Brasil

El extractivismo acelera la destrucción de la Casa Común afirman entidades eclesiales

el 7 al 11 de agosto tuvo lugar en Brasilia el Encuentro con representantes de las comunidades víctimas de la minería de América Latina. Este evento fue coorganizado por el Departamento de Justicia y Solidaridad del CELAM (DEJUSOL), El Grupo de Trabajo sobre Minería de La Conferencia Nacional de Obispos de Brasil (CNBB), La Alianza Internacional de Instituciones por la Justicia Global (CIDSE) y la Red Iglesias y Minería.

“Hemos compartido con mucho dolor los graves y muchas veces irreversibles daños y violaciones a los derechos humanos y los derechos de la naturaleza que provoca el actual modelo minero extractivista… nuestros pueblos son condenados a un presente y futuro de destrucción y muerte. Es urgente poner límites a este modelo de desarrollo extractivista, como nos señala el papa Francisco” Afirman los participantes en el Encuentro.

Durante el encuentro, se lee en la carta pública difundida al final del evento, “tuvimos la oportunidad de compartir con las víctimas de la minería y con defensores y defensoras de Nuestra Hermana y Madre Tierra[1], constatando como los gobiernos de América Latina no están exentos de responsabilidad en las graves violaciones a derechos humanos que se cometen en contra de la humanidad. En nuestro continente, por ejemplo, el 60% de los asesinatos corresponde a defensores y líderes comunitarios”.

Resuena en nuestros oídos y en nuestros corazones el desgarrador grito de “socorro” de don Ireneo, un poblador de la Comunidad de Santa Rita, Paracatu, Brasil, quien lleva en su cuerpo un elevado porcentaje de arsénico, como resultado de la contaminación por la mina cercana a su comunidad. Este grito de “socorro”, resuena cada vez con más fuerza y con mayor frecuencia en nuestro continente. Frente a esta desgarradora y avasalladora realidad, como nos lo recuerdan, el papa Francisco[2] y la Conferencia Episcopal Latinoamericana, No podemos seguir respondiendo como Caín: “¿Acaso soy yo el guardián de mi hermano?”. [3]

Las orientaciones que nos hicieron llegar tanto Monseñor Bruno-Marie Duffé (Secretario del Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral del Vaticano), como el Cardenal Pedro Barreto Jimeno (Arzobispo de Huancayo y Vicepresidente de la REPAM), fueron fundamentales para afirmar que como iglesias estamos llamados a dar razones y caminos de fe y esperanza de que otro mundo es posible, un mundo donde impere el respeto y el cuidado a la vida natural de la cual forma parte la humanidad. En esta línea:

  • Reafirmamos nuestro compromiso de denunciar estas prácticas de muerte y demandar cambios estructurales tanto en la forma abusiva, destructiva e irresponsable de un extractivismo desenfrenado, como en la tolerancia cómplice de nuestros gobiernos que niegan reiteradamente el acceso a la justicia a las víctimas, fomentando prácticas de impunidad y corrupción.

  • Ratificamos nuestra vocación y decisión de seguir promoviendo la vida, acompañando los esfuerzos y las luchas de las comunidades afectadas por la minería y otros proyectos extractivistas que afectan gravemente la vida y el futuro de la madre tierra y de todos los seres a quien ella sustenta. Invitamos a otras organizaciones y movimientos sociales a unir fuerzas en estas luchas a favor de las comunidades, sus territorios, culturas y espiritualidades.

  • Llamamos a las jerarquías y demás responsables de nuestras iglesias a asumir un mayor compromiso junto a quienes sufren las consecuencias de este modelo económico de producción desenfrenada, consumismo voraz y depredación sin límites de la naturaleza. Las orientaciones de la Encíclica Laudato SI y de la Carta Pastoral del CELAM sobre Ecología Integral deberían servir para impulsar un nuevo tipo de iglesia, un nuevo tipo de sociedad, una nueva Economía y una nueva forma de relación con el conjunto de la Creación.

