Chile

Línea relevante para interconexión SIC-SING recibe permiso ambiental

Otro proyecto para robustecer la red eléctrica central inició su trámite en el SEA.

El Servicio de Evaluación Ambiental aprobó ayer el proyecto para construir la línea de transmisión en alta tensión que permitirá inyectar al Sistema Interconectado del Norte Grande (SING) la energía que producirá la central termoeléctrica Infraestructura Energética (750 MW) que E-CL busca instalar en la zona de Mejillones.

El tendido, que representará una inversión de US$ 70,5 millones, unirá las subestaciones (S/E) Chacaya y Crucero, ubicadas en la red nortina, lo que equivale a una extensión de 160 kilómetros. La línea de 220 kV considera un doble circuito y estará compuesta por un total de 533 torres (400 torres de suspensión y 133 torres de anclaje y remate).

 

La generadora informó que la iniciativa considera obras adicionales en las subestaciones mencionadas, lo que en su conjunto reforzará el SING, pues unirá la S/E crucero, que es la más importante del sistema nortino y desde la cual varias operaciones mineras retiran la energía que consumen, con la S/E Chacaya cercana al polo de generación eléctrica de Mejillones, lo que robustecerá la red y elevará sus niveles de calidad y seguridad.

“La energía proveniente del proyecto de E-CL Infraestructura Energética Mejillones, será evacuada a través de esta línea de transmisión, por lo que adquiere suma relevancia, también con miras a la futura Interconexión SING – SIC”, declaró la empresa en un comunicado.

Refuerzo del SIC


En paralelo Eletrans, filial de transmisión creada por las distribuidoras Chilquinta y Saesa, inició el trámite ambiental de la línea que unirá las subestaciones Cardones y Diego de Almagro, en la Región de Atacama, y que con una inversión de US$ 70 millones es una de las obras que busca elevar la capacidad de transporte de energía en el Sistema Interconectado Central (SIC).

Este tendido tendrá una extensión de 156 kilómetros de extensión, y es una de las obras del plan por cerca de US$ 900 millones que el Ministerio de Energía aprobó en 2011 y posteriormente licitó, con el objetivo de superar los cuellos de botella que en diversos tramos, entre Taltal y Chiloé, exhibe el mayor sistema eléctrico del país.