Honduras

Delegación de EE.UU. denuncia que su país respalda conflictos ambientales en Honduras

-Una delegación de ciudadanos estadounidenses denunció y lamentó este domingo que su país respalde a “un gobierno ilegítimo” y a los intereses económicos que provocan conflictos en Honduras como el del proyecto minero de Guapinol.

Los conflictos ambientales en Honduras han dejado varias víctimas mortales, entre estas el emblemático asesinato de la ambientalista y lideresa indígena, Berta Cáceres.

Durante una conferencia de prensa brindada este mediodía en las afueras de la embajada de los Estados Unidos en Tegucigalpa, la delegación que se encuentra en el país dándole seguimiento al proceso judicial contra los ambientalistas de la comunidad de Guapinol, Tocoa, Colón, dio lectura a un comunicado que establece lo siguiente:

La Delegación de Estados Unidos vinimos de forma urgente para observar los procesos legales en contra de los 12 defensores medioambientales, quienes han sido criminalizados por proteger el ambiente y el agua de un proyecto minero en Guapinol.

Reiteramos nuestra profunda preocupación por la estrategia de criminalización de la defensa de la vida y del medioambiente por parte del Estado de Honduras y la actuación del poder judicial y del Ministerio Público, siendo su máximo responsable el Fiscal General Óscar Chinchilla, que ha contado con el apoyo firme de la  embajada de los Estados Unidos.

Hemos sido testigos de que 12 medioambientalistas son procesados como si fueran terroristas o parte del crimen organizado. El Estado de Honduras ha utilizado diferentes tácticas para ello, entre ellas, la aplicación de delitos como la asociación ilícita, y la jurisdicción de tribunales que juzgan a la criminalidad organizada.

También constatamos la decisión del Ministerio Público de identificar a este grupo de defensores una “banda organizada”, construyendo delitos comunes graves haciendo un uso amañado de los testigos sin rostros y pruebas anticipadas, violando las garantías de los defensores.

Repudiamos que el gobierno de Honduras decida dar respuestas penales a problemas sociales, que tienen su origen en la corrupción e impunidad institucional, como es en este caso, en el que concesiones mineras ilegales y  un decreto inconstitucional que reduce la zona protegida del parque Carlos Escaleras  para poder llevar a cabo estos proyectos, han provocado daños ambientales y altos riesgos  a la vida de los defensores.

La embajada de Estados Unidos debería de estar protegiendo a los defensores y defensoras  de derechos humanos y del medioambiente,  y no  un gobierno  ilegítimo y a los intereses económicos que provocan estos conflictos, como lo confirma el apoyo público que el día de hoy la embajada ha manifestado para Corporación Dinant, cuyos dueños  son  de la misma familia  dueña de Inversiones Los Pinares y el proyecto minero de Guapinol.

La delegación de estadounidenses está integrada por, Claire White, doctorada de la universidad de Harvard, profesora y asociada de las Hermanas de San José de Boston, hija del luchador de los derechos humanos, el embajador Robert White y por Pastora Kathleen McTigue, directora del Centro de Justicia Social de la Iglesia Unitaria Universalista de los EE.UU., dedicado a la defensa de los derechos humanos.

Fuente:https://criterio.hn/2019/03/03/delegacion-de-ee-uu-denuncia-que-su-pais-respalda-conflictos-ambientales-en-honduras/amp/
Honduras

Libertad a Defensores y Defensoras del Río Guapinol

CISPES se solidariza con la lucha de los/as defensores/as del Rio Guapinol y hacemos eco al llamado de inmediata libertad para los 12 Defensores del rio en Honduras.
San Salvador, 26/02/2019
Aquí compartimos el pronunciamiento de nuestros aliados en la Asociación para el Desarrollo de El Salvador (CRIPDES) quienes forman parte de la Alianza Centro Americana Frente a la Mineria (ACAFREMIN), donde hacen un llamado de solidaridad internacional con defensores/as de agua en Honduras.

Libertad a Defensores y Defensoras del Río Guapinol

La Alianza Centroamericana Frente a la Minería, ACAFREMIN, se suma a las manifestaciones de repudio por la arbitraria detención de 11 defensores y una defensora de los bienes comunes en el Departamento de Colón por parte de las instituciones judiciales del gobierno hondureño encabezado por Juan Orlando Hernández -JOH-.

Según testimonios del Comité en Defensa de los bienes Comunes y Naturales de Tocoa, 32 defensores y defensoras del medio ambiente han sido requeridos por el Ministerio Público hondureño con cargos fabricados de privación injusta de libertad, robo en perjuicio de Santos Hernández Corea, incendio agravado en perjuicio de la Empresa los Pinares, y asociación ilícita en perjuicio de la seguridad del Estado Hondureño.

Las denuncias que líderes y lideresas ambientales han hecho es contra la Empresa Los Pinares y al gobierno municipal de Tocoa por permitir el inicio de operaciones sin consulta previa a las comunidades afectadas y demandan que la municipalidad realice un cabildo abierto, requerido por la ley, para determinar un acuerdo con dicho proyecto. También han denunciado que, en octubre de 2017, el Congreso Nacional de Honduras, reformó el decreto No. 127-2012, que declara al Parque Nacional «Montaña de Botaderos» como área protegida, con la finalidad de reducir su zona núcleo y ampliar la zona de amortiguamiento para beneficiar la expansión del proyecto minero.

La persecución judicial por parte del Ministerio Público pone en evidencia la campaña sistemática de descalificación pública, violencia y represión ejecutada por políticos y empresarios locales, cuerpos de la policía y unidades militares en complicidad con la seguridad privada de la empresa minera Inversiones los Pinares contra aquellos que se oponen el proyecto minero Buena Vista I, propiedad del empresario Lenir Pérez.

La principal preocupación de los pobladores de Tocoa es la inminente destrucción de reservas ecológicas dentro del Parque Carlos Escaleras, conocido previamente como Parque Nacional Montaña de Botaderos, donde nacen los ríos Tinto, Mame, Monga, Cuaca, San Pedro, Guapinol, Tocoa, Taujica, Bonito, Izquierdo y Rio Chiquito; fuentes hídricas que alimentan de agua potable a las regiones de Tocoa y La Abisinia.

Como organización que buscan avanzar el interés público y la defensa de los bienes comunes, repudiamos los procesos irregulares en la obtención de licencias, el rompimiento del orden constitucional al reformar una ley para aprovechamiento de bienes comunes por intereses privados, el abuso del poder judicial y las violaciones a los derechos desatadas contra defensores y defensoras ambientales del Comité en Defensa de los Bienes Comunes y Naturales de Tocoa.

