaní Castro a OjoPúblico. El hombre añade que el polvo que levantan los camiones también afecta los pastos que alimentan al ganado. “Se cubren de tierra y nuestros animales ya no lo comen, están flacos. Eso hace que la producción de carne y leche ya no sea como antes”, se queja Sixto Huamaní Castro, presidente de la comunidad quechua de Huininquiri, provincia de Chumbivilcas, en Cusco.

El corredor minero del sur permite el transporte del material de la minera MMG Las Bambas. Un camión encapsulado de esta empresa transporta más de 34 toneladas de minerales extraídos en la mina Las Bambas, ubicada en el distrito de Challhuahuacho, provincia de Cotabambas, en la región Apurímac. Los vehículos recorren 482.2 kilómetros entre las regiones Apurímac, Cusco y Arequipa.

Parten de la unidad minera Las Bambas y descargan el concentrado de minerales en la estación de transferencia del centro poblado de Pillones, en el distrito San Antonio de Chuca, de la provincia arequipeña de Caylloma. Desde allí el mineral es trasladado en trenes hasta el puerto de Matarani, en Moquegua, para su exportación.

También aprovechan ese circuito, pero en el lado de Cusco y hasta Arequipa las empresas Hudbay, que explota el proyecto Constancia, en Velille; y Glencore, que extrae mineral de su proyecto Antapaccay en Espinar.

El paro en Chumbivilcas

 

En julio de este año, ocho comunidades de la provincia de Chumbivilcas, en Cusco, realizaron un paro indefinido para reclamar un pago justo e indemnizaciones por el uso de sus tierras que forman parte del corredor minero. La mañana del 2 de agosto, el presidente del Consejo de Ministros, Guido Bellido Ugarte, llegó a caballo a la zona de Muyoqorcco, en Chumbivilcas, donde dijo que resolvería el conflicto en 60 días las demandas de las comunidades quechuas.

Aquella vez los dirigentes comunales levantaron la medida de fuerza. “Como chumbivilcano nuestro paisano luche por sus hermanos que están sufriendo. Al premier solo le exigimos que nos dé solución”, dijo en ese momento José Carlos Cayllahua Peláez, presidente de la comunidad de Cruzpampa.

Sin embargo, hasta la fecha Bellido Ugarte no ha logrado resolver el conflicto y ponerle fin al bloqueo en el corredor minero. El 29 de agosto, el premier instaló la Mesa Técnica de Desarrollo Integral de la Provincia de Chumbivilcas y el Grupo de Trabajo de naturaleza temporal para atender las demandas de ocho comunidades quechuas de Chumbivilcas.

Además del pago por el uso de sus predios, las comunidades solicitan saneamiento de las tierras comunales por donde pasa la carretera, indemnizaciones por el impacto del polvo que causan los camiones encapsulados y quieren convertirse en proveedoras de la minera.

Chumbivilcas
PROTESTA. Diez comunidades de Chumbivilcas (Cusco) mantienen bloqueado el corredor minero en esa provincia desde el 10 de setiembre.
Foto: Derechos Humanos Sin Fronteras

Aunque inicialmente eran ocho las comunidades que protestaban, la primera semana de setiembre se unieron dos comunidades más: Ccollana y Huaylla Huaylla, del distrito de Velille. El premier Bellido dijo a fines de agosto, en su segunda visita, que la mesa de diálogo que instaló duraría hasta diciembre como máximo. Sin embargo, el viernes 10 de setiembre los representantes de las 10 comunidades retomaron el bloqueo en el corredor minero, porque no llegaron a un acuerdo en un grupo de trabajo que era parte de la mesa de diálogo instalada el 29 de agosto. La paralización continúa hasta el cierre de este informe.

“Los trabajadores de la empresa minera Las Bambas se negaron a que las comunidades afectadas formen parte de la cadena de valor de la empresa minera. No lo aceptamos y por eso seguimos en protesta”, dijo a OjoPúblico Sixto Huamaní Castro, presidente de la comunidad de Huininquiri.

El 13 de setiembre el Gobierno fracasó, de nuevo, en su intento de restablecer el diálogo en una reunión realizada en la ciudad del Cusco. Asistieron a la cita los representantes de la PCM, de la minera Las Bambas y los presidentes comunales de Chumbivilcas. No hubo acuerdos a pesar de que los representantes de Las Bambas plantearon de nuevo la posibilidad de que las comunidades sean proveedoras de la minera, siempre y cuando desbloquearan el corredor minero. En respuesta, los dirigentes dijeron que mantendrían la paralización y que las conversaciones debían continuar bajo esas condiciones.

El premier Bellido, natural de Chumbivilcas, no ha logrado poner fin al bloqueo en el corredor minero».

Guido Bellido Ugarte nació y creció en la comunidad campesina quechua de Quehuincha (que no es afectada por el conflicto), ubicada en el distrito de Livitaca, provincia de Chumbivilcas. En este tiempo, el premier ha viajado dos veces a esta provincia. La primera fue el 2 de agosto, cuando no firmó el acta con acuerdos y causó malestar entre los dirigentes de las comunidades. La segunda vez fue el 29 de agosto, cuando instaló la mesa de diálogo.

Fuentes del Ministerio de Energía y Minas (Minem) consultadas por OjoPúblico coinciden en que una de las dificultades para superar este desencuentro entre las comunidades y el Ejecutivo ha sido el reciente cambio impulsado por el gobierno en los equipos técnicos de la Oficina General de Gestión Social de este sector, el Ministerio de Transportes y Comunicaciones y la Presidencia del Consejo de Ministros.

Los técnicos tenían acercamiento con los dirigentes comunales, porque estos acordaron no aceptar la intervención de ninguna autoridad política (como alcaldes) ni gremios distritales o provinciales, ajenos al Frente Único de Defensa de los Intereses de Chumbivilcas (Fudich), dirigido por Wilber Fuentes Agüero. Solo confían en esta institución porque es la única que los apoyó desde el inicio de las protestas.

Una de las dificultades para superar el conflicto son los recientes cambios en los equipos técnicos del Ejecutivo».

Uno de los momentos de desencuentro entre Bellido y las comunidades ocurrió el 11 de agosto, fecha en que debía instalarse la mesa de diálogo, pero no se hizo porque la PCM no convocó a la reunión. Cinco días después, las comunidades decidieron suspender la tregua que le habían otorgado a Bellido y volvieron a bloquear el corredor minero. Ese día, el premier llegó a Cusco y, cuando fue consultado sobre el reinicio de las protestas, acusó la presencia de abogados con oscuros intereses que estaban azuzando a la población “con el cuento” de que recibirían ciertos beneficios económicos.

El abogado detrás de los reclamos de las comunidades es el político cusqueño Víctor Villa Zambrano. Él representa a gremios campesinos desde hace varios años y le dijo a OjoPúblico que no tiene ningún interés económico en este caso.

En 2018, Villa Zambrano postuló a la alcaldía provincial del Cusco por el Partido Popular Cristiano (PPC), que perdió su inscripción en las elecciones de este año. “Soy uno de esos políticos que constantemente -no solo en elecciones- visito asociaciones, comunidades y asociaciones provivienda. Cuando piden mi asistencia [legal ], los apoyo. Si es que hay un interés [en el conflicto de Chumbivilcas] sería el político. Si en algún momento postulo [a algún cargo] espero que ellos [las comunidades] puedan ayudarme”, indicó a OjoPúblico.

Los reclamos en Apurímac

El conflicto con las comunidades quechuas en Chumbivilcas (Cusco) no es el único en el corredor minero del sur. El 27 de agosto de este año, las comunidades del distrito de Mara, en Cotabambas (Apurímac), también iniciaron un paro de 48 horas para solicitarle al Estado el mismo reclamo que las otras: pago de una compensación por el uso de sus tierras.

La protesta empezó porque durante la pandemia se suspendieron las negociaciones con el Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC) para la adquisición de terrenos. El proceso de compra de predios había comenzado en diciembre del 2019, luego de una reunión con representantes del ministerio. En ese contexto, el 27 de agosto la minera MMG decidió usar una ruta alterna para el traslado de su personal. Ese día un bus de propiedad de la minera se accidentó y murieron 16 trabajadores.

Álex Roque Mío, presidente del comité de afectados por el proyecto del corredor vial en el distrito de Mara, dijo a este medio que una de sus demandas es que el Gobierno incremente el precio del metro cuadrado de sus tierras. El año pasado seis comunidades quechuas de este distrito (Arcospampa Congota, Pisacaca, Miraflores, San Miguel, Quehuincha y Pitec) comenzaron las negociaciones con el MTC para el pago del justiprecio por sus terrenos.