  • A las comunidades y pueblos que resisten los embates del extractivismo, exponiendo sus propias vidas, les agradecemos su ejemplo, valentía y profetismo. Sus luchas y acciones exigen y demuestran al mundo que otra economía y otras relaciones son necesarias, posibles y urgentes. Queremos aprender de ellos, caminar con ellos, ser evangelizados por sus acciones y propuestas, construir juntos alternativas que garanticen el Buen Vivir armónico en nuestra tierra.

  • Requerimos de nuestros Estados, una mayor responsabilidad en la administración del Bien Común, una lucha frontal contra la corrupción, la implementación y el control riguroso de normas y leyes que garanticen los derechos humanos individuales y comunitarios, los derechos de la naturaleza y el derecho fundamental de los pueblos a decidir sobre su propio desarrollo, garantizando efectivos procesos de Consulta, Libre, Previa, Informada y de Buena fe, así como el respeto a las decisiones de los pueblos surgidas de estos procesos.

  • Llamamos también al mundo empresarial a eliminar sus prácticas de explotación criminal, irresponsable y depredadora de vidas, territorios y culturas que nos están llevando a convertir nuestra Casa Común en un “inmenso depósito de porquería”[4], tal como lo indica el papa Francisco.

  • Ha llegado la hora en que cada persona asumamos la responsabilidad de construir otros modelos de producción que garanticen la vida de las futuras generaciones y respeten a la madre tierra, de impulsar un consumo básico y responsable y de apostar por nuevas formas de entender el desarrollo integral.

    Fuente:https://iglesiasymineria.org/2018/08/29/el-extractivismo-acelera-la-destruccion-de-la-casa-comun-afirman-entidades-eclesiales/

Brasil

Comunidad de Santa Rita en Minas Gerais reclama solidaridad de las iglesias

¡Socorro! Socorro Argentina, socorro Colombia, socorro Perú, socorro Europa, socorro Canadá, Socorro todos, ayúdennos a resistir y lograr que la empresa y el gobierno nos indemnice, nos reubique, sea responsable de la salud de nuestros hijos, de nuestros padres y de todos nosotros. Necesitamos de su solidaridad. Nuestros derechos tienen que ser respetados. Nuestro Dios no nos puede abandonar y nos manda sus ángeles para darnos fuerza.”

Quien levanta sus gritos es don Irineo, poblador de Santa Rita, ubicada en Paracatu, en el estado de Minas Gerais. Irineo tiene unos 50 años y ha sido afectado gravemente por la minería. No solo ha quedado con su territorio completamente dañado, sino que además los minerales tóxicos que toma y que respira día y noche, le han generado un cáncer que ya le quitó el ojo derecho.

“Hace unos 20 años, era una zona llena de vida. Ésta fue una tierra buena donde crecía y producía todo lo que se sembraba. Teníamos gallinas, vacas, frutas, maíz, frejol, verduras y sobre todo agua limpia en nuestro río”, dice doña Geralda, una anciana de 87 años, que también vive en Santa Rita y vio cómo la minería acabó con ese su hermoso paraíso.

“Nuestras casas han quedado circuladas por grandes represas donde la minera arroja, todos los días, toneladas de desechos minerales, venenos poderosos llenos de cianuro, arsénico, plomo y muchos otros metales pesados. A quinientos metros está ubicada una represa totalmente llena, cuyos líquidos mortales han penetrado en la tierra y contaminado todas las aguas subterráneas y tierras a su alrededor. A mil metros, por este otro lado una represa que ya está llena con miles de toneladas de desechos tóxicos de la minería.”, cuenta Geralda.

Los gritos de Irineo, los gritos de Geralda, los gritos de la comunidad, de la tierra, del aire y el agua, han calado para siempre el corazón de hombres y mujeres, unas treinta personas, provenientes de más de 10 países latinoamericanos que han llegado a Brasilia para participar en el “Encuentro de Afectados y Afectadas por la Minería”, coorganizado por el CELAM, DEJUSOL, CNBB, CIDSE y la Red Iglesias y Minería.