Por lo establecido anteriormente, las organizaciones de la Alianza Centroamericana frente a la Minería:

Demandamos la inmediata libertad de defensores y defensoras: Tulio Ramos, Reynaldo Domínguez Ramos, Juan Antonio López, José Eugenio Esquivel Villeda, Juventino Cruz Hernández, Ally Magdaleno Domínguez Ramos, Juan Manuel Cruz Hernández, Juan Francisco Cruz García, José Santos Hernández, Leonel George , José Adalid Cedillo Mendoza, Lourdes Elizabeth Gómez Rodas.
Hacemos al gobierno de Juan Orlando Hernández, las autoridades Judiciales de Honduras responsables por la integridad física y moral de defensores y defensoras detenidos.
Nos solidarizamos con las comunidades y las familias de defensores y defensoras ante esta campaña de criminalización judicial.
Exigimos un cese a la criminalización sistemática de defensores y defensoras de territorios y sus bienes naturales y el cumplimiento por parte del gobierno hondureño a las recomendaciones emitidas por distintas instancias internacionales que garantizan la labor por defensa de derechos.
Hacemos un llamado a la comunidad internacional, principalmente a las instituciones que velan por los derechos humanos y organizaciones sociales a emitir expresiones de solidaridad y estar vigilantes por el cumplimiento de la Justicia.
San Salvador, 26 de febrero de 2019

Honduras

Conflicto de Guapinol se origina por ilegal concesión a minera Los Pinares

26/02/2019
Por: Redacción CRITERIO, [email protected]
Tegucigalpa.- La diócesis de Trujillo, en el departamento de Colón ha manifestado este martes que el conflicto en la comunidad de Guapinol se origina por la ilegal concesión de explotación minera a la empresa Inversiones los Pinares, ya que dicho proyecto afecta el Parque Nacional de Botaderos Carlos Escaleras Mejía.

En su comunicado resaltan que el Congreso Nacional concedió a ese parque la categoría de área protegida mediante decreto 127-2012, y por tanto se prohíbe realizar actividades mineras y construir carreteras o vías de acceso y construcciones a orillas de quebradas, ríos y zonas de riesgo, dado que se trata de una zona de recarga hídrica y de toma de agua de los habitantes del Aguán.

Posteriormente, el Congreso Nacional reformó el decreto con la finalidad de reducir la zona núcleo de 24,223.7 hectáreas a solo 24,006.36; la reducción es de 217.34 hectáreas, coincidiendo sorprendentemente donde se ubican las dos concesiones mineras a Inversiones Los Pinares.

Hacen un llamado a las organizaciones de derechos humanos nacionales e internacionales a estar atentos y difundir la situación deplorable del Estado hondureño en materia de derechos humanos y ambientales.

También hacen un llamado al Estado de Honduras, representado en sus operadores de justicia, a no criminal izar y judicializar a los defensores y defensoras de los derechos humanos y ambientales, tal como lo solicitó el Relator del Alto Comisionado de Derechos Humanos de la ONU. Por el contrario, que promueva políticas públicas coherentes con la justicia y los derechos fundamentales de los pueblos y sus territorios.

La Iglesia Católica de la diócesis de Trujillo, Honduras. C.A. a la comunidad local, nacional e internacional, ante el encarcelamiento y juicio en contra de 13 personas, entre ellas cuatro Delegados de la Palabra de Dios de la Iglesia católica, a causa de la defensa del derecho a la vida, el agua y el ambiente sano en el municipio de Tocoa, Colón, Honduras, por el conflicto de las concesiones mineras a la empresa Inversiones Los Pinares en el Parque Nacional de Botaderos Carlos Escaleras Mejía, comunicamos lo siguiente:

El conflicto en la comunidad de Guapinol se origina por la ilegal concesión de explotación minera a la empresa Inversiones los Pinares, ya que dicho proyecto afecta el Parque Nacional mencionado. Resaltamos que el Congreso Nacional concedió a este parque la categoría de área protegida mediante decreto 127-2012, y por tanto se prohíbe realizar actividades mineras y construir carreteras o vías de acceso y construcciones a orillas de quebradas, ríos y zonas de riesgo, dado que se trata de una zona de recarga hídrica y de toma de agua de los habitantes del Aguán.

Posteriormente, el Congreso Nacional reformó el decreto con la finalidad de reducir la zona núcleo de 24,223.7 hectáreas a solo 24,006.36; la reducción es de 217.34 hectáreas, coincidiendo sorprendentemente donde se ubican las dos concesiones mineras a Inversiones Los Pinares.

El año 2014 el Instituto de Conservación Forestal (ICF) emitió el dictamen técnico DAP-031-2014, declarando que el proyecto minero no era factible por estar ubicado dentro de la zona núcleo de un área protegida y recomendó a la Secretaría de Recursos Naturales declarar sin lugar la licencia ambiental.

Ante este conflicto, pobladores de la zona, haciendo uso de su legítimo derecho, se han manifestado en contra del proyecto, aglutinados en el Comité Municipal de Defensa de los Bienes Comunes y Públicos, por lo cual 18 personas fueron criminalizadas. El pasado viernes 22 de febrero se presentaron voluntariamente en la ciudad de La Ceiba, Atlántida, 13 de esas personas criminalizadas por los delitos de usurpación y daños ante el juez de jurisdicción nacional Carlos Irías de León; según la Constitución y las leyes de la República, los juzgados de jurisdicción nacional son inconstitucionales porque violan el derecho a la legítima defensa.

En la misma audiencia arbitrariamente el Ministerio Público amplió el requerimiento fiscal o acusación por 4 delitos más: asociación ilícita, incendio agravado, privación injusta de libertad y robo. Al tipificar el delito de asociación ilícita, la intención oculta es enviarlos a la cárcel. Además se amplió la acusación a 14 personas más. Por esa razón se canceló la audiencia de presentación de acusados y se trasladó a la ciudad de Tegucigalpa, que se realizó el sábado 23 de febrero, donde el juez de Jurisdicción nacional Víctor Méndez decretó detención judicial o cárcel para estas personas. El juicio continúa el 28 de febrero de 2019.

defensores de Guapinol

El delito de asociación ilícita fue tipificado para atacar el crimen organizado y los grupos como maras y pandillas. De aquí se deduce que además de ser una acusación de delitos no cometidos, no hay imparcialidad en la aplicación de justicia por parte de la fiscalía y de los juzgados de jurisdicción nacional, quedando erosionado la institucionalidad del Estado en la administración de justicia y la protecciòn de sus ciudadanos.

También se deduce la intención del Estado de criminal izar o acusar a las personas defensoras de la vida y de los derechos humanos. Así como de presentarlas como responsables de hechos de alto impacto delictivo y con ello frenar las acciones en defensa de los bienes naturales y comunes. De esta manera, estas personas encarceladas, acusadas y con orden de captura, se convierten en presos y perseguidos políticos.
Llamamos a las comunidades eclesiales, católicas y no católicas, a orar, reflexionar y decidir acciones justas, firmes y pacificas en solidaridad con estos hermanos presos y perseguidos políticos, así como en defensa de la vida y el agua y demás derechos fundamentales.

Llamamos a las organizaciones de derechos humanos nacionales e internacionales a estar atentos y difundir la situación deplorable del Estado hondureño en materia de derechos humanos y ambientales.

También llamamos al Estado de Honduras, representado en sus operadores de justicia, a no criminal izar y judicializar a los defensores y defensoras de los derechos humanos y ambientales, tal como lo solicitó el Relator del Alto Comisionado de Derechos Humanos de la ONU. Por el contrario, que promueva políticas públicas coherentes con la justicia y los derechos fundamentales de los pueblos y sus territorios.