Comunidades de Cotabambas, en Apurímac, también iniciaron un paro de 48 horas en agosto».

¿Qué piden específicamente? Ronald Quispe Bello, presidente del Frente de Defensa de Mara, dijo a OjoPúblico que el Estado contrató a una empresa para que se encargue de los trámites relacionados con el pago por sus tierras, pero que no ha cumplido hasta el momento. Por eso solicitan a Provías que atienda sus reclamos. “Por ejemplo, en el padrón de beneficiarios aparecen personas que no son de la comunidad, hay demoras en el pago y mala atención”, dijo.

También en Tambobamba hay reclamos. El presidente de la comunidad de Pumamarca, Néstor Vargas Quispe, dijo a OjoPúblico que el MTC solo les pagó “S/ 9 millones por 8 kilómetros de tierras”. Pero aseguró que falta el pago de unos S/ 7 millones por otros 7 kilómetros de tierras comunales incorporadas al corredor vial minero del sur, sin su consentimiento.

El último viernes el premier Guido Bellido llegó a Cotabambas para retomar las negociaciones con las comunidades afectadas por el corredor minero del sur.

El origen de las demandas

 

Lo que hoy se conoce como corredor minero inicialmente unía caminos comunales, distritales y regionales en Cusco, Apurímac y Arequipa, pero en 2016 el Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC) aprobó el Decreto Supremo 011-2016 para convertir esta red en una vía nacional. Dos años después se publicó la Resolución Ministerial 372-2018-MTC, que finalmente reclasificó seis tramos de las vías comunales de Cusco y Apurímac.

Esto ocurrió unos años después de que la empresa Las Bambas modificara su Estudio de Impacto Ambiental (EIA) para que el traslado del cobre ya no se realice a través de un mineroducto cerrado -como lo había planteado originalmente-, sino por carretera.

Cuando el proyecto pertenecía a Xstrata Las Bambas (del grupo suizo Glencore), se planeaba construir un mineroducto para el transporte del concentrado hasta la unidad minera Antapaccay Expansión Tintaya, de propiedad de Xstrata Tintaya S.A, del mismo conglomerado. Sin embargo, Xstrata vendió el proyecto Las Bambas a la empresa china MMG Limited, en abril del 2014, y esta abandonó el proyecto del mineroducto.

La especialista de CooperAcción, Ana Leyva, analizó los cambios al EIA y señala que el área de influencia social establecido en el EIA inicial incluía a otras 20 que colindaban con el trazado del mineroducto.

El origen del problema fue la reclasificación de vías comunales en Cusco, Apurímac y Arequipa en una vía nacional».

Además, según Ana Leyva, la segunda modificatoria del EIA de Las Bambas no consideró compromisos ni obligaciones fiscalizables sobre el transporte de concentrados para Las Bambas. “De esa manera, los impactos que se vienen generando por el transporte de minerales se trasladan a las empresas que tercerizan el transporte o al Estado que es dueño de la carretera”, señala.

Por otro lado, desde 2019 el Ejecutivo inició el saneamiento de los terrenos comunales que forman parte del corredor minero, es decir, el proceso de compra ante las comunidades. Una de las primeras tareas del MTC fue identificar a los dueños y posesionarios de los terrenos incorporados al corredor vial para pagarles el justiprecio. Según el MTC, ya adquirió los predios de cinco comunidades y 223 comuneros en el corredor vial, por un monto total de S/ 24,9 millones.

Adicionalmente, por compensaciones económicas desembolsó S/ 56,2 millones. “Todo ello es resultado del trabajo consensuado y coordinado del MTC con las comunidades campesinas”, señaló este ministerio en una nota informativa.

Ahora han empezado a visitar las comunidades de la región Cusco para negociar la compra de sus terrenos comunales. Sin embargo, las comunidades primero quieren que el Gobierno les reconozca compensaciones e indemnizaciones por el uso de sus tierras desde 2014.

OjoPúblico solicitó una entrevista con algún representante del MTC, pero hasta el cierre de este artículo no se concretó. Mientras tanto, la PCM, encabezada por el premier Bellido ha citado para este miércoles 22 de setiembre a los dirigentes de las comunidades de Chumbivilcas que se mantienen en paro. La cita será en la comunidad de Cancahuani, distrito de Ccapacmarca. Wilbert Fuentes, del Frente Único de Defensa de Chumbivilcas, ha adelantado que sí asistirán. Aunque la resolución del conflicto dependerá de la capacidad de Bellido para convencer, de nuevo, a sus paisanos.
https://ojo-publico.com/3042/el-conflicto-por-la-tierra-se-extiende-en-el-corredor-minero

Argentina

Arcioni y su gobierno, títeres de la minera

21/09/2021 Chubut
Aquí, una muestra de la CRISIS DE DISEÑO que denunciamos desde hace tiempo y la gestión VERGONZANTE del gobierno provincial. La minera Pan American Silver reconoce en su “Reporte de Sostenibilidad 2020” que “trabaja” en la meseta chubutense, financiando y “acompañando” salud, educación, comedores y hasta Policía. Revelaron que las comunas les “pasaron” información de vecinos que reciben subsidios para “llegar con leña y alimentos” y que hacen un relevamiento de comunidades originarias. SI ESTO ES LO QUE HACEN CUANDO LA ACTIVIDAD ESTÁ PROHIBIDA, IMAGINEMOS DE LO QUE SON CAPACES CON UNA LEY QUE LOS HABILITE.
Fuente: Radio3Cadenapatagónica
CHUBUT- Megaminería: “La Ley sigue sin acompañarnos pero la actividad sigue”, reconoció PAS
La minera Pan American Silver reconoció, en la presentación de su “Reporte de Sostenibilidad 2020” que “trabaja” en la meseta chubutense, financiando y “acompañando” salud, educación, comedores y hasta Policía, lo que cuantificaron en poco más de U$S 500 mil (en 2020 y 2021). Revelaron que las comunas les “pasaron” información de vecinos que reciben subsidios para “llegar con leña y alimentos”. “El objetivo es estar cerca de la comunidad y humanizar a la empresa”, sostuvieron, “mientas esperamos la Ley”.

La semana pasada, el 13 de septiembre, Pan American Silver (PAS) presentó su “Reporte de Sostenibilidad 2020”, donde dio detalles de las acciones desarrolladas en diferentes puntos del planeta, haciendo mención a Chubut.

Además, esto estuvo acompañado de una presentación que hicieron Gabriela Maceira, Gerente de Sostenibilidad Social de PAS; y María Florencia Gutiérrez, Superintendente de Sostenibilidad Social.

Allí revelaron que en 2020 la minera, que pretende explotar el proyecto “Navidad” en la Meseta chubutense a través del proyecto “Zonificación” 128/20 presentado por el Gobierno provincial; ha invertido en 2020 unos U$S 432 mil en lo que denominan “sostenibilidad” y en lo que va de 2021 unos U$S 92 mil.

“La ley sigue sin poder acompañarnos para salir de la instancia en la que estamos, pero la actividad sigue”, comenzó la presentación Gabriela Maceira, quien explicó que la operatoria de la minera “tiene 2 ejes. Uno de construcción de conocimiento -y otro de- relacionamiento”.

En el primero “recientemente terminamos un relevamiento de Comunidades Originarias en la zona, con georeferenciación para conocer como están compuestas, quienes son los titulares de las tierras, el perfil socioeconómico de las personas, la edad, el nivel de formación e ingresos, los índices de masculinidad, si hay personas que han migrado y la infraestructura en que viven”.

“Toda esta información -sostuvo- es súper valiosa para poder gestionar”, consideró.

En lo que respecta al “relacionamiento”, explicó la funcionaria de PAS que “tiene diferente ejes” que abarcan Salud, Educación, Seguridad y otros servicios que debe brindar el Estado

“El año pasado estuvo atravesado por el Covid y un fondo de U$S 2 millones, tuvo una asignación para ‘Navidad’. Lo que hemos hecho fue acompañar a los hospitales y postas sanitarias -pero- terminamos asistiendo a la fuerza policial”.

Además, “también acompañamos a las escuelas con equipamiento, con elementos de protección personal, con insumos sanitarios y con alimentos este año” para los comedores, apuntó.

Maceira apuntó que “la Provincia tiene bastante conflicto y dificultades financieras -y- en las instituciones de Salud (de la Meseta) pasan 2 cosas: Son de baja complejidad; y en casos de Covid la atención iba a ser mínima, de media para abajo. A partir de una persona con síntomas de Covid mediana complejidad para arriba eran derivados a Madryn”.

