

Autoridad del Agua publicará metodología para la intervención en cabecera de cuencas .

Perú presenta la mayor cantidad de conflictos mineros de toda América Latina. Desplazamientos, impacto ambiental y trabajo informal son algunos de los estragos más fuertes que ha generado el sector minero en Perú, y a pesar de que estas zonas reciben las mayores inversiones, su gente continúa sumida en la pobreza. Luis Castro reúne a los mejores expertos para poner las ‘Cartas sobre la mesa’ a la minería en esta región.
¿Por qué es el Perú el país con más conflictos mineros actualmente en América Latina? A juicio de José Luis López Follegatti, abogado y coordinador general de Grupo de Diálogo, Minería y Desarrollo Sostenible de Perú, es porque el país andino muestra «más dinamismo minero». En este sentido, recalca que hay todo tipo de conflictos: solucionados y no, los que se han vuelto violentos y los que se han convertido en mesas de diálogo.
Además, continúa el desarrollo de la actividad minera en el Perú. «En los últimos diez años ha crecido considerablemente el mapa de desarrollo de este sector» en ese país latinoamericano y «sería raro que no existan reacciones o reclamos» ante este crecimiento, ha opinado Miguel Lévano, oficial del programa de derechos territoriales e industrias extractivas para Oxfam Perú.
En cuanto a las características de los conflictos, el 70% de ellos son socioambientales, ha estimado Rómulo Mucho, ex viceministro peruano de Energía y Minas. También ha añadido que la existencia de una discusión debe de considerarse como algo positivo. «Siempre digo: hay que convertir un conflicto en una oportunidad», ha afirmado Mucho.
«La gente quiere que resuelva los problemas la empresa», mientras que «uno de los males del Perú es que el Estado casi nunca está presente en la comunidad», ha apuntado el ex viceministro de Energía y Minas. «Entonces tenemos un problema de descentralización», ha concluido.
Según Lévano, las causas principales de los conflictos con los mineros en Perú son las afectaciones ambientales y la falta de verificación de las mismas por parte de las autoridades; el temor de la población local a la afectación a su salud, sus tierras, el ganado y el medioambiente; y el incumplimiento de compromisos por el Estado o las empresas.
Otro desafío para el sector es la minería informal, si bien esta también tiene un lado positivo, dado que «mueve la microeconomía» porque sus representantes llevan a cabo actividades de compra y venta y dan trabajo a cientos de miles de personas, ha estimado el ex viceministro Mucho. Además, hay que tener en cuenta que hay varios tipos de empresas mineras en el país andino, estatales y artesanales, y entre estas últimas puede haber «aspectos informales», ha destacado José Follegatti.
«Es normal que existan conflictos», y si vienen «grandes inversiones», van a venir «grandes conflictos» también. «Lo extraño sería que no hubiera conflictos», ha concluido Mucho.
Fuente:https://actualidad.rt.com/programas/cartas-mesa/255160-peru-conflictos-mineros
Frente de Defensa lidera movilización para evitar la contaminación de la cuenca del río, donde se practica la agricultura desde la época preinca.
La explotación minera en las partes altas de esta provincia ha despertado la preocupación en la población. El último fin de semana, una comitiva de funcionarios de la Gerencia Regional de Energía y Minas, autoridades municipales y del frente de Defensa de los Intereses de Virú inspeccionaron el lugar y descubrieron el grave impacto ecológico que ocasionan los mineros informales.
El área de operación minera está ubicada en el caserío Caray, jurisdicción del centro poblado Huacapongo, a 640 metros sobre el nivel del mar. Según el acta elaborada por funcionarios de la gerencia de Minería, en el lugar encontraron “acumulación de sacos de polietileno con material metálico. Muy cerca a ello se observa una pequeña cancha de acumulación del mineral”.
Durante la inspección se encontró al poblador Zacarías Zumarán Arroyo,quien refirió que los trabajos mineros corresponden a la época de la hacienda y que la persona que los contrató para la limpieza del área (recojo del material minero) para fines agrícolas.
Esta labor fue encomendada por Eldair Goicochea a un poblador natural de Condornada.
A su vez, el presidente del Frente de Defensa de los Intereses de la Provincia de Virú, Fernando Crisólogo Santillán, asegura que en la zona existen operaciones mineras recientes, pero que los pobladores de ese sector pretenden ocultar.