Afirmamos nuestro compromiso por la vida y el derecho al agua. Asumimos las palabras del papa Francisco: ”Que el nuestro sea un tiempo que se recuerde por el despertar de una nueva reverencia ante la vida ( … ). Merecen una gratitud especial quienes luchan con vigor para resolver las consecuencias dramáticas de la degradación ambiental en las vidas de los más pobres del mundo” (LS 207 y 13).

Trujillo, Colón, Honduras, 27 de febrero de 2019

https://criterio.hn/2019/02/26/conflicto-de-guapinol-se-origina-por-ilegal-concesion-a-minera-los-pinares/

Honduras

Sigue vivo conflicto minero en Azacualpa

La Unión, Copán, 27/02/2019
Noticias NacionalesPortada
Desde el 2013, las comunidades del municipio de La Unión, Copán iniciaron una lucha para denunciar los daños provocados por las excavaciones que realiza la empresa Minerales de Occidente, S.A, en su misión de extraer el oro de la zona.

A mediados del 2018 el Juzgado de lo Contencioso Administrativo de San Pedro Sula, admitió un recurso de amparo interpuesto por el abogado Víctor Fernández del Movimiento Amplio por la Dignidad y la Justicia, Madj, en favor de los habitantes de la comunidad.

Mediante el recurso se ordenó cesar de inmediato las exhumaciones de cadáveres en el cementerio comunitario porque violenta a los pobladores y pobladoras su derecho a la soberanía comunitaria, a la cultura, la integridad personal, física, psíquica y moral, y el derecho a la familia y del resto de las habitantes de la comunidad de Azacualpa.

Camino a la agudización
Sin embargo, la problemática lejos de resolverse se agudiza. Ramiro Lara, de la Asociación de Organismos No Gubernamentales, Asonog, expresa que la empresa Minerales de Occidente S.A, Minosa, después de varios meses de mantener suspendidos los trabajos, reanudó la operación el pasado lunes 18 de febrero.

Lara detalló que la explotación minera continúa en áreas donde no existen personas enterradas, sin embargo explica que la municipalidad de la Unión otorgó permisos a la empresa para explorar otros sectores.

Ramiro Lara señala que la ciudadanía está alarmada porque recientemente el Instituto Hondureño de Geología y Minas, Inhgeomin, a través de un comunicado, detalló que la empresa Minerales de Occidente S.A, Minosa, solicitó más de 3 mil hectáreas de terreno para la exploración y posterior explotación.

“Estas concesiones abarcan los municipios de San Agustín, Cucuyagua, Santa Rosa y se amplía para el municipio de la Unión”, dijo Ramiro Lara.

Explicó que las comunidades temen que la empresa, en complicidad con autoridades locales y nacionales, amplíe su área de explotación. El ambientalista aseguró que la lucha de oposición de la ciudadanía ha dejado al menos 19 personas con procesos judiciales.

Datos irrefutables
Una investigación realizada por el Madj, revela que 13 fuentes de agua han desaparecido parcialmente de la zona y otras están contaminadas con los químicos que usa la empresa Minosa en la extracción del oro.

En Santa Rosa de Copán, una de las ciudades principales del occidente hondureño, toman agua del río Higuito que se alimenta del río Lara, zona de descarga de agua con cianuro de la empresa según la investigación del Madj en coordinación con Asonog.

Producto de la grave contaminación, en el municipio de La Unión existen 37 casos documentados clínicamente, donde se refleja la presencia de arsénico, plomo y mercurio en la orina y sangre de las personas.

Juan Mejía, investigador del Movimiento Amplio por la Dignidad y la Justicia, Madj, explicó que las aguas del Río Higuito presentan contaminación por metales pesados como el mercurio, además de cianuro, por lo que no pueden ser utilizadas para el consumo humano porque significaría la muerte.

Señaló que el Estado Hondureño es responsable por dos razones; primero por ser la máxima autoridad en un país por lo que debe garantizar la plena vigencia de los derechos humanos, y concretamente el derecho a la vida, y es lo que se violenta en estas comunidades.

Y segundo, la complicidad porque sabiendo de las contaminaciones que se generan, el Estado guarda silencio y no deduce responsabilidades a la minera analizó Mejía.

Habla Minosa
Ante el rechazo y las acusaciones por parte de la ciudadanía que se opone a la extracción de minerales en la comunidad de Azacualpa, La Unión, Copán, Mario Alberto España, supervisor de Proyectos Comunitarios de Minosa, en una entrevista concedida a Radio Progreso, dijo que están llevando todo en orden y en respeto a la ley y a los Derechos Humanos por lo que no entienden las razones por las que la ciudadanía se opone.

El directivo negó los señalamientos que realizan las comunidades y organizaciones defensoras del ambiente en torno a la contaminación que dicha empresa está generando en la zona.

“Minerales de Occidente S.A está enfocada en el crecimiento responsable y sostenible, y lo hace por medio de los más rígidos estándares de seguridad y medio ambiente nacionales e internacionales, interactuando siempre de una manera socialmente responsable”, argumentó el representante de la empresa.

El conflicto en Azacualpa, es reflejo de todas las arbitrariedades y abusos que comenten las empresas extractivas. Según datos del Equipo de Reflexión Investigación y Comunicación ERIC, en Honduras existen 364 proyectos mineros aprobados. Actualmente se encuentran en proceso de aprobación al menos 563 nuevos proyectos mineros y se está promoviendo la adjudicación de al menos de 950 títulos mineros adicionales derivados del catastro minero.

Honduras

Reiteran denuncia contra minera en Honduras por daños al entorno

Tegucigalpa, 21 feb (PL) La Coalición Contra la Impunidad, integrada por 19 organizaciones de la sociedad civil en Honduras, reiteró su denuncia sobre los daños provocados por una minera en una zona protegida en el departamento de Colón.

La víspera en un encuentro en esta capital, testigos de la contaminación, represión policial y militar que habitan en Guapinol, recordaron que la concesión del proyecto extractivo ASP 1 y ASP 2, otorgado a la empresa Inversiones Pinares, es producto de prácticas legislativas irregulares y corruptas para favorecer el despojo territorial.

La activista María Victoria Del Cid, de más de 70 años que lucha por la defensa del río Guapinol, describió la contaminación de sus aguas y recordó la lucha permanente desde 2013 contra la imposición de la minera, refiere hoy el diario digital Criterio.hn.

El conflicto generado por la concesión del proyecto minero ha dejado al menos seis muertes de dirigentes comunales, contaminación, daños al ambiente en el Parque Nacional de Botaderos, zona protegida y ahora conocido como Parque Nacional Carlos Escaleras, en memoria del líder ambientalista Carlos Escaleras.

Este parque es una zona de alta producción de agua. Allí nacen los ríos Mame, Monga, Cuaca, San Pedro, Guapinol, Tocoa, Taujica, Bonito, Izquierdo, Chiquito, Tinto o Negro, entre otros.

Tiene una extensión de 96 mil 755.4 hectáreas, unos 967,55 kilómetros cuadrados, de las cuales 24 mil 223,7 hectáreas conforman la zona núcleo y 72 mil 31,7 la zona de amortiguamiento.