Por eso “lo que hicimos fue apoyar para que tuvieran insumos (como camisolines, barbijos, mamelucos, máscaras, guantes, alcohol en gel, gasas y vendas), neumáticos para las ambulancias y donamos cascos de ventilación no invasiva y capacitamos al personal para que los puedan usar”.

Pero la intervención de Pan American Silver no se limitó a la Salud, sino que “se dan otras acciones como apoyo a actividades deportivas -todo esto porque- el objetivo es estar cerca de la comunidad y humanizar a la empresa”.

“Por más que no estemos en operaciones, el relacionamiento nos sirve para mostrar cómo son nuestros procesos y para mostrar una cara humana”, reconoció, asegundado que la minera canadiense “genera espacios de diálogo y sobretodo vínculos de confianza”.

Según Maceira, estas acciones “no pasan porque estén de acuerdo o no” con el extractivismo megaminero sino con “que haya un conocimiento, que no se genera con una o 2 reuniones -sino- con mucha presencia en terreno”.

“El objetivo es que tengan (los pobladores) referentes allí, hay 31 compañeros en Gastre, de los cuales 6 están en Gan Gan y 2 en Blancuntre, que son empleados y miembros de la comunidad”, enfatizó.

La trabajadora de PAS apuntó que todas estas acciones las desarrollan “mientas esperamos la Ley” que habilite la megaminería en la Provincia.

También se refirió a “la espera” que realiza desde que compró el proyecto en 2009, y detalló que “se transita en 2 carriles, uno que pasa por la política y las decisiones en la ciudad y los niveles de Gobierno; y el otro pasa por el día a día, con mantenernos cercanos, ver cómo es la comunidad y que necesidades tienen, y que nos conozcan puertas adentro”.

“Intentamos mostrar cómo sería una mina en operación. Es difícil cuando se trata de un proyecto pero el objetivo es tratar de mostrar proceso y formalización. Para nosotros sería todo un desafío por la proyección de trabajo, por lo que se deben fortalecer todas las instituciones”, explicó.

Por eso “nuestro desembarco, como operación, tiene que ir acompañado de fortalecimiento conjunto con el Gobierno para fortalecer las instituciones de salud y educativas”.

En otro tramo, se refirió a la asistencia a los vecinos y pobladores, revelando que “acompañan” al Plan Calor con leña y alimento, “este invierno no ha sido tan crudo pero el año pasado fue tremendo -por lo que- reforzamos con leña y alimentos”.

Reveló que para esto “las Comunas nos pasaron un listado de personas vulnerables en base a los registros que ellos tiene de gente que cobra subsidios o son hogares monoparentales –con lo cual- llegamos a casi 800 familias con provisión de leña y alimentos. Esta año se volvió a hacer con leña y pasturas”.

Otra de las “acciones de acompañamiento” realizadas por Pan American Silver en la Meseta fue “en 2019, en Blancuntre, donde dejamos de utilizar Internet satelital y desarrollamos un proveedor local, acampanándolo”.

“El proveedor es Carlos Montenegro y la empresa se llama TechnoGastre, y empezamos a utilizar este servicio y a acompañarlos para que se puedan desarrollar en la zona. Colocamos una torre en el proyecto Navidad y le dimos conectividad a la aldea”, repasó.

En 2018, también “hacíamos y generamos actividades organizadas por Pan American, las escuelas y las comunas, para que se den eventos deportivos”.

Por su parte, María Florencia Gutiérrez detalló que la minera también “acompaña” al sistema educativo en la zona “este año se dio la particularidad de hacer acompañamiento a comedores escolares -porque- la situación de la Provincia es difícil y no hay fondos suficientes para atender a un comedor”.

También, “hay mucho acompañamiento a la Policía, que no cuenta con los recursos para tener los móviles en condiciones”.

“La situación financiera de la Provincia hace que tengamos que hacer acompañamiento, elegimos hacerlo (aclaró), de estas instituciones que consideramos claves en las comunidades para ayudarlos a brindar el servicio público que brindan”, sentenció.

“Hasta junio la inversión en actividades de Sostenibilidad Social en las comunidades rondan los 90 mil dólares. Son actividades puntuales con foco en Covid pero hay otro foco de 100 mil dólares para acompañar a comunidades vulnerables en la zona de Blancuntre, Yala Laubat y Gorro Frigio”, develó.

Sobre el final, Gabriela Maceira reveló que las encuestas en la Meseta “son un termómetro de la realidad”. “Aparece, según el año, más interés por trabajo, lo sanitario y las compras locales. Esos suelen ser los 3 ejes que se turnan de acuerdo al humor social durante el año”.

Maceira consideró que “otros temas como la Gobernanza o los Derechos Humanos las comunidades los ven más lejanos y abstractos”.

Arcioni y su gobierno, títeres de la minera

Chile

Tribunal de Chile modifica medida cautelar contra Minera Cerro Colorado de BHP

22/09/2021
Imagen referencial. / Foto: BHP.
El Primer Tribunal Ambiental, con sede en Antofagasta, otorgó un indulto a la mina de cobre Cerro Colorado de BHP el martes, y acordó suspender la prohibición de bombear agua de un acuífero durante 90 días mientras prepara un nuevo plan de continuidad operativa.

En julio, el Primer Tribunal Ambiental dictaminó que la operación debía comenzar desde cero en la búsqueda de permisos para operar. En agosto, se ordenó “medidas cautelares” que incluyen el cese de la extracción de agua subterránea durante 90 días de un acuífero cercano a la mina, un fallo que la empresa apeló.

Ahora, el tribunal dictaminó que la empresa podría extraer 54 litros por segundo de agua para fines de producción, “por un plazo final de 90 días calendario”.

“Una vez que expire ese período si la mina no cuenta con la aprobación de su plan ambiental, la empresa minera no continuará extrayendo agua”, dijo el tribunal en un comunicado.

Instó al Servicio de Evaluación Ambiental de Chile, que aprueba dichos planes, a concluir su evaluación de la operación lo antes posible.

Cerro Colorado dijo en un comunicado que están “trabajando arduamente para obtener la evaluación ambiental positiva dentro del plazo establecido por la corte”.

Cerro Colorado, una pequeña mina de la cartera chilena de BHP, produjo alrededor del 1.2% de la producción total de cobre de Chile en 2020.

Las empresas mineras en Chile, el principal productor mundial del metal rojo, se han visto obligados en los últimos años a encontrar medios alternativos para alimentar con agua a sus operaciones, ya que la sequía y el retroceso de los acuíferos han obstaculizado las operaciones. Muchos han reducido drásticamente el uso de agua dulce continental o han optado por plantas desalinizadoras.
Fuente: Reuters

Tribunal de Chile modifica medida cautelar contra Minera Cerro Colorado de BHP

Chile

SIN TRATAR AGUAS SE QUIERE IR PASCUA LAMA

A un año de la clausura de Pascua Lama: las comunidades alertan que Barrick propone un Plan de Cierre que sigue atentando contra la vida de las comunidades y ecosistemas

Como comunidad del Valle del Huasco que ha resistido al megaproyecto Pascua Lama por más de dos décadas, recordamos con emoción que hace un año celebramos comunitariamente la noticia del fallo de clausura de este nefasto proyecto.

Si bien seguimos ratificando la importancia de ese fallo que le dio la razón a una comunidad –tanto local, nacional como internacional– que nunca dejó de defender la integridad de su territorio, es imperioso denunciar a la opinión pública que, nuevamente, estamos ante una situación grave de impunidad socioambiental en nuestro país: A UN AÑO DEL FALLO, LA CLAUSURA DEFINITIVA DEL PROYECTO PASCUA LAMA NO SE MATERIALIZA Y LA EMPRESA HA SEGUIDO INTERVINIENDO A NIVEL SOCIAL Y ECOSISTEMICO.

Un par de ejemplos de dicha intervención son las ayudas monetarias que Barrick sigue entregando para encontrar apoyo con lo cual ahondan aún más el daño de nuestro tejido social y los 13 sondajes ilegales realizados entre noviembre de 2020 y mayo de 2021, en la misma zona del rajo supuestamente clausurada, al lado de los glaciares ya destruidos. Este último y gravísimo hecho fue denunciado y todavía se espera la respuesta de la Superintendencia del Medio Ambiente.