Fuente:http://laindustria.pe/detallenoticias.php?codarticulo=13947
Los efectos del Cambio Climático se hacen cada vez más visibles en nuestro país. La Autoridad Nacional del Agua ha advertido que solo en los próximos 20 años, se extinguirán 5 nevados. Las comunidades padecen ante las variables del clima y las heladas que se producen fuera de temporada. Por ello, ante la preocupación sobre esta problemática se propuso la Ley Marco de Cambio Climático.
Este martes 7 de noviembre, la Comisión de Pueblos Andinos, Amazónicos, Afroperuanos, Ambiente y Ecología del Congreso debatió y aprobó por mayoría el pre dictamen de la Ley Marco de Cambio Climático. Norma aguarda su aprobación en la próxima sesión del pleno del Congreso.
De acuerdo al texto del pre dictamen, presentado por la presidencia, se señala que el objetivo de la Ley será principalmente la de coordinar, monitorear, evaluar y difundir las políticas públicas que permitan reducir la vulnerabilidad climática de nuestro país.
Así también, que propicien una gestión participativa y transparente de las medidas de mitigación y adaptación a este desmesurado incremento de temperatura en todo el mundo. Siendo Perú el tercer país más vulnerable al Cambio Climático, nace la urgencia de aprobar tal norma que no solo permitirá aprovechar nuestro bajo crecimiento en carbono sino además cumplir con los compromisos internacionales asumidos por el Estado peruano.
“Con la aprobación de este pre dictamen, los congresistas de esta Comisión han asumido responsablemente el compromiso por frenar el cambio climático que ahora aguarda su debate y aprobación en el Pleno del Congreso. Ojo que seremos el primer país en Sudamérica en tener una legislación especial de cambio climático. Estamos seguros que todo el parlamento lo apoyará”, señaló el presidente de la Comisión, Marco Arana.
Dictamen es producto de la acumulación de diez proyectos de Ley relacionados a forestación, reforestación, heladas, friajes, conocimientos ancestrales y cambio climático. Tras su aprobación, se estima que pre dictamen sea debatido y consensuado este próximo jueves durante la próxima sesión del Pleno del Congreso.
Fuente:http://www.muqui.org/comunicaciones/noticias/item/652-ley-cambio-climatico
En la zona alta de Lima, donde nacen las aguas del río que dota de agua a la capital, diecisiete depósitos de relave son un constante peligro de contaminación. Un informe y un documental de la Red Muqui, presentados está semana, alertan sobre el tema.
«Los afectados somos nosotros que estamos regando con esta agua sucia. Los pastos y el agua están contaminados. En consecuencia el ganado está contaminado y vamos a consumir los alimentos contaminados», dice Alejandro Pérez, campesino de San Mateo, mientras camina por las cercanías de una montaña de relave.
Su testimonio aparece en el documental Historias de Agua, presentado por la Red Muqui el jueves pasado, junto con un informe que alerta sobre el peligro de los relaves mineros en la zonas altas de la cuenca del río Rímac y la contaminación que supone para el agua de Lima.
Uno de los mayores peligros en esa zona es la relavera de la mina Tamboraque, que está en el kilómetro 90.5 de la carretera central y que hoy contiene un estimado de 300 mil toneladas métricas de residuos. Antes tuvo el doble. Está ubicado a unos metros del caudal del Rímac y diversos especialistas han dicho que de ocurrir un derrumbe no solo contaminaría el río sino que Lima podría quedarse sin agua por varias semanas.
Desde el 2008, el gobierno ha exigido a la empresa propietaria -hasta el año pasado Nyrstar- que traslade esos deshechos mineros a otra zona donde no sean tan peligrosos. El nuevo depósito de la empresa está ahora en las laderas del cerro Chinchán, en el distrito de Chicla. Hasta allí se han trasladado unas 300 mil toneladas métricas de deshechos desde las relaveras de Tamboraque.La población del lugar ha reclamado que también podría contaminar los afluentes del río Rímac que hay en la zona.
Nyrstar señaló el 2014 que no trasladó la totalidad de los relaves de Tamboraque porque los cúmulos de material ya estaban estabilizados y no había peligro de derrumbe. Su versión es puesta en duda por varios especialistas.