En la ciudad de Paracatu, ubicada en el noroeste de Minas Gerais, se encuentra la mayor mina de oro de Brasil y la más grande a cielo abierto del mundo. Muy cerca de la ciudad y en medio de comunidades agrícolas y ganaderas. La empresa minera es la canadiense KinrossGold Corporation. La proximidad con la ciudad y las comunidades son una de las principales causas de preocupación por la gran cantidad de residuos tóxicos, minerales pasados y polvo que invaden las casas, los terrenos, los ríos y toda la región.

Los afectados/as por la minera en Santa Rita, aseguran, que para producir 15 toneladas de oro al año, la empresa debe remover más de 500 toneladas de terrenos y utilizar prácticamente toda el agua de la zona. Además de almacenar los desechos tóxicos en gigantescas represas que están también a cielo abierto. Como asegura el papa Francisco, en su encíclica Laudato si, en nombre del desarrollo y del progreso “hemos convertido a la hermana tierra en un gran depósito de porquerías.”

Al finalizar, la visita a la comunidad de Santa Rita, cada uno de los delegados/as latinoamericanos, sacudidos por los gritos de Irineo y Geralda, comentaron sobre el impacto de estos testimonios durante la visita y diálogo con los moradores de dicha comunidad, para sus vidas y luchas cotidianas. El padre Dário Bossi, miembro del equipo de coordinación de la Red Iglesias y Minería, hizo un resumen de estas impresiones y emociones.

“Una experiencia de lucha que me motiva a seguir luchando. Siento mucha impotencia, tristeza, indignación, coraje, rabia, angustia. Todo lo que genera la ambición al poder, al dinero. Nos cuestiona. Nos habla de la urgencia de defender la vida. Tenemos que seguir construyendo comunión entre las organizaciones que resisten. Hay un abandono total del gobierno. Doña Geralda y don Irineo son todo un símbolo de las personas abandonadas, de las personas desechadas por este sistema que descarta y acaba con la gente y la madre naturaleza. Debemos ayudar a que este caso sea conocido por el mundo.”

Fuente:https://iglesiasymineria.org/2018/08/08/comunidad-de-santa-rita-en-minas-gerais-reclama-solidaridad-de-las-iglesias/

Brasil, Latinoamerica

«Oir el clamor de la Tierra, oir el grito de los pueblos»

Se está celebrando en Brasilia el II Encuentro de Afectados/as por la Minería en América Latina, que es una continuación del realizado en Roma en 2015, y que desde 7 a 10 de agosto, reúne a 35 representantes que han llegado de 9 países.

Son personas con gran experiencia en las luchas contra los impactos que esta práctica está suponiendo en Latino-américa, muchos de los cuales ponen su vida en riesgo como consecuencia de la defensa de los bienes comunes y el derecho de la naturaleza y de los pueblos. La mayoría de los presentes son laicos y laicas, a los que se unen algunos religiosos y religiosas. Junto con ellos se encuentra el Presidente del Grupo de Trabajo sobre Minería en la CNBB – Conferencia Nacional de los Obispos de Brasil, Monseñor Sebastião Duart, obispo de Caxias, en el estado de Maranhão.

El Cardenal Pedro Barreto, obispo de Huancayo, Perú, y Vicepresidente de la Red Eclesial Panamazónica – REPAM, en un vídeo enviado a los participantes ha dado algunas claves que pueden servir a la hora de enfrentar los problemas derivados de la Minería. Además de reflexiones sobre esta problemática, se están llevando a cabo visitas de campo, lo que, en opinión de Dário Bossi, «es muy importante porque podemos tocar la piel de las personas afectadas en Paracatú, los impactos de la minería y así poder tener más concreción de los impactos que cada uno de los participantes del encuentro trae desde sus países».