A esto se le suma la preocupación por la reciente noticia del Plan de Cierre actualizado de la faena propuesto por la empresa. En síntesis, Barrick plantea restituir al río Estrecho y sin tratamiento todas las aguas contaminadas que se generan constantemente en el proyecto.

Este plan de cierre dista absolutamente de la propuesta original por su Resolución de Calificación Ambiental (RCA); no solo ignora la contaminación sostenida de las aguas que provocó la empresa, sino su propia declaración de 2006, donde transparentó que la intervención en la naciente de las aguas las afectaría y contaminaría por lo menos 100 años, razón por la cual se comprometía a tratarlas durante dicho lapso.

Como comunidad sabemos que, incluso si lo mejoraran, el sistema de manejo de aguas no da abasto y que no logra impedir la contaminación de los ecosistemas y de las personas. Esa es precisamente la causa de la actual contaminación. No obstante, tampoco podemos permitir que descarguen de manera directa toda el agua de contacto o contaminada a nuestros ríos y afluentes.

Para concretar este nefasto plan que vuelve a poner en riesgo el ecosistema del Valle, la empresa pretende presentar una Declaración de Impacto Ambiental (DIA) ante el Servicio de Evaluación Ambiental (SEA) en octubre de 2021. La exigencia de la comunidad es que la SMA y SERNAGEOMIN, entes de gobierno encargados de ejecutar la clausura por mandato del Fallo del Primer Tribunal Ambiental, no acepten esta burda artimaña de Barrick y, que ejecuten el cumplimiento del fallo que hoy conmemoramos, siguiendo su espíritu de resguardo estricto de las comunidades y ecosistemas, y en diálogo permanente con las comunidades.

Finalmente, queremos hacer notar que estas son situaciones inaceptables en el marco del proceso constituyente que vive el país hoy. Cabe recordar que este mismo proceso es el resultado de la movilización social exigiendo dignidad, justicia social y ambiental, y el fin de un modelo economicista que no tiene consideración alguna por la vida de comunidades y ecosistemas, y del cual Barrick es un fiel exponente.

Barrick asesinos, Barrick Criminal ¡Materialización del fallo Ahora!
¡FUERA DEL VALLE DEL HUASCO!

ASAMBLEA POR EL AGUA DEL GUASCO ALTO
Contacto
Jhon Mélendez: +56 9 6828 9310
Constanza San Juan S (Constituyente Atacama): +56 962413008

 

Panamá

Continúan las acciones del movimiento PANAMÁ VALE MÁS SIN MINERÍA

 [Encuentro Nacional]
19/09/2021| Observatorio Socioambiental, Panamá
En esta ocasión la provincia de Veraguas fue la sede del Encuentro Nacional de Representantes de Organizaciones Socioambientales por la Vida y contra la Minería. Realizada en la Casa del Educador AEVE el pasado sábado 18 de septiembre de 2021.

El Movimiento Panamá Vale Más Sin Minería MPVMSM es una confluencia comprometida de organizaciones y comunidades rurales activas en la defensa de nuestros bienes naturales y ecosistemas, que en la actual coyuntura han hecho causa común contra la minería metálica en Panamá. En esta confluencia prevalecen el respeto, la autonomía, el pluralismo, la tolerancia, la solidaridad, la equidad, la integración, el diálogo y la participación democrática.

En el marco de una negociación de un nuevo contrato de concesión entre el Estado panameño y la empresa Minera Panamá (First Quantum Minerals Ltd), carente de transparencia y rechazo de la ciudadanía debido a escándalos de corrupción. El MPVMSM continúa repudiando el atraco que sufre el país a cargo de intereses particulares y transnacionales. También y de manera enérgica, toda política institucional que prive los bienes ecológicos de la Nación en función de un capital financiero extractivo.

La crisis ambiental global, nos hace un llamado urgente a movilizarnos y exigir al Gobierno Nacional alto a la destrucción de la biodiversidad. Como también replantear otro modo de producción económico en el marco de la responsabilidad y equilibrio con la naturaleza. Una Economía Ecológica podría suplir el actual modelo de desarrollo depredador.

El MPVMSM extiende un gran saludo y solidaridad a los pueblos del mundo que también luchan por la vida. Y al pueblo panameño a prepararnos para las próximas acciones públicas.

Redacción Radio Temblor Internacional
Multimedia: Benjamín Acevedo / Jairo Saied / Olmedo Carrasquilla
Apoyo técnico: Julio Grimaldo / Indira Javilla / Conzuelo Trotman / Asley Aguilar

Chile

Investigadores de la Universidad de Chile publican estudio sobre modelación de contaminantes en ríos afectados por drenaje ácido

El trabajo difundido en la revista de Hidrología aborda la combinación de diversas herramientas de modelado para comprender mejor los ríos de alta montaña afectados por el drenaje ácido de rocas.
20/09/2021
Minería Chilena
“An integrated modeling approach for mineral and metal transport in acidic rivers at high mountainous porphyry Cu systems”, es el título de la reciente publicación desarrollada por un grupo de académicos de los Departamentos de Ingeniería de Minas e Ingeniería Civil, y del Centro Avanzado de Tecnología para la Minería (AMTC) de la Universidad de Chile, entre los que se cuentan: Gerardo Zegers, Leonardo Navarro, Miguel Lagos, Álvaro Navarrete, Manuel Caraballo, Yarko Niño, James McPhee y Santiago Montserrat.

El trabajo difundido en la revista de Hidrología aborda la combinación de diversas herramientas de modelado para comprender mejor los ríos de alta montaña afectados por el drenaje ácido de rocas.

Las cuencas de montaña tienen un rol fundamental en sostener sistemas naturales, a la población y actividades económicas ubicadas aguas abajo. Además, estos ambientes de montaña se relacionan con varios depósitos ricos en minerales, como por ejemplo pórfidos cupríferos, los que proveen cerca de tres cuartas partes del cobre mundial, la mitad del Molibdeno y un quinto del oro. En contacto con agua, estos sistemas tienen la capacidad de generar drenaje ácido de roca (ARD).
Alcances del modelo desarrollado

Según explica el investigador Santiago Montserrat, la actividad minera, debido a la construcción de rajos, túneles o depósitos de residuos (ej. relaves o botaderos), pueden aumentar el área de minerales expuestos al ambiente, “facilitando la producción de drenaje ácido, en este caso denominado drenaje ácido de mina (AMD). Según Naciones Unidas, el drenaje ácido de mina (AMD), y sus consecuencias sobre la calidad de las aguas, será uno de los principales y más desafiantes problemas ambientales que enfrentará la sociedad en los próximos años”.

“En este trabajo se desarrolla un modelo de transporte y destino de metales en ríos de montaña acoplando cinco componentes: i) hidrología, ii) hidrodinámica, iii) transporte de sedimentos, iv) transporte de solutos y v) hidroquímica. El estudio se desarrolla en el estero Yerba Loca, uno de los afluentes al río Mapocho“, indica.

Y añade que la cuenca del estero Yerba Loca se caracteriza por su gran altitud y por la ocurrencia de un drenaje ácido de roca (ARD) en su parte alta, “lo que resulta en aguas con bajo pH (menor que 3) y altas concentraciones de cobre, hierro, manganeso y sulfatos”.

“El modelo es capaz de reproducir los principales procesos químicos y mineralógicos observados en la cuenca al introducir la dependencia del la precipitación mineral con el pH a lo largo del estero. Los resultados muestran un buen ajuste con observaciones de terreno, demostrando que el modelo es capaz de representar los principales procesos que controlan el transporte y destino de metales y minerales en ríos de montaña”, explica.

Finalmente, indica que el modelo desarrollado resulta en una buena herramienta para caracterizar sistemas fluviales afectados por ARD o AMD y desarrollar estrategias de manejo de la contaminación.