Los ambientalistas alertan que ‘de manera maliciosa, pese a que el Parque Nacional ha sido declarado como área protegida, aún no ha sido inscrito en el Catálogo de Patrimonio Público Forestal Inalienable, bajo el alegato que dicho proceso es indispensable pero costoso’.

Y es que -recuerdan- la Ley de Minería prohíbe otorgar derechos mineros en dicho catálogo.

Desde hace años, la minería es fuente de conflicto en Honduras y muchos ambientalistas han sido asesinados por defender el entorno y recursos naturales.

El asesinato de Berta Cáceres, el 2 de marzo de 2016, puso el foco sobre los peligros que afrontan estos activistas en el país centroamericano.

De acuerdo con denuncias, las empresas mineras y agroindustriales aquí tienen vía libre para la organización de grupos armados, paramilitares que de manera encubierta asesinan a la gente y se mantienen con altos niveles de impunidad.

https://www.prensa-latina.cu/index.php?o=rn&id=254947&SEO=reiteran-denuncia-contra-minera-en-honduras-por-danos-al-entorno

Honduras

A sangre y fuego se impuso proyecto minero en El Guapinol

21/02/2019
Coalición Contra la Impunidad documenta caso e interpone denuncia ante el Ministerio Público

Alcalde de Tocoa revela en vídeo que el proyecto minero fue concesionado inicialmente a Los Cachiros

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Tegucigalpa.-“Hemos andado siempre en apoyo. Porque cuando nosotros mirábamos a la comunidad de El Guapinol, cuando el agua empezó a ensuciarse, no se podía hacer nada con esa agua, teníamos que comprar el botellón y el botellón cuesta 20 lempiras. Entonces no hallamos qué hacer. Parecía que habíamos batido un poco de lodo, de ese colorado…espeso. Y el agua en la pila ya empezaba a echar mal olor”.

Sus palabras calaron en medio de las tibias paredes de un hotel capitalino a defensores del medio ambiente y de derechos humanos, pobladores de comunidades en conflicto por la explotación de los recursos naturales y a la poca prensa que asistió. Era la introducción vehemente de doña María Victoria Del Cid, una mujer de más de 70 años, que pese a su avanzada edad sigue luchando por la defensa del Río Guapinol, ubicado en la comunidad de El Guapinol, en el municipio de Tocoa, Colón.

Con su cuerpo arqueado por el paso de los años, pero con su memoria lúcida, doña María contó cómo fue que en Tocoa se conformó el Comité Municipal en Defensa de los Bienes Comunes y Naturales. Desde esta estructura comenzó—junto a varias mujeres y a unos “cuatro varones”, según sus propias palabras—a luchar por la defensa del rio Guapinol concesionado desde el año 2013 al proyecto minero ASP y ASP 1, ahora en poder de la empresa “Inversiones Los Pinares”, propiedad de Lenir Pérez y su esposa Ana Facussé, hija del terrateniente fallecido Miguel Facussé.

Guapinol

Doña María contó que estaba consiente que se reirían de ella y que esperaba que lo primero que dijeran, era: ¿esa viejita qué va a hacer?…Bueno, aunque sea andar haciendo bulla y animando, se respondió.

A los pocos días de haberse conformado el Comité, dijo que conoció al alcalde de Tocoa, Adán Funes, a quien le dejó claro que no necesitaba de su dinero para vivir y le expresó su incomodidad por sus posturas a favor de los proyectos mineros. Relató también, que ese mismo día, luego de concluir un evento público, persuadió a sus compañeros de lucha que el edil no haría nada por ellos, porque los políticos cuando ya tienen el dinero en la mano no se preocupan por el pueblo.

Doña María es firme en su mensaje y posturas, las que dice haber logrado por ayuda divina, porque apenas cursó el segundo grado. La longeva mujer habló en público durante un evento informativo donde se discutió sobre el conflictivo proyecto minero ASP y ASP1, instalado en la zona núcleo del Parque Nacional de Botaderos

La septuagenaria es testigo fiel del conflicto generado por la concesión del proyecto minero, que en los últimos años ha dejado al menos seis muertes de dirigentes comunales, contaminación del rio Guapinol, que suple de agua potable a los hogares de la comunidad, daños al ambiente en general en la zona núcleo y alrededores del Parque Nacional de Botaderos, establecida desde el año 2012 como zona protegida y ahora conocido como Parque Nacional Carlos Escaleras, en memoria del líder ambientalista Carlos Escaleras.

El Parque Nacional Carlos Escaleras es una zona de alta producción de agua. Allí nacen los ríos Mame, Monga, Cuaca, San Pedro, Guapinol, Tocoa, Taujica, Bonito, Izquierdo, Rio Chiquito, Tinto o negro, entre otros.

El proyecto minero jamás debió desarrollarse, porque está instalado en una zona protegida. No obstante, sobre el mismo hay cualquier cantidad de abusos e ilegalidades, ya que fue desde las instituciones del Estado que se reformó el decreto de creación del parque para adecuarlo a las pretensiones de la empresa minera.

Área protegida

El Parque Nacional Montaña Botaderos fue creado en el año 2012, como área protegida con el fin de conservar y proteger los recursos naturales y culturales. El parque cuenta con una extensión de 96,755.4 hectáreas, de las cuales 24,223.7 conforman la zona núcleo y 72,531.7 la zona de amortiguamiento.

En diciembre de 2013, el diputado al Congreso Nacional por el departamento de Colón, Ricardo Díaz, introdujo un proyecto de decreto para reformar el Decreto 127-2012, que contiene la declaratoria del parque como área protegida. El decreto fue presentado fraudulentamente bajo la idea de la necesidad de ampliar la zona de amortiguamiento, sin embargo, la finalidad oculta de la reforma se hace evidente al comparar la nueva redacción del artículo con la anterior. Ahora la Zona núcleo se ve reducida de 24,223.7 hectáreas a solo 24,006.36, es decir 217.34 hectáreas menos.

De manera maliciosa, pese a que el Parque Nacional ha sido declarado como área protegida, aún no ha sido inscrito en el Catálogo de Patrimonio Público Forestal Inalienable, bajo el alegato que dicho proceso es indispensable pero costoso. La Ley de Minería prohíbe otorgar derechos mineros en dicho catálogo, siendo esta la verdadera razón para no hacer la inscripción.

Otras de las arbitrariedades que se están cometiendo es la violación al Plan de Manejo del Parque que establece algunas restricciones a los proyectos mineros como: Procesos participativos de socialización con las comunidades a fin de que acepten y se involucren en las etapas del proyecto.

También prohíbe realizar actividades mineras en zonas de recarga hídrica o tomas de agua donde se abastecen las comunidades y la construcción de carreteras o vías de acceso y construcciones a orillas de quebradas, ríos u zonas de riegos.

Criminalización

El conflicto también ha dejado la criminalización contra decenas de personas, que se han organizado alrededor del Comité Municipal en Defensa de los Bienes Comunes y Naturales. Como nuestra de ese estigma 18 personas que forman parte del “Campamento Guapinol en Defensa del Agua y la Vida”, que se mantiene desde hace varios meses como acto de resistencia y protesta contra el proyecto minero, están siendo judicializadas, acusadas por los delitos de usurpación y daños, en perjuicio de la empresa minera “Inversiones Los Pinares”.