El texto que está siendo estudiado ha sido escrito por Monseñor Bruno-Marie Duffe, Secretario del Dicasterio para el servicio del Desarrollo Humano Integral del Vaticano, ayudando a reflexionar sobre el papel de la Iglesia frente a los impactos negativos de la Minería. El texto tiene como punto de partida la Encíclica Laudato si,»que nos llama a una consideración conjunta de la tierra, de la comunidad y de nuestra relación con las riquezas naturales», destacando que recibimos de Dios y de los antepasados la tierra, que tiene riquezas y límites y que somos llamados a cuidar con responsabilidad, lo que entra en conflicto con un desarrollo económico sin límite.

Monseñor Duffe, ve la necesidad de que la Iglesia se preocupe con las minas, pues estamos hablando de la creación, que es un bien común, con la dignidad de los pueblos y con el respeto de sus derechos humanos, especialmente de los más pobres. Por eso, «en este debate, la Iglesia tiene una misión de vigilante, de ser voz de – y con – los pobres, de facilitar el intercambio de experiencias y conocimientos, de aconsejar. Su misión es profética, tiene que denunciar las violencias hechas contra los pueblos pobres», resalta el Secretario del Dicasterio vaticano, añadiendo que «la iglesia tiene que anunciar que otra política es posible», garantizando «una protección a la tierra y a las comunidades». Todo ello teniendo como base la Doctrina Social de la Iglesia.

Desde los conceptos de «ecología integral» y «revolución ecológica», somos llamados a vivir con responsabilidad, para poder hacer realidad un «desarrollo humano integral», para asumir la identidad de cada uno y, desde una ética de la responsabilidad, abrir «un camino a pensar el futuro de la creación y de la humanidad», señala Duffe.

Esta reflexión, cobra especial actualidad en América Latina, donde «estamos viviendo hoy una situación de extremo peligro y de máxima conflictividad de las comunidades afectadas por la mineración», como reconoce Moema Miranda, quien insiste en que los riesgos que nacen de la falta de democracia en diversos países, produce que «las leyes de defensa socio-ambiental, construídas con tanta lucha popular son absolutamente desrespetadas».

Falta control sobre las empresas que no respetan la Casa Común, lo que exige, según la miembro de la Red Iglesias y Minería, «una mayor articulación de las comunidades y una firme defensa de la Iglesia de todas las condiciones de vida de la población», haciendo realidad el deseo del Papa Francisco, «oír el clamor de la Tierra, oír el grito de los pueblos», pues son los más pobres quienes «anuncian un tiempo nuevo y un futuro que no sea controlado por una economía que mata».

Fuente:http://www.periodistadigital.com/religion/america/2018/08/08/oir-el-clamor-de-la-tierra-oir-el-grito-de-los-pueblos-religion-iglesia-afectados-mineria-brasil.html

Brasil

Encuentro de afectados(as) por la minería en AL deberá dar una respuesta articulada como Iglesia en defensa de las poblaciones y territorios

Logramos hacer una reflexión sobre los impactos de la minería desde los afectados, especialmente para que como Iglesia podamos dar una respuesta articulada en el continente, en la defensa de los territorios y de las poblaciones afectadas.”, manifestó el ambientalista brasileño y franciscano Fray Rodrigo Peret, miembro también de la red Iglesias y Minería.

“Tenemos una tarea muy importante, de sensibilizar las diferentes realidades de la Iglesia para esta realidad que tiene que ver con nuestra vida cristiana y también con un compromiso de Laudato si, para con la vida y el cuidado de la creación.”, agregó.

El encuentro que se desarrolla desde este 8 al 10 de agosto en Brasilia, cuenta con la participación de representantes de comunidades y organizaciones afectadas por la minería en América Latina y la presencia de los obispos de Brasil -CNBB, CELAM, CIDSE y de la red latinoamericana Iglesias y Minería.