“Por ejemplo, en el corto plazo, el modelo podría apoyar el desarrollo de planes de emergencia por accidentes (ej. derrames) o predecir el tiempo que un contaminante podría alcanzar un cierto punto del río (por ejemplo una bocatoma). En el largo plazo, y debido a que el modelo representa de buena forma la relación entre hidrología e hidroquímica, ayudaría a proyectar cambios en la calidad de aguas ante escenarios climáticos futuros. De esta manera, el modelo propuesto es útil para asisitr el manejo de sistemas fluviales debido al efecto combinado del cambio climático y actividades antrópicas”, concluye Montserrat.
https://www.mch.cl/2021/09/20/investigadores-de-la-universidad-de-chile-publican-estudio-sobre-modelacion-de-contaminantes-en-rios-afectados-por-drenaje-acido/

Mexico

Comunicado | ARGONAUT GOLD Y LA PERSISTENCIA DEL ENGAÑO “El Despojo en Contubernio con el Gobierno de Guanajuato”

21/09/2021
Dolores Hidalgo CIN, Gto20/09/2021
El gobierno del estado de Guanajuato, a través de su Secretaría de Educación, se ha sumado a la empresa canadiense Argonaut Gold, en su persistente intento de engaño a las comunidades cercanas al proyecto minero Cerro del Gallo, en Dolores Hidalgo.
El pasado 16 de septiembre se dio a conocer en algunos medios de comunicación que Monserrat Bataller Sala, delegada regional de la Secretaría de Educación de Guanajuato y Lourdes Macpherson, gerente de asuntos corporativos y comunicación de Argonaut Gold México, realizaron un evento conjunto para la entrega de mochilas y útiles escolares a las y los alumnos de la telesecundaria 892 de la comunidad de San Antón de las Minas.
Previamente, 13 de julio, el gobernador Diego Sinhue Rodríguez Vallejo, se reunió con directivos de la minera Argonaut Gold para darle la bienvenida a sus proyectos en el Estado de Guanajuato, ello pese a que su proyecto aún no cuenta con los permisos necesarios para operar.
La “cara amable” del despojo

Entre las estrategias que utilizan las empresas mineras para acercarse a las comunidades, está la utilización de programas con cara social, como el que promueve “Argonaut Gold Becarios” quien, aprovechando la incapacidad del Estado para garantizar el derecho a la educación, ofrece “progreso, desarrollo y mejores oportunidades” a las y los pobladores, aunque en realidad sólo una pequeña parte lograría integrarse a la actividad económica como mano de obra barata, mientras el resto observa la destrucción de su vida comunitaria.

No extraña que, tanto la empresa como el gobierno, usen los ya conocidos estándares no vinculantes de “responsabilidad social corporativa” para hacer creer a la población que la minería es una actividad preponderante, cuando en realidad es todo lo contrario porque, de todas las actividades extractivas que están acabando con el planeta, sin duda, la minería es la que mayores daños genera. Es común que usen este marco de estándares construidos por ellas mismas para disfrazar y esconder el despojo y desplazamiento que ocasionará el extractivismo de “cara amable”.

Las empresas mineras son expertas en lucrar con las necesidades que gobiernos como el de Guanajuato generan a partir de su incapacidad para plantear alternativas ambiental y culturalmente apropiadas, no sólo para las familias más vulnerables, sino para la población en general. Las empresas mineras, como Argonaut Gold, pretenden encubrir el peligro que implica la minería “de tajo a cielo abierto” e intentan incidir en la percepción de las madres de familia de las comunidades, quienes por lo regular se hacen cargo de la educación y cuidado de la niñez. Es lamentable que el gobierno de Guanajuato, quien debería ser garante de todos los derechos humanos, apoye este sistema que se sustenta en la acumulación por desposesión, respondiendo así a las exigencias del modelo patriarcal, capitalista y colonial tan acentuado en esta región del país.

No tenemos la menor duda, de llegar a operar el proyecto minero Cerro del Gallo, se generará una catástrofe socioambiental irreversible y sin precedentes en la región, tal cual la hemos visto, vivido y documentado en muchas partes de México y de Latinoamérica. Basta de políticos/as y representantes que sólo ven en las inversiones una salida a sus incapacidades como gobernantes.

El proyecto minero de Argonaut Gold, se ubica en el Cerro del Gallo, en Dolores Hidalgo, dentro la Cuenca de la Independencia, un territorio en el que el agua escasea, la sobreexplotación de su acuífero subterráneo es alarmante y el equilibrio hidrológico fue roto hace décadas y, a pesar de ello hay inmensas concesiones de agua acaparadas por grandes empresas del sector agro-exportador, así como del industrial. No es casual que el severo estrés hídrico de la Cuenca nos esté llevando a extraer agua a cerca de 600 metros de profundidad, lo que implica consumir agua de forma directa e indirecta a través de alimentos, enriquecida con varios metales y metaloides entre ellos el fluoruro y el arsénico respectivamente, ambos altamente dañinos para la salud humana.

Si la mina del Cerro del Gallo empezara a operar, los daños para los habitantes se multiplicarían de manera exponencial, tal como sucede en todas las comunidades en donde existe una mina. A los daños por la contaminación se suma la desaparición de fuentes de agua por agotamiento y acaparamiento por la actividad minera, ocasionando una insuficiencia de agua para el consumo humano en las comunidades.
La apertura de una mina implica una violación absoluta de todos los derechos humanos tal cual como los conocemos, empieza con el despojo y concluye con el desplazamiento forzado/involuntario de las y los habitantes ante la imposibilidad de mantener o construir una vida digna.
Ante esta amenaza, las y los habitantes de las comunidades directamente afectadas, tales como Santa Bárbara, Cerrito de Guadalupe, La Colmena, El Durazno, Palacio de Abajo, Potrero de Guadalupe, San José de la Campana, San José de la Palma, El Llanito, La Ventilla, San Isidro El Sisote y San Marcos, han manifestado en repetidas ocasiones su rechazo tajante a la apertura de la mina Cerro del Gallo, logrando incluso que las y los candidatos a la presidencia de Dolores Hidalgo firmaran, durante la pasada campaña electoral, compromisos de no otorgar permisos de uso de suelo ni de construcción para ningún tipo de mega proyectos extractivos, incluyendo al presidente electo, Adrián Hernández Alejandri.

No a la mina Cerro del Gallo en la Cuna de la IndependenciaFuera Argonaut Gold de nuestros territorios
http://www.remamx.org/2021/09/comunicado-argonaut-gold-y-la-persistencia-del-engano-el-despojo-en-contubernio-con-el-gobierno-de-guanajuato/

Argentina

ARGENTINA: DEUDA POR TERRITORIO – LA INVERSIÓN EXTRANJERA DIRECTA Y LAS TRIPAS DE LA ABUELA

19/09/2021

Nos parece interesante en la actual coyuntura transcribir un artículo publicado por NODAL en octubre de 2019. En él se advierte la triste y enojosa realidad: la enorme deuda externa que fue tomada por el entonces presidente Mauricio Macri pone a nuestros bienes comunes como garantía de cobro.

El servicio de la deuda crea servidumbre.

En base a datos del Ministerio de Economía se calcula la deuda externa argentina al 31 de marzo de 2019 en 338.000 millones de dólares.

No quiero entrar en detalles técnicos del monto exacto de la deuda porque no viene al caso. La trampa de la deuda tiene una finalidad que no es monetaria.

El objetivo de la deuda no es obtener más dinero sino más servidumbre, más obediencia.
La deuda es un sistema para obtener sometimiento, para reforzar la posición dominante del acreedor, para incapacitar, para que el deudor este discapacitado de cumplir.

Ante la postración obtenida el acreedor avanza sobre el patrimonio del deudor.
Esto es lo que se llama desposesión.

Para que quede claro piense en algún pariente, amigo o conocido que convirtió su deuda en algún bien concreto, desposeyendo al deudor de un objeto material.

En los países pasa lo mismo y es lo que voy a tratar de explicar acá.

La servidumbre de la deuda

Con esos niveles de endeudamiento el solo pago de intereses de la deuda se vuelve imposible. El pago de intereses se complica, las cuentas no llegan, entonces aumenta el riesgo país, los capitales se retiran, aumenta aun más el riesgo país y se pide al fin más deuda con intereses más caros. Es un círculo perverso, adictivo.

Es eso que Ud. conoce bien porque se lo hacen las tarjetas de crédito. Ud. se ve ahogado por los intereses, se gasta los ahorros y termina pidiendo un préstamo para pagar los intereses de la tarjeta, a los que suman después los intereses del préstamo.

El resultado de la trampa de la deuda es ser siempre más débil.

Las tripas de la abuela

Así como el acreedor pasó a llevarse el televisor porque Ud. no le pagó, los acreedores de la Deuda Externa Argentina pasarán a retirar de su país las cosas que consideren interesantes.

¿A ver qué cosas de su país se pueden llevar?

En los años 90 con Menem se llevaron las empresas del Estado (Los trenes, Aguas Argentinas, YPF, Entel, Empresas Eléctricas, Empresas de Gas, el Correo, Aerolíneas Argentinas y los Fondos de Pensión a través de las AFJP) empresas que habían costado a todo el pueblo argentino más 50 años de muchos esfuerzos y mantenimientos.
Se llevan las joyas de la abuela, se dijo entonces.