En Huarochirí hay numerosos pasivos ambientales dejados allí por las empresas que dejaron de operar. Es el caso de los depósitos de relave de Casapalca, Antuquito y Bellavista. El campo de relave de Casapalca queda también en Chinchán y es una enorme montaña gris que pone en peligro los afluentes del río Rímac que hay ahí.
La relavera Antuquito esta situada en la margen izquierda del Rímac y contiene unas 600 mil toneladas métricas de relaves producidos por la Cerro de Pasco Corporation y Centromin Perú. Ahí se han realizado labores de remediación pero durante décadas el polvo producido por erosión y el lavado del talud, en época de lluvias, contaminaron el río y las poblaciones aledañas.
En el depósito de relaves Bellavista hay 1.2 millones de toneladas métricas de desechos mineros producidos por la planta concentradora de Casapalca, operada por las dos minas citadas en el párrafo anterior. También contaminó durante décadas el río hablador y hoy se encuentra en proceso de remediación.
Hay otras empresas mineras que siguen operando y produciendo relave. Es el caso de Volcan, Los Quenuales, Compañía Minera Casapalca y Great Panther Silver (que compró Tamboraque a Nyrstar a fines de 2016).
Son diecisiete los depósitos de deshechos mineros (ver cuadro) los que, ubicados en las márgenes de la naciente del río Rímac, han contaminado y siguen contaminando sus aguas y a las poblaciones cercanas. Su cercanía con afluentes o con el mismo Rímac hace que en el caso de un sismo fuerte, o terremoto, el peligro de que esos materiales caigan al río y lo contaminen sea latente.
«Tenemos a toda la cuenca hidrográfica del Mantaro y del Rímac impactadas por el vertimiento de elementos químicos, que finalmente alcanzan a todos los pobladores que dependen de ambas cuencas. Es decir, se beneficia la ganancia inmediata, sin proyectar las medidas protectivas y preventivas», dice el informe de la Red Muqui.
El señor Genaro Aguilar es representante de la comunidad campesina de San Antonio y miembro de la Plataforma por la Defensa y Promoción del Medioambiente en las Cuencas Altas del río Rímac. Vive en San Mateo y ha visto cómo las minas operaban cerca de su comunidad y cómo crecieron con los años las montañas de relaves que las empresas mineras iban dejando.
«El problema del relave de Tamboraque y la posibilidad de un derrumbe, que muchos advierten, es el caso más conocido, pero hay muchos otros que no son tomados en cuenta», nos dice en una breve visita a Lima para brindar su testimonio de poblador afectado.
«En la margen izquierda por la microcuenca del río Aruri, que es afluente del Rímac, hay cinco pasivos ambientales abandonados. Allí el aire levanta el polvo de los minerales y este cae al río. No hay remediación. Eso pertenecía a la mina Millotingo y al Banco Minero, pero ya no existen y no se hace nada para remediar ese pasivo», cuenta.
«Otro afluente del Rímac es el río Mayo, perteneciente a la comunidad de Viso. Allí, en la parte alta, hay relaveras abandonadas que pertenecían a la mina San Donato. Allí se han hecho estudios que indican que las aguas del río Mayo tienen altas concentraciones de plomo, cadmio y mercurio».
La plataforma a la que pertenece don Genaro emitió un pronunciamiento en agosto pasado indicando lo siguiente:
«El deterioro ambiental se debe […] principalmente a los numerosos pasivos ambientales de relaves, desmontes y agua de mina que existen en la cuenca alta del río Rímac,específicamente los pasivos de Tamboraque, los de la subcuenca Aruri, los de la quebrada Mayo y la quebrada Chinchán. Estos pasivos ambientales contienen metales y no metales tóxicos que al estar sin tratamiento y expuestos libremente, entra en contacto con los recursos naturales».
Ellos realizaron un estudio ambiental de agua, suelo y sedimento para profundizar en el problema y poder plantearle al gobierno sus inquietudes con mejores argumentos.
Los resultados fueron: «Exceso de concentración de plomo, cadmio, arsénico, cobre, manganeso, en agua que es usada para el cultivo de plantas. Esto mismo se corrobora en suelo y sedimento». Otros metales fueron hallados en varios puntos evaluados.
El peligro sobre la principal fuente de agua de la capital es permanente. Y, según los pobladores, el gobierno no exige o hace muy poco por la remediación de esos pasivos ambientales. «La empresa estatal Activos Mineros no considera pasivos ambientales a muchas de estas relaveras. Habrá que movilizarnos para que las tomen en cuenta», afirma don Genaro. Mientras tanto, el peligro sobre nuestra principal fuente de agua continúa.