El evento analizará la coyuntura de la minería y la realidad eclesial en América Latina, desde una escucha de las realidades de ocho países del continente. Entre otros temas, los participantes debatirán los contenidos, potencialidades y perspectivas de la Carta Pastoral del CELAM: Discípulos Misioneros Custodios de la Casa Común. Así también la dimensión de la comunicación y la formación local, y la presentación de estrategias de CIDSE relativo a la incidencia política de la Carta Pastoral.

De esta manera el Encuentro de Brasilia, en diálogo con la Iglesia institucional, dará continuidad a las iniciativas tomadas en el encuentro de víctimas de la minería, organizado por el Vaticano en julio de 2015. Al finalizar el encuentro está previsto la presentación de la Campaña de Desinversión en Minería por parte de las iglesias.

El Encuentro, forma parte de búsqueda de soluciones radicales que plantea la Iglesia y el papa Francisco en la Laudato si, de suprimir los impactos nocivos de la minería en las personas, en las comunidades, en los territorios y en la naturaleza.

“La minería es una de la principales actividades del capital que afecta la vida y viola los derechos humanos y los derechos de la naturaleza. Como cristianos(as), todos, tenemos un compromiso con la vida, la vida en todo sentido, de las personas, la vida que existe en el planeta. Un compromiso de luchar por la vida, por la dignidad de las personas y de la naturaleza.” Afirmó el franciscano Rodrigo Peret.

Fuente:https://iglesiasymineria.org/2018/08/07/encuentro-de-afectadosas-por-la-mineria-en-al-debera-dar-una-respuesta-articulada-como-iglesia-en-defensa-de-las-poblaciones-y-territorios/

Brasil

Encuentro de comunidades afectadas por la minería en América Latina

Del 7 al 10 de agosto, en Brasilia, Brasil, se llevará a cabo el Encuentro de Comunidades Afectadas por la Minería en América Latina, cuyo objetivo será escuchar a las comunidades afectadas a causa de las prácticas de la minería ilegal y profundizar la solidaridad de la Iglesia con las víctimas de tales prácticas. El Encuentro, coorganizado por la Conferencia Nacional de Obispos del Brasil (CNBB), Dejusol-Celam, Cidse y la Red Iglesias y Minería es la continuación del primer encuentro con los afectados por la minería realizado en el Vaticano, en 2015.

“Sentimos y vivimos también la necesidad urgente de mayor articulación en el fortalecimiento y defensa de las comunidades que están bajo grave amenaza, por la completa falta de respeto a la legislación, incluso donde ya existían leyes, tanto ambientales como sociales”, afirma Moema Miranda, socióloga brasileña, una de las coordinadoras del Encuentro e integrante del grupo impulsor de la Red Iglesias y Minería.

Para Miranda, estas comunidades afectadas por la minería esperan “una Iglesia solidaria, peregrina y amorosa que escucha este clamor, que se hace defensa, que se hace solidaridad. Que abre sus puertas para que las comunidades puedan juntas construir alternativas. Una Iglesia que se pone al lado, que se pone en camino. Necesitamos una alternativa a la economía que tenemos hoy, aunque no es un camino a corto plazo”.

Sobre el desarrollo del encuentro, Miranda explicó que “la elaboración de nuevas estrategias se desarrollará a partir de la reflexión pastoral y teológica de los casos de comunidades afectadas en América Latina, en sintonía con las acciones emprendidas por el grupo de trabajo sobre minería de la Conferencia Nacional de Obispos del Brasil y la experiencia de incidencia política de CIDSE (Una alianza internacional de Organizaciones Católicas para el Desarrollo), iluminados por la Carta Pastoral del Celam sobre ecología integral. Asimismo, el encuentro buscará también vincular estas nuevas estrategias a las del proceso del Sínodo de la Amazonía en territorios afectados y amenazados por la minería”. +

Fuente:http://www.aica.org/34785-encuentro-de-comunidades-afectadas-por-la-mineria-en-america-latina.html

Brasil

Brasil permitirá la explotación minera en el Amazonas para reducir el déficit del país

Es el pulmón de la Tierra, donde se encuentra la mayor cantidad de especies animales y plantas del planeta. Una sola reserva del Amazonas tiene más especies de aves que todo Estados Unidos.