Hoy, con esta súper-mega deuda, tampoco se podrá pagar. ¿Y qué se van a llevar?
Las tripas de la abuela: nuestros Recursos Naturales.

Argentina, la Grecia sudamericana.

En términos de endeudamiento el único caso comparable con el argentino es el de Grecia.
¿Se acuerdan que había un gobierno de centro-izquierda, que no iba a pagar, se convocó a un referéndum, el pueblo dijo no pagamos nada y el presidente fue y pagó?

¿Se acuerdan?

El tema no es que Alexis Tsipras se haya burlado de sus votantes, de su partido y de sus propios discursos. El tema acá es cómo pagó, con qué pagó.

El Gobierno del ex primer ministro griego, Alexis Tsipras, puso en venta más de 1200 islas, para conseguir 54.139 millones de dólares y poder pagar la deuda contraída entre 2009 y 2012.

La isla Omfori cuesta 61,9 millones de dólares, Dulichium 49,5 millones de dólares, mientras que Aegean la venden por 43,3 millones de dólares. Todas se ubican en el mar Jónico.

Grecia dispuso un catálogo con otras 11 islas más baratas, las cuales se pueden obtener pagando 3.248.000 millones de dólares.

Islas, puertos y aeropuertos se llevaron los acreedores en forma de pago de la deuda. Pero no alcanzó y Grecia sigue endeudada.

Alemania, hegemón de la eurozona, es el país que se quedó con la mayor parte del botín.
¿Quién es el hegemón de nuestra zona?

EL RIESGO DE LA INVERSIÓN EXTRANJERA

La Inversión Extranjera es el dispositivo por el cual se puede materializar la deuda. Esa inmensa cantidad de miles de millones de dólares no sirven para nada, no son ni siquiera papelitos, son solo archivos, bytes en cuentas de los discos rígidos de los bancos.

Pero cuando esos montos de deuda se convierten en bienes concretos, en empresas del Estado, en minerales, en lagos, en montañas enteras, a lo que estamos aconteciendo es a un proceso de enajenación del territorio sin haber disparado ni un solo tiro.

Nos van a sacar las cosas por teléfono, dijo Perón en 1953.

Es un proceso de Ocupación Territorial a través de la Inversión Extranjera.

Deuda por territorio

El 11 de enero de 2017, a través del decreto 29/2017, el presidente Mauricio Macri facultó al Ministerio de Finanzas a tomar deuda por 20.000 millones de dólares y definió la jurisdicción a favor de tribunales en Nueva York y Londres. Acto seguido, dejó constancia de la renuncia de la Argentina a la Inmunidad Soberana y excluyó de este desistimiento a las reservas del Banco Central, los bienes diplomáticos, la herencia cultural, los depósitos bancarios y otros medios de pago.

Sin embargo, el decreto nada dice en su cuerpo de los bienes comprendidos en el artículo 236 del código civil. Se termina incluyendo expresamente como prenda a los Recursos Naturales, en caso de que Argentina no pueda afrontar el pago de intereses o del capital de deuda. Los Recursos Naturales, es decir el territorio mismo de la Nación, como garantía de la deuda.

El articulo 236 habla de las minas de oro, plata, piedras preciosas, sustancias fósiles (petróleo, carbón y gas). También Lagos no navegables y todos los bienes adquiridos por el Estado Nacional. Es decir que la guita es lo que menos le importa. Están más bien ávidos de riqueza. De riqueza natural y de espacio geopolítico.

En este punto lo interesante es preguntarse por “el cómo” se llevaran esas riquezas naturales de nuestro territorio.

El mecanismo concreto por el cual se apropiarán las Grandes Empresas Transnacionales de nuestras riquezas minerales se llama Inversión Extranjera Directa.

El Código Nacional de Inversiones no ha sido modificado y rige desde los tiempos de Carlos Saúl Menem.

Llamarlo laxo sería un halago.

Pueden invertir, llevarse sin ningún tipo de auditoría los Recursos Naturales, contaminar municipios enteros y hacer responsable al Estado de la restauración del ecosistema dañado. Pueden retirar como quieran, en la cantidad que quieran y cuando quieran las ganancias. No ha sido regulado el tipo de contratación laboral, ni se exige la obligación de contratar personal jerárquico nacional. No permiten la fabricación bajo licencia lo que obliga a que sean ellos siempre los que produzcan ese bien.
Una cuestión tan compleja como las Inversiones Extranjeras está regulada en tan solo 10 artículos.

Ley de inversiones extranjeras de 1993 y aun vigente:

http://servicios.infoleg.gob.ar/infolegInternet/anexos/55000-59999/56254/texact.htm

Tenemos hoy en la Argentina el Código de Inversiones del menemismo y la Ley de Entidades Financieras de la última dictadura cívico-militar.

Esos dos andamiajes jurídicos constituyen el plexo legal de la dependencia.

La falsa dicotomía entre capital financiero vs capital productivo esconde que los Grupos Económicos comen de las dos manos.

Identificar como problema para la soberanía nacional solo al capital financiero especulativo es muy inocente.

No son solo los bancos. Son también LAS EMPRESAS TRANSNACIONALES las que saquean nuestras riquezas.

El neoliberalismo no solo es financiero. También es extractivo.

Si continúan hoy vigentes el Código Nacional de Inversiones y Ley de Minería del menemismo, sumados a la Ley de Entidades Financieras de la última dictadura genocida, reconstruir el país para que sea un lugar digno de ser vivido será imposible.

Los años pasan rápido y estos temas nunca aparecen en agenda.

¿No habrá llegado el momento de discutirlos?

Gustavo Koenig – Sociólogo de la Universidad de Buenos Aires

Argentina: deuda por territorio – La Inversión Extranjera Directa y las tripas de la abuela

Internacional

LANZAN UN INFORME PARA AVANZAR HACIA UN MUNDO SIN MINERÍA

18/09/2021
¿Es posible imaginar un mundo sin minería? Eso es lo que se propone el informe El fin de la minería, lanzado por Ecologistas en Acción. El documento es un ejercicio de prospectiva y está escrito desde un futuro imaginado en 2050, para contarnos lo que nos deparan las tres próximas décadas.
Fuente: ecologistas en acción
El informe «El fin de la minería» invita a imaginar un mundo sin minería en un momento el que están surgiendo centenares de nuevos proyectos mineros en el Estado español.
La minería es una de las industrias más contaminantes del mundo y una de las principales responsables del cambio climático.
La organización ecologista advierte que las políticas de circularidad continuarán fracasando mientras no se considere seriamente la necesidad de dejar los minerales en el suelo.
En un momento en el que están surgiendo centenas de nuevos proyectos mineros en toda la geografía del Estado, el informe explora las contradicciones del discurso dominante acerca de la imposibilidad de vivir sin más minería.

Ecologistas en Acción considera fundamental invitar a imaginar un mundo sin minería (o al menos con mucha menos, en lugar de ir a más) para que las imágenes positivas del futuro ayuden a la ciudadanía, a los movimientos sociales y a responsables políticos a tomar medidas.

El informe, lejos de la ciencia ficción, presenta una nueva narrativa del futuro construida sobre las evidencias científicas disponibles. Para ello, analiza las alternativas existentes y emergentes como el fin de la obsolescencia programada y el aumento de la reparación, reutilización y refabricación de bienes, el cambio hacia los sistemas de energía distribuida y comunidades energéticas, o los sistemas de movilidad menos dependientes del coche particular. Estas y muchas otras transformaciones serán fundamentales en una transformación hacia sociedades que se alejen del mito del crecimiento y que estén basadas en el bienestar y las necesidades reales.

Entre otros ejemplos, el informe presenta los avances en campos como la fitominería –la extracción de metales en suelos contaminados mediante plantas y hongos hiperacumuladores– o la investigación sobre baterías de proteínas sin metales que haría innecesaria la minería para baterías.

Pero más allá de estas soluciones técnicas, El fin de la minería muestra cómo se está minando en los sitios equivocados. Solo en la UE hay más de 500 millones de teléfonos acaparados en cajones, con un valor de 1.300 millones de euros en oro, plata, platino, paladio y cobre recuperables.

Aunque extraer metales como el cobre o el oro de los residuos electrónicos es hasta 13 veces más barato que extraerlos de las minas convencionales, el informe pone el dedo en la llaga al advertir, como una de las razones del fracaso de las políticas de circularidad, que ninguna ha considerado seriamente la necesidad de dejar los minerales en el suelo y en el fondo marino. Algo que sí se ha entendido en otros ámbitos, como con la necesidad de abandonar combustibles fósiles como el carbón.