Toda la cuenca hidrográfica del Mantaro y el Rímac es impactada por el vertimiento de elementos químicos.
Fuente:http://larepublica.pe/domingo/1141092-el-rio-rimacy-un-peligro-latente
Las municipalidades de las provincias de Gran Chimú y Contumazá agradecieron la participación de los cientos de pobladores, entre ellos muchos agricultores, en la movilización por la defensa del agua que se realizó el pasado 31 de octubre. Liderados por el alcalde provincial Diber Pérez Rodríguez y el alcalde de Contumazá, Wildor Rodríguez Díaz, llegaron hasta el anexo Pozos Ricos con el objetivo de rechazar la minería irresponsable que perjudica la única cuenca acuífera de Cascas y Contumazá. Se verificó, por toda la precaria logística que se encontró en el lugar, que ahí, se realizan trabajos de minería ilegal.
Fuente:http://larepublica.pe/politica/1143254-contra-la-contaminacion-minera-en-la-libertad
La Oroya, en Perú, la quinta ciudad más contaminada del planeta. Allí se vive con elevados niveles de metales tóxicos en el cuerpo 60, 70 microgramos por decilitro de sangre, seis a siete veces más del límite permisible. Por encima de esa línea roja, un sin fin de enfermedades.
«El plomo lo que se hace, se absorbe y al no cumplir ninguna función se deposita dentro del organismo, en especialmente los órganos blandos y en los huesos», explicó Pablo Marín, médico del área de metales pesados del Centro de Salud de La Oroya.
Y entonces, sin mayor aviso, el plomo ataca el corazón, el cerebro, los riñones y se manifiesta con alteraciones en el sistema nervioso central, anemia, cáncer, leucemia. Los niños, son los más perjudicados.
José de Echave, investigador de CooperAcción, señaló: «Todos los estudios realizados muestran que el 90 por ciento de los niños que participaron en el estudio, una muestra representativa de la población de La Oroya, tenían niveles de plomo en sangre por encima de lo que recomienda el organismo mundial de salud».
Debido a este envenenamiento masivo, organizaciones no gubernamentales enjuiciaron en tribunales internacionales al estado peruano y a la empresa Doe Run, propietaria hasta el año 2009 del complejo metalúrgico de La Oroya.
«Actualmente habrá unos 3 mil casos, tres mil demandas, tres mil niños que están, que han demandado ya», subrayó Richard Romero, gestor ambiental.
La Oroya, epicentro de este desastre irreversible, se ubica en la vertiente oriental de la Cordillera de los Andes, un territorio rico en minerales, 176 kilómetros al noroeste de Lima. Es conocida como la capital metalúrgica de Sudamérica, pero también como la ciudad de plomo.
Al respecto, Tania Chancasanbampa, directora del Centro de Salud de La Oroya, refirió: «Bueno, sí es cierto, a nivel internacional se ha catalogado a la ciudad de La Oroya como la primera ciudad más contaminada del mundo, sin embargo, la empresa ya no funciona aproximadamente hace 8 años».
La magnitud del escándalo ambiental obligó, en efecto, a cerrar el complejo metalúrgico. Y es que aquí la contaminación se elevó a niveles insospechables al punto que hasta los recién nacidos llegaban al mundo con preocupantes niveles de plomo en la sangre.
Por eso Elizabeth Casas, una madre de familia de La Oroya, que espera su segundo hijo acude a los controles médicos.
«Mi primer hijo también ha tenido su plomo en su sangre, pero ya más bien con los controles, con la alimentación ha bajado, más bien ya el nivel del plomo», dijo Elizabeth.
Hecho que confirma Pablo Marín, médico del área de metales pesados del Centro de Salud de La Oroya: «La incidencia actualmente que se vive en La Oroya considerablemente ha disminuido la exposición de nuestros niños, también en nuestras gestantes».
Una nueva estrategia de salud ambiental ha contribuido también a disminuir la peligrosa contaminación.
Con relación a esto, Tania Chancasanampa, directora del Centro de Salud de La Oroya, explicó que «lo que se busca es que la familia continúe con este trabajo preventivo, sobre todo, medidas, hábitos de vida saludable, lavados de manos, mejorar su alimentación».