Pero este paraíso, en peligro desde hace tiempo, va a sufrir uno de los golpes más duros en años. El presidente de Brasil abrirá a la explotación privada de cobre y oro nueve reservas naturales que ocupan 47.000 kilómetros cuadrados, una superficie mayor a la de Dinamarca o Suiza.

Un ataque medioambiental sin precedentes con una única finalidad, reducir el déficit del país, pero a costa de lo que sea. «Esta decisión supone, sin duda, el mayor ataque a la amazonia en los últimos 50 años, porque hay que pensar que Brasil, hasta ahora, ha sido realmente el líder referente en la constitución de áreas protegidas», denuncia Luis Súarez, responsable del Programa de Especies de WWF.

La selva amazónica brasileña perdió 800.000 mil hectáreas entre 2015 y 2016, y los ecologistas denuncian que las leyes de Temer eliminarían hasta 30.000 kilómetros cuadrados más de áreas protegidas.

Algo catastrófico, como asegura el responsable de la campaña de bosques de Greenpeace, Miguel Ángel Soto: «Hablamos de una zona remota, muy rica en biodiversidad, donde en algunas zonas se habla de 300 especies arbóreas por hectárea«. Una desprotección del Amazonas que provocaría la desaparición de animales, plantas y también de etnias indígenas.

Fuente:https://www.lasexta.com/noticias/ciencia-tecnologia/brasil-permitira-la-explotacion-minera-en-el-amazonas_2017082559a03c7a0cf27ca1f8fd71fb.html

Brasil

BHP y Vale llegan a un acuerdo con los fiscales brasileños

El gigante minero BHP y su socio en la empresa conjunta Vale llegaron a un acuerdo con el gobierno brasileño para extinguir una demanda por 20.000 millones de reales ($ 5.300 millones) relacionada con la falla de la presa 2015 en la operación Samarco, que cobró 19 vidas.

El acuerdo les permite a las compañías mineras más tiempo para resolver un reclamo civil mayor de 155 mil millones de reales ($ 41.5 mil millones), presentado por los fiscales federales de Brasil en mayo de 2016, en busca de acciones sociales, compensación ambiental y económica por el peor desastre ambiental del país.

El acuerdo de gobierno entre Samarco, BHP, Vale, el gobierno federal y los estados de Espirito Santo y Minas Gerais, anunciado el lunes, prevé la suspensión del reclamo de 155.000 millones de reales durante dos años.

Durante este período, las partes acordaron diseñar un proceso único para la renegociación del acuerdo marco de marzo de 2016 y avanzar en la resolución del reclamo civil.

El acuerdo recomienda mejoras en el gobierno de la Fundación Renova, que se estableció para llevar a cabo programas ambientales y socioeconómicos para proporcionar una compensación por los daños causados ​​por la falla de la presa.

Las partes también acordaron una mayor participación de la comunidad en las decisiones relacionadas con los 42 programas de remediación y compensación que se desarrollaron después de la falla de la presa, que destruyó varias comunidades.

A pesar del acuerdo, el destino de la operación de Samarco sigue siendo incierto, ya que requiere dos permisos para reanudar las operaciones.

Las operaciones se suspendieron en noviembre de 2015, luego del colapso de la presa de relaves de mineral de hierro.

Fuente:https://mineriaenlinea.com/2018/06/bhp-y-vale-llegan-a-un-acuerdo-con-los-fiscales-brasilenos/

Brasil

BRASIL cambia códigos ambientales para fomentar minería

Brasil

Gobierno brasileño planea emitir decreto para reestructurar normativa minera y acelerar permisos de explotación

Brasilia.-El presidente de Brasil, Michel Temer, planea emitir la próxima semana un decreto para reestructurar las reglas sobre permisos mineros, eludiendo el paso por el Congreso después que el año pasado fracasó la aprobación de cambios similares, dijeron a Reuters dos personas con conocimiento directo del asunto.