Los pobladores han sido arrinconados a los Juzgado con Competencia Nacional Territorial, donde se ventilan casos del crimen organizado, ubicándolos en una categoría como si se tratasen de criminales de alta peligrosidad.

A raíz de las denuncias de los pobladores de El Guapinol, la Coalición Contra la Impunidad (CCI), integrada por 19 organizaciones de sociedad civil, se trasladó a la zona a realizar una visita in loco y constató en noviembre de 2018 que la concesión minera es producto de prácticas legislativas irregulares y corruptas para favorecer el despojo territorial por parte de empresas privadas.

Este miércoles la CCI presentó un informe en un hotel de Tegucigalpa, donde además de doña María se encontraban otros pobladores y dirigentes sociales. Seguido del evento, los abogados de la Colación, Edy Tábora, Carlo Jiménez y Allan Alvarenga, se trasladaron a las oficinas del Ministerio Público a presentar una denuncia por abuso de autoridad y omisión de las obligaciones de los funcionarios, alrededor del conflictivo proyecto minero.

La Coalición documentó y analizó el proceso, desde que se creó el Parque Nacional de Botaderos hasta el momento en que la municipalidad de Tocoa, Colón, otorgó el permiso de operación.

En todo el proceso hay distintas instituciones que están relacionadas con el otorgamiento del título minero de manera irregular. La denuncia identifica al Instituto Nacional de Geología y Minería (Ingeomin), la desaparecida Secretaría de Recursos Naturales (Serna), la Secretaría de Energía, Recursos Naturales, Ambiente y Minas (MiAmbiente), el Instituto de Conservación Forestal y la Corporación Munucipal de Tocoa, Colón.

La Coalición demandó a la Fiscalía que proceda al decomiso de todos los expedientes relacionados con la concesión e individualice cuál es la participación de los funcionarios en cada una de las instituciones del Estado.

Relación de hechos

El conflictivo proyecto minero surge en el año 2013. El 22 de abril de 2013 el apoderado legal de EMCO MINING COMPANY presentó solicitud de otorgamiento de una concesión minera no metálica, para la explotación y posteriormente explotación de óxidos de hierro. Dicha solicitud fue admitida en junio de ese mismo año, identificando la zona como ASP.

Posteriormente, en el año 2014 el Instituto de Conservación Forestal (ICF) emitió un dictamen técnico (DPA-031-2014) declarando que el proyecto no era factible por estar en un área protegida y la Asesoría Legal recomendó a la Secretaría de Recursos Naturales declarar sin lugar la licencia ambiental porque se encuentra localizado dentro de la zona núcleo y dentro del proyecto se encuentra una fuente de agua que abastece a las comunidades.

Más adelante, la Dirección General de Evaluación y Control Ambiental (DECA), el 21 de mayo de 2014 emitió el Informe y Dictamen Técnico número 713/2014 mediante el cual se determinó la viabilidad ambiental del proyecto minero no metálico.

El 9 de mayo de 2014 el abogado Miguel Sánchez solicitó se dejará sin valor y efecto la opinión legal del ICF junto con los demás pronunciamientos de los departamentos que conforman el ICF. Luego y siguiendo las presiones de los empresarios, el 23 de junio de ese mismo año el ICF emitió el dictamen técnico OL-TOCOA-MDF-042-2014, concluyendo que el proyecto era factible.

Explotación minera

En ese juego de favoritismo, el 28 de enero de 2014 el Instituto Hondureño de Geología y Minas (Ingeomin) realizó la inscripción de la resolución que declara con lugar la solicitud de exploración y explotación del proyecto minero ASP ante el Registro Minero y Catastral, firmándose así el respectivo contrato de concesión minera no metálica.

A finales del 2014, el 29 de diciembre para ser exactos, la Secretaría de Energía, Recursos Naturales, Ambiente y Minas (MiAmbiente), emitió la licencia ambiental número 014-2014 a favor de EMCO MINING COMPANY, con una vigencia de cinco años. Y en enero de 2015 la corporación municipal de Tocoa, bajo el liderazgo del alcalde Adán Funes renovó el permiso de operación.

Narcotráfico

Sobre el proyecto minero de El Guapinol se ha dicho que inicialmente perteneció a la familia Rivera Maradiaga, líderes del cártel de “Los Cachiros”, extraditados a los Estados Unidos por delitos de narcotráfico.

“La participación de narcotraficantes no la tenemos documentado”, dijo el director del Comité por la Libre Expresión (C-Libre) e integrante del grupo de abogados de la Coalición Contra la Impunidad, que hasta el momento ha analizado 300 folios de 1,268 en total.

El profesional del derecho respondió, además, que la Coalición está trabajando en una investigación para establecer cómo el derecho minero se ha ido trasladando de una empresa a otra para evadir responsabilidades.

Tábora dijo a CRITERIO que solo han revisado 300 folios por impedimento del Acuerdo Ministerial 1402-2018 de MiAmbiente, aprobado el 8 de agosto y publicado en el diario oficial La 17 de agosto de 2018, que declara en secretividad las licencias y otros trámites ambientales.

Los Cachiros

Mientras Tábora no ha logrado documentar la participación de narcotraficantes en las concesiones mineras, el propio alcalde de Tocoa, Adán Funes, confiesa, según un video publicado por las “Noticias de Colón”, que la concesión de EMCO MINING COMPANY, pertenecía a Javier Rivera.

En el contexto del video, Funes dice además: “esas concesiones aquí en el sector San Pedro eran de Javier Rivera Maradiaga y no creo que ustedes siendo de este sector, siendo amigos de Javier Rivera Maradiaga y de toda la familia Rivera, ustedes no se dieran cuenta que él había solicitado esas concesiones, incluso la de allá, arriba de La Laguna, esa era de Javier Rivera”.

Funes reclama a sus partidarios que ahora que Javier Rivera Maradiaga se encuentra recluido en una cárcel de Nueva York nieguen su amistad. “Se lo llevaron los gringos y los que nos afanábamos de decir que éramos amigos de él, ahora no lo conocemos, ahora le damos la espalda a un amigo que le dio respaldo a estas comunidades”, dijo el edil durante una reunión de cabildo abierto de consulta en la comunidad de San Pedro, Tocoa.

El Parque Nacional Carlos Escaleras es una zona de alta producción de agua. Allí nacen los ríos Mame, Monga, Cuaca, San Pedro, Guapinol, Tocoa, Taujica, Bonito, Izquierdo, Rio Chiquito, Tinto o negro, entre otros.

https://criterio.hn/2019/02/21/a-sangre-y-fuego-se-impuso-proyecto-minero-en-el-guapinol/

Honduras

Comunidades de Tocoa,Colón reafirman su rechazo a la minería

El auditorio del Instituto Froylán Turcios, en Tocoa, Colón resultó insuficiente para albergar a centenares de ciudadanos y ciudadanas que desde muy tempranas horas del pasado domingo atendieron el llamado realizado por el Comité Municipal por la Defensa de los Bienes Comunes y Públicos.  “La Cumbre en Defensa del agua”  inició con una caminata donde las comunidades al grito de “toda mina contamina”, se preparaban para dejar clara una vez más su posición contra los proyectos extractivistas y mineros.