Es una cruzada de salud que ha tenido una respuesta positiva en cierto sector de la población.
Para otros, la contaminación es, simplemente, parte de su vida.
Para Olga Ávila, pobladora de La Oroya: «Todos estamos bien, mentiras a veces hablan, que hay niños enfermos, pero ahorita no veo».
«Es una mentira porque las madres son descuidadas, porque a sus hijos no le atienden, por esa razón esa contaminación. Por ejemplo, mi nieta, todos mis hijos son sanos», dijo por su parte Goya Cóndor, comerciante de La Oroya.
Por razones legales, los padres de los niños de plomo de La Oroya protegen la identidad de sus hijos, pero en zonas vecinas a este complejo metalúrgico, donde la minería irresponsable sigue contaminando, hay más y recientes casos de niños de plomo. El anexo rural de Mahr Túnel es uno de ellos.
Repetidas veces también, pobladores de otras ciudades mineras de las regiones Junín y Cerro de Pasco han llegado incluso a la capital para denunciar la contaminación de las aguas de sus ríos, lagos y medio ambiente. Ellos que literalmente respiran plomo se han encadenado frente a la sede del ministerio de salud para que el gobierno los escuche.
«Lo que queremos es que el gobierno nos diga cómo va a ser el tratamiento de nuestros niños intoxicados», denunció Joel Nieto, poblador de Cerro de Pasco.
Es un clamor que aún hoy no es escuchado.
Por su parte, Gladys Mandujano, pobladora de Cerro de Pasco, subrayó: «En la ciudad de Cerro de Pasco los habitantes se están muriendo debido a la contaminación. Y qué provoca la contaminación. Es el estado que ha dado permiso a las empresas mineras».
Los médicos y expertos han comprobado en el caso de La Oroya que aunque la industria metalúrgica está inactiva, los niveles de plomo en la sangre de la población, especialmente en los niños, siguen siendo elevados.
La chimenea principal de este complejo metalúrgico ya no escupe gases ni humos negros, pero la contaminación ambiental es un mal que permanece muchas veces invisible. A mi espalda, los testigos, cerros pelados y quemados por la contaminación en unas de las ciudades considerada como la quinta más contaminada del mundo.
FUENTE: http://cooperaccion.org.pe/main/advanced-stuff/cooperaccion-informa/781-prensa-internacional-senala-a-la-oroya-como-la-quinta-ciudad-mas-contaminada-del-mundo
Red Muqui presentó informe y documental en el Congreso donde alerta sobre la problemática de salud ambiental y los impactos de los diferentes pasivos mineros en Cerro de Pasco, La Oroya, y la Cuenca de San Mateo. El foro «Estudios en poblaciones afectados por metales pesados» fue coorganizado por la Comisión de Pueblos Andinos, Amazónicos y Afroperuanos, Ambiente y Ecología, Centro Labor, Sourse y la Municipalidad de Simón Bolívar. Las organizaciones expusieron sobre la afectación a la salud de la concentración de metales y pasivos.
Un inmenso cráter y una chimenea humeante son la herencia y el símbolo de los que fueron dos de los motores económicos mineros más potentes del país. Y en medio de este escenario cenizo, las arterias fluviales que nutren estas tierras se tiñeron de colores amarillentos y rojizos que, a través de sus aguas sinuosas, y del hollín, contaminaron las aguas, aire y vidas de las poblaciones de Cerro de Pasco, La Oroya, zonas relacionadas hidrográficamente con el río Mantaro, y la Cuenca de San Mateo, cabecera donde nace el río Rimac,
24 niños de Cerro de Pasco y La Oroya, a quienes se les realizó un dosaje, están expuestos de manera crónica a arsénico, cadmio, plomo, mercurio, superando todos los niveles permisibles por el Ministerio de Salud, es la conclusión del Informe de atención médica de salud a menores que habitan en ambientes asociados a minería y metalurgia residentes en Cerro de Pasco y La Oroya, y situación de los pasivos ambientales de San Mateo-2016, elaborado por la Red Muqui. «El arsénico y el cadmio son cancerígenos, tal y como reconoce la Organización Mundial de la Salud, y el plomo y el mercurio son dos venenos que tienen una gran predilección por el sistema nervioso central, es decir, destruyen los nervios, el cerebro, y producen anemia», sostiene Fernando Osores, doctor ambientalista autor del informe.