Una industria netamente destructiva
A pesar de sus esfuerzos por posicionarse –de la mano de las energías renovables y los vehículos eléctricos– como una industria verde y sostenible, la minería es una de las industrias más contaminantes del mundo y una de las principales responsables del cambio climático.

La producción de siete metales –hierro, aluminio, cobre, zinc, plomo, níquel y manganeso– es responsable del 7 % del total de las emisiones de gases de efecto invernadero y una de las principales causas de violaciones de los derechos humanos, inestabilidad política y desplazamientos forzados en el Sur global.

Pero, como enfatizan en Ecologistas en Acción, «la buena noticia es que se puede dejar atrás la economía lineal, de usar y tirar, centrada en el consumo excesivo y el crecimiento del PIB, para pasar a una economía circular centrada en la suficiencia, el bienestar y la distribución justa y equitativa». El informe El fin de la minería avanza cuáles pueden ser algunos de los caminos en esa dirección que pueden ayudar a nuestras sociedades a un cambio de narrativa en el momento actual de resistencia frente al emergente boom minero.

Metales: los combustibles fósiles del siglo XXI
La transición hacia una sociedad neutra en carbono se está centrando en gran medida en soluciones tecnológicas e innovaciones tales como el cambio a gran escala a las energías renovables, la sustitución por vehículos eléctricos de 1.400 millones de coches de gasolina y diésel y la digitalización de nuestras sociedades y economías. Sin embargo, el modelo económico subyacente permanece prácticamente inamovible: extraer, consumir, desechar. Un modelo que favorece al Norte Global con un consumo incesante y excesivo y que persigue un eterno crecimiento económico a expensas de la naturaleza.

Las llamadas tecnologías e infraestructuras verdes conllevan un aspecto esencial que nos es familiar: todas requieren grandes cantidades de metales y minerales. Esto implica la apertura de más y más minas, exacerbando las consecuencias medioambientales y sociales del extractivismo. Los metales se han convertido así en el combustible fósil del siglo XXI.

Cada año la minería avanza hacia nuevas fronteras e invade más espacios naturales y comunidades de todo el mundo. En tierra firme, la exploración se adentra cada vez más en el subsuelo y devora las pocas zonas vírgenes que aún nos quedan. Como ejemplo, en lugar de servirnos como advertencia, el rápido deshielo del Ártico está alentando la minería polar, haciendo que lugares antes inalcanzables sean ahora considerados económicamente viables.

La bióloga marina Sylvia Earle, reconocida a nivel mundial, ha calificado la minería submarina como «la mayor apropiación de tierra de la historia de la humanidad» y, de hecho, los fondos marinos se han convertido en la última frontera para la minería en la Tierra. Ya se han reservado más de 1,3 millones de kilómetros cuadrados de fondos oceánicos para la exploración minera. A pesar de que los científicos están advirtiendo sobre la pérdida irreversible de biodiversidad a gran escala que esto supondría, algunos países y empresas tienen la intención de comenzar a minar en aguas internacionales a partir de 2023.

Ante este incesante impulso hacia la extracción, se nos plantean algunas preguntas existenciales. ¿Puede la humanidad permitirse la pérdida de grandes extensiones de naturaleza, tanto en tierra firme como en los fondos marinos, para alimentar una economía de «crecimiento verde» que solo beneficiará a unos pocos en el Norte Global? ¿Debemos seguir dando espacio a las economías extractivas en el siglo XXI? ¿Podemos imaginar una sociedad capaz de combatir el cambio climático y el colapso ecosistémico al mismo tiempo que deja atrás la extracción de recursos?

Objetivo de este informe: reconsiderar los metales y la minería
Informes recientes del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC, por sus siglas en inglés) y de la Plataforma Intergubernamental Científico-normativa sobre Diversidad Biológica y Servicios de los Ecosistemas (IPBES, también por sus siglas en inglés) han alertado al mundo acerca del devastador impacto de la actividad humana sobre la naturaleza y el clima. La solución es difícil pero clara: un cambio transformador.

Este informe propone algunos itinerarios posibles para llevar a cabo este cambio transformador. Representa una visión científica, basada en evidencias, de un mundo en el que la minería terrestre ha quedado obsoleta y las profundidades marinas están protegidas frente a la invasión minera. Ofrece una alternativa al enfoque continuista aplicado en la mayoría de los escenarios globales planteados acerca de la futura demanda de metales (Banco Mundial2, Panel Internacional de los Recursos3, Agencia Internacional de la Energía4, Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos5), que presuponen un crecimiento continuo del consumo y la producción expresado como Producto Interior Bruto (PIB).

Por lo general, estos escenarios de crecimiento predicen al menos una duplicación o cuadruplicación de la demanda de metales para 2050 o 2060. Romper con esta visión continuista y vislumbrar un futuro diferente es clave para elaborar políticas efectivas que puedan prevenir este esperado despliegue de la minería.

Este informe toma el año 2050 como punto de referencia. Este desplazamiento temporal permitirá al lector-participante adentrarse en la enorme transición hacia una sociedad mucho menos intensiva en recursos, equipada para hacer frente a los impactos del cambio climático, para revertir la pérdida de biodiversidad del siglo anterior y para liberarse de la extracción de recursos.

El informe está estructurado de la siguiente manera:

2050: un mundo post-minería nos traslada a una visión alternativa del futuro;
2020: el momento crítico de la minería explica algunas de las tendencias actuales, ayudando al lector a comprender el cambio que se avecina;
Semillas del cambio destaca los numerosos cambios y las nuevas formas de actuación ya presentes en 2020 y que permitieron que se produjera la transformación;
Una brújula para el futuro profundiza en el cambio de paradigma alejado de la minería de la década de 2020;
El taller «Imaginar un mundo sin minería» presenta un concepto de taller en el que se visualizan diversos itinerarios hacia un futuro sin minería, animando al lector a adoptar sus propias vías de actuación.
Empecemos pues por proyectarnos hacia el año 2050, un mundo en el que la minería se ha convertido en algo del pasado, y veamos cómo hemos llegado hasta aquí visitando las semillas del cambio que ya están brotando en 2020.

Un documento para leer, analizar, debatir y construir alternativas. https://noalamina.org/wp-content/uploads/2021/09/El_fin_de_la_mineria_es.pdf

Lanzan un informe para avanzar hacia un mundo sin minería

Internacional

Un mundo sin minería: un objetivo necesario que debemos atrevernos a imaginar

Silvia Román
18/09/2021
En los últimos años no dejamos de ver noticias relacionadas con la descarbonización de la economía que omiten cualquier cuestionamiento del modelo de crecimiento constante que dirige actualmente el destino de nuestras sociedades. Algunos van aún más lejos y utilizan el dogma de la solución tecnológica como base para hablar de un desacoplamiento de la economía y los recursos naturales, postulando, de forma contraria a cualquier principio natural, que seremos capaces de crecer indefinidamente en el número de bienes y servicios que ofrecemos y consumimos sin que ello repercuta de manera relevante en los ecosistemas que habitamos.

Sin embargo, la realidad no deja de desmentir estas propuestas. No es ninguna novedad que la transición a las energías renovables y la paulatina electrificación de diversos sectores va a venir acompañada de un uso intensivo de materias primas, en concreto de ciertos metales indispensables para las nuevas tecnologías. Tampoco es ninguna novedad que en paralelo a este incremento de la demanda prevista de materias primas se está dando alas a nuevos proyectos mineros, entre ellos algunos que podrían traer consigo gravísimas consecuencias medioambientales, como la minería de los fondos oceánicos, otros que tras el oxímoron de minería sostenible esconden las mismas prácticas de siempre y, por último, algunos con tintes más extravagantes, como la minería de asteroides o la minería lunar.

Estudios recientes[1] muestran que las actividades mineras dirigidas específicamente a la producción de energía renovable exacerbarán las amenazas a la biodiversidad en todo el planeta. Se calcula que una extensión de hasta 50 millones de km2 de la superficie terrestre podría verse afectada por estas actividades extractivas, incluyendo áreas protegidas y algunas de las pocas zonas vírgenes que aún quedan en el globo. Las consecuencias inmediatas ya las conocemos: degradación del suelo debido al drenaje ácido de las minas, deforestación, estrés hídrico y contaminación. Parece así que el proyecto de la transición energética sigue obviando que el paradigma extractivista no es ya una estrategia viable para asegurar el bienestar de nuestras sociedades y la conservación del medioambiente.