Las fuentes, que solicitaron anonimato porque el decreto aún no se ha hecho público, dijeron que el objetivo es reducir la burocracia y atraer inversiones al sector de la minería, ya que obtener permisos para abrir nuevas minas puede tomar una década o más tiempo.

El decreto, que sería firmado en una ceremonia el 12 de junio, abriría casi 20.000 áreas de exploración donde los pedidos de permisos se han estancado o han sido abandonados, según una fuente.

Dichos bloques, que representan alrededor de un décimo de las áreas en Brasil con permisos pendientes, estarían sujetos a nuevas subastas.

Representantes de la oficina de prensa de la Presidencia no respondieron de inmediato a una solicitud de comentarios.

«Con este (decreto), aseguraremos nuestro atractivo para el capital extranjero», dijo la segunda fuente. «Habrá la seguridad legal necesaria para que las personas inviertan en Brasil».

Fuente:https://www.americaeconomia.com/economia-mercados/gobierno-brasileno-planea-emitir-decreto-para-reestructurar-normativa-minera-y

Brasil

Derrame de pulpa de hierro de Anglo American en Brasil genera multa de 37,5 millones de dólares

A partir del pasado 12 de marzo del 2018, y por largos 17 días, el rompimiento de un mineroducto de la compañía Anglo American en Brasil generó un desastre ambiental de proporciones, en vista que se derramaron 1.121 toneladas de pulpa de hierro en el manantial que alimenta y abastece Santo Antonio do Grama (4.200 habitantes, a 200 kms de Belo Horizonte).

La primera ruptura se produjo el 12 de marzo, forzando a Anglo American a paralizar sus operaciones por dos semanas, y el 29 de marzo se registró otro escape, lo que provocó una nueva suspensión del trabajo por tres meses. Los residuos encontrados en el arroyo estaban compuestos, según Anglo American, por un 70 % de mineral de hierro y en un 30 % de agua.

Aunque, y como ha sido un comportamiento sostenido, la compañía minera bajó el perfil al desastre (declarando en algunos medios que la pulpa de hierro no era riesgosa), de todas formas la multa se concretó a través de la Secretaría de Medioambiente de Minas Gerais, al considerar que Anglo American, “es una empresa de gran porte, que causó contaminación y degradación ambiental, que resultó en daño a los recursos hídricos”, obligando a la minera a pagar más de 37,5 millones de dólares.

De todas maneras, la sanción responde solamente al primer episodio, que ocurrió el 12 de marzo, por lo que se espera una nueva multa por el segundo, sucedido el 29 de marzo. “El hecho es que la tecnología falló, y hay que reparar lo dañado. Y de ahí que las normativas propias de cada país tenga establecido un sistema de multas”, explica Juan Pablo Sanguinetti, abogado de Fundación Relaves.org.

El pasado te condena

Cabe recordar que en esta zona no es primera vez que se genera una catástrofe de este tipo. En efecto, Minas Gerais fue escenario en 2015 del mayor desastre ambiental de la historia de Brasil, que se originó cuando cedió un dique de Bento Rodrigues (cerca de la ciudad de Mariana) que contenía casi 40 millones de metros cúbicos de residuos mineros de la empresa Samarco, propiedad de la brasileña Vale y de la anglo-australiana BHP-Billiton.

El tsunami de lodo mató a 19 personas, arrasó varias localidades y recorrió más de 600 kilómetros por el Rio Doce hasta el océano Atlántico, devastando toda fauna y vegetación a su paso.

Fuente:http://www.relaves.org/2018/04/06/derrame-de-pulpa-de-hierro-de-anglo-american-en-brasil-genera-multa-de-375-millones-de-dolares/