«Mi hijo Benjamín tiene un crecimiento anómalo de células retinales, un retinoblastoma, que ya le ha hecho perder un ojo. Además, sufre de diferentes enfermedades, como daño a la vesícula», afirma Lourdes Mendoza, habitante de Cerro de Pasco. «No existe ninguna solución hasta la fecha. Este no es un daño a personas aisladas, sino a una población integral y constituye un tema de salud pública. Los ministerios no están actuando desde una mirada de interrelación de salud y medio ambiente», afirma Javier Janhcke, secretario ejecutivo de Red Muqui.
Exposición permanente de metales pesados y pasivos ambientales
El informe alerta del peligro de los depósitos de relaves, que constituyen un foco de contaminación y afectación a la salud de las personas. En Cerro de Pasco, se encuentran los depósitos de Quiulacocha con 115 hectáreas y 78 millones de toneladas de depósito, o del desmonte Excelsior con 94 hectáreas y 50 millones de toneladas de depósito. Por su parte, en la Oroya se encuentran los depósitos de trióxido de arsénico de Vado que contiene 115,000.00 toneladas.
La cuenca del Río Mantaro es de gran importancia para la economía del Perú: genera alrededor de 35% de la energía eléctrica, y la producción agrícola del valle provee de gran cantidad de alimentos a la capital. Sin embargo, el peligro de los relaves también está latente en Lima. El informe no solo alerta sobre el relave de Tamboraque- que contiene aproximadamente 690,000 toneladas métricas de residuos- sino también de otros ocho pasivos ambientales de los que poco se habla. Es el caso del relave Chinchán, el de Tablachaca, ubicado al margen del rio Rímac, que contiene unos tres millones de toneladas métricas de relaves producidos por la planta concentradora Casapalca. También están los depósitos de relaves de Antuquito, Casapalca, y el de Yauliliaco que contiene 3.3 millones de toneladas métricas.
Historias de agua
En el marco del Foro «Estudios en poblaciones afectados por metales pesados» , se presentó el documental «Historias de Agua», producido por Red Muqui, que narra los impactos dramáticos de la contaminación sobre las poblaciones objeto del informe. El largometraje recorre las aguas de los Andes y retrata las historias de ciudadanos que viven afectados por problemas de salud y por contaminación ambiental.
«Sólo se habla de los beneficios que trae la minería, y con este documental quisimos mostrar el otro lado de la historia. Queremos que se visibilice esta problemática ante la falta de empatía con esta población que busca justicia y salud», afirma Gabriela Delgado, productora del documental.
Fuente:http://www.muqui.org/comunicaciones/noticias/item/651-metales-pesados
En el marco del Foro: «Estudios en poblaciones afectados por metales pesados» que se realzará en el Congreso de la República, RED MUQUI presentará el documental Historias de Agua. El evento es organizado por la Comisión de Pueblos Andinos, Amazónicos y Afroperuanos, Ambiente y Ecología en coorganización con Red Muqui, Centro Labor, Sourse y la Municipalidad de Simón Bolívar e iniciará hoy a las 2:30 de la tarde en el Auditorio Alberto Andrade Carmona ( ingreso por la Av. Abancay).
El Dr. Fernando Osores, médico ambientalista, presentará el Informe de atención médica de salud a menores que habitan en ambientes asociados a minería y metalurgia residentes en Cerro de Pasco y La Oroya, y situación de los pasivos ambientales de San Mateo-2016, realizado para RED MUQUI, que expone la problemática de salud ambiental y los impactos de los diferentes pasivos mineros de ambas zonas, relacionadas hidrográficamente con el río Mantaro. Además, contiene información relacionada a los pasivos ambientales mineros sobre la cuenca del río Rímac en la localidad de San Mateo.
El informe recoge análisis y estudios de 24 niños- cuyas edades fluctúan entre 3 y 5 años, procedentes del distrito de Simón Bolívar de Cerro de Pasco y La Oroya-, que constataron la prevalencia de exposición de metales pesados como plomo, cadmio, mercurio y arsénico, a través de análisis de orina, sangre y cabello.