La cumbre, fue el escenario para tomar decisiones en torno al derecho al  agua. Las organizaciones plantearon tres propuestas para continuar con la lucha por declarar el municipio libre de explotación minera: Presentar la propuesta al Congreso Nacional, realizar un plebiscito municipal, y por último seguir con la exigencia de un cabildo abierto.

Pedro Landa, ambientalista y miembro del Equipo de Reflexión Investigación y Comunicación, ERIC, explicó que en el caso del plebiscito la Constitución de la República en su artículo 5 señala que se realizará en caso que ninguno de los poderes establecidos se haya pronunciado. Y en el tema de las concesiones en el sector Guapinol, el Congreso, Mi Ambiente y el gobierno local se pronunciaron al momento de otorgar la concesión.

“Por favor señores de la Corporación municipal, no engañen al pueblo. Esa propuesta para plebiscito municipal que ustedes realizaron meses atrás, es únicamente para cumplir un requisito y después decir que es improcedente porque ya la Constitución dice que no aplica.   Aquí lo que cabe es el cabildo abierto y por eso se ha venido exigiendo”, expresó el ambientalista.

 Cabildo Abierto: el camino

Para  Juan López,  líder social  y miembro del Comité Ambientalista por la Defensa de los Bienes Comunes y Públicos, es cuestión de lógica, si ya hay una víctima por los impactos de una empresa ¿para qué se le va a preguntar a la víctima si quiere más golpes?

La situación se mueve entre la ley y la justicia. La ley producto de la corrupción administrativa, lleva a un estado de violencia en espiral. La honestidad o la corrupción se mueven en el campo de la subjetividad humana y se expresa en el campo de la objetividad administrativa donde mueren principios que debieran ser las columnas indestructibles de la moral nueva.

Juan López cree que la asamblea del domingo  es una expresión del crecimiento político de la gente en relación a los bienes que hacen posible la vida. El pueblo poco a poco va abriendo los ojos y conociendo mejor. “El agua es fuente de la felicidad, por eso las comunidades no pueden renunciar a ser felices asumiendo con valentía los retos de cambiar patrones culturales productivos para mantener el equilibrio ecológico y ambiental.”, puntualiza.

Esly Banegas, representante de la Coordinadora de Organizaciones Populares del Aguán, Copa, expresa que la decisión de la población es clara, ahora toca a las autoridades municipales decidir si acatan el mandato del soberano.

En ese sentido, señala que si las autoridades siguen en su negativa de no escuchar a las comunidades, seguirán con las acciones legales hasta logar el objetivo de prohibir los proyectos extractivistas en el municipio.

Guapinol, sinónimo de criminalización contra luchadores

El 13 de septiembre de 2018, un Tribunal nacional emitió 18 órdenes de captura en contra de líderes sociales y defensores de derechos humanos, de la tierra y del territorio del Bajo Aguán, bajo delitos de “usurpación y daños en perjuicio de la empresa minera “Inversiones Los Pinares””. Esta medida se acompañó de una orden de desalojo del Campamento por la Vida. Estas medidas suelen ser aplicadas a delitos de alta peligrosidad como crimen organizado o en caso de maras, y resulta totalmente desproporcionado y escandaloso aplicarlas a personas defensoras de derechos humanos.

Son más de 3 mil 500 hectáreas las que están destinadas para la explotación minera en Tocoa, Colón. Sólo donde se ubica el campamento de Guapinol, el Estado concedió 200 hectáreas, abarcando a más de 14 comunidades del Sector San Pedro y La Ceibita.

 

Fuente:http://wp.radioprogresohn.net/comunidades-de-tocoacolon-reafirman-su-rechazo-a-la-mineria/

Honduras

Ciudadanía de San Nicolás rechaza presencia de minera en el municipio y se pronuncia sobre la continuidad del gobierno del Juan Orlando Hernández

En una histórica Consulta Ciudadana Municipal en la que se respondieron cuatro preguntas, la ciudadanía de San Nicolás, Santa Bárbara rechazó la presencia de una minera en el municipio además se pronunció sobre otros temas de importancia nacional.

Doña Aidé Cardona asistió a ejercer su derecho a la consulta y asegura que votó en nombre de su familia y sus nietos porque no quiere heredarle un municipio en ruinas y destrucción. “Es importante para el municipio San Nicolás y para la gente” manifestó doña Aidé mientras le manchaban el dedo en señal de haber participado en la Consulta Ciudadana.

El profesor Adelso Reyes, líder del municipio e integrante del equipo responsable de la Consulta Ciudadana agradeció la participación de la gente y la disponibilidad de voluntarios y voluntarias para participar en el proceso así como la solidaridad de las comunidades.

“Queremos agradecer a la gente que estuvo en las urnas, algunos estuvieron hasta sin comer o la comida se la llevaba la comunidad. Esta consulta la hicimos sin dinero sólo con el apoyo del Eric (Equipo de Reflexión, Investigación y Comunicació) y Radio Progreso por medio de la movilización, el apoyo logísticos, también el apoyo de alguna gente que voluntariamente han colaborado para que este proceso se dé” dijo Reyes.

La alcaldesa del municipio de San Nicolás, Santa Bárbara, Carmen Paz, también agradeció al Eric, a Radio Progreso y a la Convergencia Contra el Continuismo por hacer posible la oportunidad que como municipio se exprese en cuatro temas sumamente trascendentales. “Uno de ellos directamente vinculante con la toma de decisiones del gobierno local” dijo la alcaldesa.

Consulta y resultados

La Consulta Ciudadana fue impulsada por las organizaciones sociales y populares del municipio junto a la Convergencia Contra el Continuismo. Unas 1529 personas respondieron la consulta ciudadana.

Ante la pregunta ¿Está usted de acuerdo con el modelo extractivista y privatizador de los bienes comunes y servicios públicos?, la respuesta fue: por el NO 1463 que representa un 95.68%, y por el SI 17, un 1.11%.

También se preguntó: ¿Usted cree que vivimos en un Estado democrático derecho?, 1453 personas respondieron que NO y eso representa un 95.03% de los votantes mientras que por SI votaron 20 personas con un 1.31%.

La tercera pregunta de la Consulta fue: ¿Está usted de acuerdo en que continúe JOH con el control del Estado?, la respuesta de la gente fue: por el NO votaron 1439, un 94.11%, y por el SI 24 personas, un 1.57%.

Y la cuarta pregunta de la Consulta estaba vinculada a un tema meramente municipal pero con vinculación nacional. ¿Está de acuerdo en que haya explotación minera en el municipio de San Nicolás?, mil 473 personas respondieron que NO, un 96.34, y nueve personas dijeron que SI, un 0.59%.

Un voto por el municipio

Don Eliseo Vallecillo Murillo, acudió tempranito, antes de ir a abrir su negocio en el casco urbano del municipio. “Aquí ejerciendo el sufragio como buen ciudadano de San Nicolás, Santa Bárbara, tempranito porque tenemos negocio, tenemos que hacer primero la labor ciudadana y luego la labor laboral que tenemos ya que tenemos una microempresa” manifestó don Eliseo.