Así, mientras las élites globales responsables de las grandes decisiones habitan en esta contradicción por una notable falta de audacia, la población asiste confusa a un goteo constante de catástrofes naturales y acontecimientos biológicos de alcance global que nos sume a todos en un inquietante dilema: ¿somos capaces de imaginar un futuro mejor o vivimos presos de visiones distópicas que atenazan nuestra capacidad para actuar? Pues bien, imaginar un futuro mejor es el ejercicio que nos proponen Joám Evans Pim y Ann Dom (Seas at Risk) en el informe recién publicado Breaking free from mining (disponible en castellano como Un mundo sin minería).

En este concienzudo trabajo, los autores nos hacen soltar amarras desde este presente atenazador hacia un 2050 en el que ya ha tenido lugar un cambio verdaderamente transformador. Nos hacen situarnos en este futuro propicio e investigar cómo hemos llegado hasta él, qué cambios fueron necesarios, qué decisiones clave hubo que tomar y cómo de cerca tuvimos que estar del abismo para retroceder.

Con una acertada combinación de rigor e imaginación, el informe hace un pormenorizado repaso a la bibliografía más reciente y los datos más reveladores publicados por organizaciones como el Banco Mundial, el Panel Internacional de los Recursos, la Agencia Internacional de la Energía o la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos para llegar a la conclusión de que los escenarios propuestos por estas instituciones se aferran a un tecno-optimismo que evita cuestionarse el modelo de crecimiento constante actual y fía nuestra suerte a las cartas de la eficiencia y la innovación.

Sin embargo, nos muestran los autores, la solución tecnológica no será suficiente. Es cortoplacista y superficial, y en muchos casos ha demostrado ser una propuesta que refuerza el paradigma extractivista con el fin de sostener un crecimiento verde que solo beneficia a los países y regiones hiperdesarrolladas. La demanda de sistemas de almacenamiento de energía para el aprovechamiento de las renovables, los vehículos eléctricos, la digitalización, la urbanización y un aumento general en el consumo de recursos entre una población siempre creciente evidencian la insostenibilidad de un sistema aferrado al crecimiento del PIB como parámetro de referencia de lo que es una sociedad próspera. La pregunta clave entonces es la siguiente: ¿somos capaces de imaginarnos un modelo más viable que el del extractivismo?

La respuesta puede estar más cerca de lo que imaginamos. Muchas de las semillas del cambio de las que habla el informe ya están arraigando. Tímidamente, quizás, pero también es cierto que la pandemia de COVID ha tenido un efecto sensibilizador que seguramente promueva cambios antes de lo pensado. Iniciativas en el ámbito de la economía circular, la tecnología, la eficiencia y la innovación son pasos importantes si se dan en la dirección correcta. Pero el verdadero cambio debe ser más profundo. Deberá desafiar las estructuras económicas vigentes y orientarse hacia una economía centrada en la suficiencia antes que en la eficiencia, en la desaceleración controlada, en el bienestar de todos los pueblos y en una distribución justa y equitativa de los recursos.

Desde este futuro posible del 2050, el informe repasa los que fueron cambios fundamentales para llegar allí. Cambios en la producción y el consumo de energía, en los sistemas de movilidad, en la obsolescencia programada y la percibida, la gestión de residuos, las nuevas formas de pensar las ciudades, el mundo rural, las viviendas y, en general, una nueva forma de vivir el espacio y el tiempo más humana, alejada de muchas de las concepciones patológicas del mundo actual.

En el ámbito particular de la minería, el informe incide en la importancia que tendrán en el futuro las materias primas secundarias, esto es, los materiales recuperados de los desechos electrónicos, residuos de la construcción, vertederos urbanos… Es la llamada minería urbana y de residuos, una vía que merece la pena explorar en un momento en que la cantidad de algunos materiales ya extraídos del subsuelo es equivalente o incluso mayor a la que permanece sin extraer (es el caso del cobre, del que un 50% de las reservas globales ya está sobre la superficie terrestre). En nuestros cajones y vertederos residen olvidados materiales que podrían aliviar la necesidad de minar la tierra.


Reciclaje de metal en Eugene, Oregón (EE. UU.). Fuente: Wikimedia Commons.
El informe abunda en referencias imprescindibles que por sí mismas dibujan un escenario de evidencias, propuestas y lecturas de una sociedad actual sin velos, sin cortinas de humo, sin descaradas estrategias de greenwashing. La minería sostenible, la compensación ecológica y otros términos de reciente cuño apenas esconden posturas instaladas en un modelo fracasado que solo ha servido para beneficio de una minoría global. Las actividades extractivas destruyen el entorno en el que trabajan. No hay compensación posible cuando se habla de trabajo infantil, de condiciones laborales mortales, de explotación de personas y violaciones de derechos humanos. Resulta obsceno ver cómo los lobbies y corporaciones de esta industria presionan a los políticos en busca de nuevas zonas de sacrificio con vanas promesas de creación de empleo, progreso y desarrollo que nunca llegan a materializarse.

Como aportación personal a este completo trabajo de Joám Evans Pim y Ann Dom, me gustaría incidir en dos realidades que creo habrá que tener muy en cuenta en los próximos años. La primera se refiere a las políticas de innovación de la Unión Europea y la financiación asociada a las mismas. Desde programas como Horizonte 2020 e instituciones como EIT RawMaterials se han venido financiando proyectos relacionados con las materias primas con escaso o ningún interés en promover soluciones medioambientalmente viables. Más bien parece que se estuvieran buscando nuevas periferias dentro de la Unión Europea de las que extraer la poca riqueza que aún queda. Sus actores, en la mayoría de los casos representantes de la industria minera acompañados de políticos regionales que hacen de embajadores para estas corporaciones, utilizan un desgastado discurso que culpabiliza al ciudadano haciéndole ver que es necesario seguir minando la tierra para satisfacer sus necesidades materiales. ¡Cuántas veces habré asistido al argumento falaz de que la minería en suelo europeo es necesaria porque todos queremos tener un teléfono móvil en nuestros bolsillos!

La segunda reflexión que me gustaría hacer está referida a algunas de las propuestas actuales dirigidas a un futuro con modos de vida más sencillos, con consumos suficientes y no exorbitados como los actuales. Algunas de las más habituales incluyen la reducción de las horas y días de trabajo, el cambio de la propiedad de coches o viviendas al uso compartido, la reducción de los viajes, la reparación antes que la compra de nuevos productos, etc. Me inquieta pensar que estas mismas propuestas que deberían funcionar en un futuro mejor para todos se conviertan en distopías para una parte de la población distorsionadas bajo el paradigma neoliberal. ¿Se convertirán estas ideas en una vida en precario para una parte de la sociedad (sin trabajos estables, sin posibilidad de acceder a vivienda o bienes básicos, sin acceso a actividades de ocio) no como fruto de una elección sino de una desigualdad creciente? ¿Cómo distinguir cuándo estamos defendiendo una idea que nos llevará a un futuro mejor de una que, con el mismo resultado, solo implique precariedad en una sociedad dual de clases medias acomodadas y consumistas por un lado y clases bajas en riesgo constante de pobreza por otro?

Lo que parece claro es que la suciedad debajo de la alfombra no es tecnológica, sino política y social, de convivencia y de valores. No hay solución tecnológica que enderece los resultados de un modelo político y económico regido por los principios del crecimiento constante y la competitividad. ¿Somos entonces capaces de imaginar un futuro mejor para todos? En mi humilde opinión creo que no debemos tener en mente una utopía a la que llegar, sino un mundo por el que trabajar con constancia y convicción. Como advierte el sociólogo Hartmut Rosa en su obra Alienación y aceleración, “la lógica de la competencia y la aceleración no tiene ningún freno o límite interno”. De esta ausencia de frenos o límites internos nos hablaba también Max Weber al afirmar que el capitalismo no llegaría a su final antes de que “la última tonelada de mineral se funda con la última tonelada de carbón”. No podemos sentarnos a esperar que llegue el fin de un orden económico que por sí mismo no será capaz de parar. Por eso es tan importante actuar, empezando por deshacernos mentalmente de distopías paralizantes y atrevernos a imaginar.
Casdeiro, after Tony Hisgett & ELG21
Notas
[1] Sonter, L.J., Dade, M.C., Watson, J.E.M. et al. Renewable energy production will exacerbate mining threats to biodiversity. Nat Commun 11, 4174 (2020). https://doi.org/10.1038/s41467-020-17928-5

Un mundo sin minería: un objetivo necesario que debemos atrevernos a imaginar