En el evento se expondrán otros estudios, como la “Evaluación de Metales Pesados en Muestras de Cabellos de Niños de Simón Bolívar – Pasco” realizado por Laura Grassi, Científica ambiental de Source International – Italia. El Ministerio de Salud presentará el Estudio “Dosaje de Metales Pesados en Personas Expuestas en los Distritos de Simón Bolívar y Chaupimarca, en Atención a la Emergencia Sanitaria” y el estudio sobre afectación a la salud por metales pesados – Caso La Oroya”
Para dar sus testimonios sobre la problemática, se contará con la presencia de los afectados. Estarán en el panel Genaro Aguilar Sandoval, Representante de la Comunidad Campesina San Antonio y miembro de la Plataforma por la Defensa y Promoción del Medio Ambiente en la cuenca alta del río Rímac; Rosa Amaro, Movimiento por la Salud de La Oroya (MOSAO) y Zumel Trujillo Bravo, Alcalde de la Municipalidad Distrital de Simón Bolívar, Pasco.
El evento cerrará con el estreno del documental «Historias de Agua», producido por RED MUQUI, que muestra la contaminación sobre la salud y ambiente en dichas zonas, realizando un recorrido a través de las arterias fluviales que nutren a estas tierras, desde la cabecera de cuenca hasta Lima. Los parlamentarios Humberto Morales y María Elena Foronda estarán en el Foro para comentar sobre la afectación de los pasivos ambientales mineros en la salud de las personas.
Se confirma que el poderoso grupo suizo Glencore tiene la proyección de consolidar su presencia en el Perú y estaría por lograr la mayoría de acciones de la empresa Volcan S.A., la principal productora de zinc del país.
Todo indica que Glencore pasaría a controlar el 66% de Volcan, luego de lanzar una Oferta Pública de Adquisición (OPA) por el 48.18% de las acciones A (las que tienen derecho a voto) que controla una parte de los herederos del ex hombre fuerte de la empresa, Roberto Letts Colmenares.
De concretarse toda la operación, Glencore ampliaría su presencia en el Perú y se consolidaría como uno de los principales grupos mineros. Hasta el momento, Glencore controla las operaciones de Antapaccay, Perubar, Los Quenuales (unidades de Iscaycruz, Yauliyacu, Trevali) y Antamina (37.75%).
No hay que olvidar que Glencore tuvo que desprenderse del mega proyecto de Las Bambas -luego de absorber a la empresa Xstrata el año 2013-, por exigencia del Ministerio de Comercio de China, que quería evitar que la empresa suiza ejerza el control de la extracción y comercialización mundial de metales como el cobre y zinc. Finalmente, el proyecto de Las Bambas fue adquirido por la empresa china Minmetals.
Habrá que ver los efectos que puede provocar el control mayoritario de Volcan por parte de Glencore. Como se sabe, las principales operaciones de Volcan se concentran actualmente en la sierra central del país, entre los departamentos de Junín, Pasco y Lima y tiene varios planes de expansión no solo en esa zona del país.
Dicho sea de paso, según un informe elaborado por el grupo de periodismo de investigación Convoca, Volcan es la empresa que más ha incumplido las normas ambientales en el Perú (60 sanciones). En el mismo terreno, el desempeño de Glencore también deja mucho que desear: según el mismo informe de Convoca, sus empresas Los Quenuales, Perubar y Antamina, acumulan 48 sanciones.
Hablando de sanciones, la empresa Perubar, a mediados de año, interpuso una demanda de amparo en El Callao contra el Organismos de Evaluación y Fiscalización Ambiental (OEFA), para que le devuelva todo el dinero a la empresa por el Aporte por Regulación. ¿Qué es el Aporte por Regulación (APR) y cómo se origina? La Ley 27332 (del año 2000) estableció el APR como una contribución de los sectores para los organismos reguladores de los servicios públicos. En la medida que el OEFA asumió la fiscalización ambiental del sector minero, las empresas deben pagar el denominado aporte. Todos los administrados del OEFA están obligados a asumir los gastos que genera la fiscalización de su respectiva actividad.
De prosperar esta demanda, el OEFA tendría que devolverle a Perubar nada menos que la suma de 120 millones de soles. Este tipo de demandas, buscan asfixiar económicamente al organismo que precisamente se encarga de evaluar y fiscalizar el desempeño de ambiental de las empresas. Como se puede apreciar, los antecedentes de Volcan y de empresas del grupo Glencore, no son los mejores.
Fuente:http://cooperaccion.org.pe/main/opinion/780-glencore-compra-volcan-y-se-consolida-como-una-de-las-empresas-mas-grandes-y-mas-sancionadas