El microempresario dijo que era importante ejercer el sufragio porque no pueden permitir mineras en San Nicolás, Santa Bárbara. “Tenemos que ser personas conscientes de lo que está sucediendo en nuestro pueblo” aseguró.

Adelso Reyes dijo que la Consulta fue una expresión que recoge un voto de personas con convicción porque no hubo láminas de zinc, no hubo cemento, no hubo bolsa solidaria, no hubo bono diez mil, no hubo absolutamente nada más que la conciencia que le gritaba a la gente que tenía que salir a expresarse.

El Sacerdote Jesuita, Ismael Moreno, director del Equipo de Reflexión, Investigación y Comunicación, Eric, y miembro de la Convergencia Contra el Continuismo, salió contento con los resultados.

“Para nosotros, para el Eric, y como parte de la Convergencia Contra el Continuismo, es un aprendizaje sumamente importante porque en lo particular tuve la oportunidad de visitar varias comunidades de la montaña en San Nicolás, Santa Bárbara. Me llamó la atención que, no obstante el poco tiempo que hubo para la promoción de esta consulta, la participación de las comunidades fue notable, hubo participación de las juventudes, de personas mayores, de hombres y de mujeres” dijo el sacerdote jesuita.

Camino al Cabildo Abierto

La alcaldesa del municipio de San Nicolás, Santa Bárbara, Carmen Paz, se comprometió a darle respuesta a la demanda de sus habitantes de un rechazo rotundo a la presencia de una minera en la zona.

“San Nicolás es un municipio con una concesión minera. Hay que decirlo que desde el 2010 hay un acuerdo municipal que dijo NO a la minería, lo ratificamos cuando llegamos como alcaldesa en el 2014 acompañada de las mujeres y la juventud en una caminata por las diferentes calles del área urbana de San Nicolás y ratificamos nuevamente el NO, sin embargo continuamos siendo amenazados porque violentan la soberanía del municipio porque violentan cada vez e imponen situaciones que el pueblo no las quiere” manifestó Carmen Paz.

La alcaldesa se comprometió a convocar a un Cabildo Abierto. “Vamos hacer la convocatoria a un Cabildo Abierto que es un tema legal para nosotros como gobierno local, es una herramienta que tenemos como municipio y que la ciudadanía va a tener derecho también nuevamente a manifestarse, nosotros vamos hacer una lectura de esta participación ciudadana en todos los ámbitos, y es lógico, vamos a tener personas a favor y personas en contra” dijo Carmen Paz.

Un experimento democrático

El Sacerdote Jesuita, Ismael Moreno, aseguró que la Consulta Ciudadana en San Nicolás es un experimento en el que la población tiene una oportunidad de expresarse sobre temas fundamentales como vinculados a la minería, con el extractivismo y con el Estado de Derecho.

“Este es un experimento que nos ayuda a que la población hondureña, especialmente de las comunidades rurales, de las comunidades campesinas, tengan la oportunidad de participar para dar su opinión sobre temas fundamentales como los que estaban contenidos en esta consulta que tiene que ver con la minería, con el extractivismo, con el Estado de Derecho. Es una experiencia inédita en esta zona porque hasta ahora la población va a votar por una tradición, por rostros de diputados, de alcaldes, de presidente, y ésta es la primera ocasión que no votaron por rostros sino por temas” aseguró.

El Padre Melo dijo que entorno al 20% de la población de San Nicolás, con muy poca promoción, acudió a las urnas. “Hoy nos está diciendo, a través de esta participación, que no puede haber en este, nuestro país, una real alternativa para el presente y para el futuro sin tomar en cuenta la palabra y la opinión del pueblo” aseguró el sacerdote Ismael Moreno.

 

Fuente:http://wp.radioprogresohn.net/ciudadania-de-san-nicolas-rechaza-presencia-de-minera-en-el-municipio-y-se-pronuncia-sobre-la-continuidad-del-gobierno-del-juan-orlando-hernandez/

Honduras

Tocoa, Colón dice no a la minería

Los ciudadanos del municipio de Tocoa, en el departamento de Colón, se auto convocaron para desarrollar la “Cumbre municipal por el Agua y por la Vida”, celebrada este domingo y donde el pueblo tomó la decisión de decir no a la minería.

 

Los pobladores que llenaron el auditorio del instituto Froylán Turcios desde tempranas horas de la mañana, dialogaron sobre la necesidad de proteger los bienes comunes de sus comunidades y tomaron la decisión de exigir a las autoridades municipales, un cabildo abierto donde se declare al municipio libre de minería.

Ahora el balón esta en la cancha del alcalde Adán Fúnez, quien se comprometió de escuchar al pueblo y a rechazar los proyectos mineros y extractivistas en su municipio.

Los pobladores de varias comunidades del municipio de Tocoa se han venido quejando de la presencia de la empresa Inversiones Pinares de Lenir Pérez,  yerno del fallecido  Miguel Facussé, quienes han militarizado la zona y asesinado su pueblo, como lo denunció en su momento, Elsy Banegas de la Coordinadora de Organizaciones del Bajo Aguán (COPA).

La Diócesis de Trujillo ha venido acusando directamente al gobierno de Honduras de ser el responsable de la crisis que está viviendo el valle del Aguán y la comunidad de Tocoa específicamente.

Todo se genera desde el momento en que dio en concesión un área para explotación minera metálica dentro del Parque Nacional Montaña de Botaderos, en favor de una empresa minera siendo zona de alta producción de agua, dijo la Diócesis en su momento.

 

Fuente:https://criterio.hn/2019/01/20/tocoa-colon-dice-no-a-la-mineria/

Honduras

Éxodo desde el espejismo minero

Los rostros de los deportados narran este país. Los zurcos en su piel manchada por el sol nos muestran que la decisión de migrar es dolorosa, que regresar al lugar que los expulsó es como caer en una grieta que se los traga, y es así cómo los pobres, los frustrados, los dolidos –sin que nadie escuche sus gritos– también vuelven, apenas sin ser notados. Pero los deportados en una comunidad minera nos muestran aún más, son el reflejo del espejismo y no del desarrollo que produce el oro en un país como Honduras. 

Es 2 de noviembre, día de muertos, y en el cementerio de Azacualpa, una aldea entre montañas de pino y una mina a cielo abierto, un grupo de personas vigilan la entrada junto con un guardia de seguridad, mientras algunas familias se disponen a coronar a los pocos muertos que aún quedan enterrados. Este cementerio, el único pedazo de tierra que queda para la memoria de la gente, está a punto de ser expropiado porque debajo de él hay oro. Han quedado las ruinas de algunos mausoleos, sólo los huecos en el lugar donde hubo restos humanos, y unas cruces enterradas en la tierra indicando que allí aún moran los que ahora sólo son recuerdos. Hay tensión, que un extraño se asome enciende todas las alarmas. Han sido meses complicados en esa aldea olvidada, polvorienta, agrietada.

El ruido de las excavadoras y de rastras que llevan y traen toneladas de broza opaca los murmullos en el cementerio, allí, manteniendo el orden están los presidentes de los patronatos de San Miguel y Azacualpa, aldeas del municipio de la Unión, Copán al occidente de Honduras.

Saúl Escóbar, presidente del patronato de San Miguel se muestra a la defensiva, asegura que los periodistas tergiversan la información, que no escuchan a la gente que no es de la oposición a la minera y que los tres patronatos, el de San Andrés minas, el de Azacualpa y el de San Miguel están representados en el campamento afuera del cementerio, un campamento acompañado por personal de la empresa minera, el lugar desde donde se vigila que nadie interrumpa los trabajos de explotación en la estación de combustible, a la par del cerro del cementerio.

Mientras la gente que coronaba a sus muertos se aglomeraba alrededor de los líderes del patronato y nosotros, don Armando Rodríguez, presidente del patronato de Azacualpa dejaba claro que ése es un pueblo minero, que todos allí son hijos de la mina. «En el tiempo de la concesión estábamos cipotes, nosotros hemos visto cómo se han ido explotando los tajos. Siempre y cuando la minera vaya cumpliendo acuerdos, mucha gente tiene trabajo, la gente con trabajo tiene salud, educación, todo, sin trabajo no hay oportunidades y lo que hace la gente es irse, migrar», dice mientras un grupo de señoras lo secundan con la cabeza, afirmando.

La explotación minera en estas aldeas de la Unión, Copán se ha desarrollado sin mucho conflicto, la oposición siempre ha sido reducida, pero desde 2016 la situación se le ha complicado a la empresa ya que los mismos patronatos, los que cuidan que la explotación siga, pidieron ayuda legal para que el predio del cementerio se respetara y ahora la justicia hondureña ha dictado a lugar un amparo que impide que la empresa explote el cerro del cementerio, a pesar que las negociaciones siempre se habían hecho de manera bilateral, como todo en esa zona minera, los acuerdos son entre los representantes de la comunidad y los de la empresa. El estado no había pintado hasta ahora.

La empresa Minerales de Occidente S.A. subsidiaria de la trasnacional Aura Minerals tiene una concesión para explotación metálica de 400 hectáreas en La Unión, Copán, a la concesión le quedan al menos 40 años según el exgerente de la empresa, el norteamericano Monty Reed, revocado de su cargo el pasado 7 de diciembre y sustituido por el brasileño Luiz Carlos Guimaraes Lima . Pero los minerales en esas montañas a 210 kilómetros al suroeste de San Pedro Sula han pasado por varias manos, sobre todo empresas estadounidenses y canadienses desde la década de los 30, antes de la ley de minería.

Llegó primero la Gold Mines of America, luego la Rosario Mining Company, ambas con sede en New York para luego pasar a manos de New Idria una empresa de California cuyo rubro era la minería de Mercurio. New Idria ya no es una empresa activa y duró poco en la exploración del metal en Honduras, una exploración que siguió en esas mismas montañas la Noranda Inc. de Canadá que luego pasó derechos a Fischer Watt Inc de Estados Unidos, que dejó la concesión a la compañía inglesa Greenstone Resources. Esta compañía trabajó con una subsidiaria en Honduras y obtuvo la primera concesión ya bajo la primera Ley de Minería en 1998 comenzando trabajos un año después. El Huracán Mitch que azotó Honduras en 1998 fue la excusa para flexibilizar la legislación y priorizar la explotación minera como actividad económica que sacaría a Honduras de la miseria, el huracán devastó los valles fértiles, quedaban las montañas ricas en mineral para explotar.

Han pasado más de 70 años y las empresas siguen cambiando, yendo y viniendo. Después que Greenstone exportó el primer cargamento de oro en marzo de 1999, se declaró en banca rota y el banco más grande de Honduras tomó posesión de la explotación. Así nace en el año 2000 Minerales de Occidente SA de CV (MINOSA) creada por Guillermo Bueso ejecutivo de Banco Atlántida. La Compañía de Bienes Atlántida SA de CV es una de las mayores accionistas de Minosa. En 2006 la Yamana Gold Inc actualmente activa en la isla de Barbados y Canadá invirtió en MINOSA pero en 2009 los derechos de Yamana Gold fueron adquiridos por la canadiense Aura Minerals. Ahora Minosa, subsidiaria de Aura Minerals amenaza con cerrar operaciones por la presión de un pequeño conflicto que se desató por el oro debajo del cementerio. El más reciente cierre temporal comenzó el pasado 10 de diciembre y han dicho que podría extenderse por cuatro años. Más de mil empleados fueron despedidos.

***

Don Armando es un cafetalero de la zona, un señor campechano, con botas de cuero, cincho grueso y bigote pronunciado. Él con otros líderes comunitarios buscaron el apoyo del abogado Víctor Fernández, del Movimiento Amplio por la Dignidad y la Justicia para que les ayudara a vigilar el proceso de acuerdos con la empresa minera en el que estaba el traslado del cementerio. Así varias oenegés entraron en el cuadro y Fernández presentó un amparo firmado por más de 40 personas que estaban en desacuerdo con exhumar cadáveres para explotar el cerro del cementerio. Ahora don Armando  está del lado que rechaza la presencia de las oenegés y del mismo abogado luego que el recurso de amparo logró detener la explotación del cementerio.

Este líder comunitario apoyó para que la corporación municipal junto con Catastro delimitara la zona y la empresa suspendiera el paro de labores que sostuvieron por seis meses.

«Este tajo está delimitado porque se consensuó con la comunidad y ellos estuvieron de acuerdo y de esa manera están trabajando, pero como en este país la inversión privada no está siendo protegida por el Estado que es el que da la concesión, entonces los mismo trabajadores y la gente beneficiada de la mina, tenemos una buena negociación en las comunidades, la proyección social y montón de cosas que benefician a las comunidades pobres. ¿Por qué cree que se va la gente? Porque el gobierno le sube a todititito y a la gente no le ajusta lo que gana, entonces decide irse. Nosotros tenemos una buena fuente de trabajo entonces tenemos que cuidarla, siempre y cuando se respete los convenios y la dignidad de las personas de las comunidades», don Armando habla y lo dice con temor, y nos muestra un video en un celular, imágenes del conflicto minero que dejó dos muertos en Tocoa, Colón, una comunidad que se opone a la explotación minera y se enfrentó a las fuerzas de seguridad que actuaron para desalojarlos.

«El gobierno aquí nada… aquí hace tiempo la gente convive con la mina, aquí la educación está a costa de la mina y la municipalidad que se sostiene con los impuestos de la mina, la transferencia que le dan al alcalde es una papada, las comunidades están interesadas en que se siga trabajando, siempre y cuando se trabaje respetando a la gente porque vemos los beneficios. Si a medios del año se para esta mina se van todititos los maestros para afuera, los centros de salud hay que cerrarlos, porque el gobierno nos tiene en casi nada, el Ministerio de Salud y educación descuidado totalmente», continuó mientras Saúl, el otro líder de patronato lo secundaba y aseguraba que la mina tiene mineral para muchos años más, como si fuera infinito.

Víctor Hugo Alvarado, el alcalde de La Unión, Copán es un outsider, destronó al alcalde nacionalista que había gobernado por tres periodos y se ha ganado la popularidad diciendo que es diferente a los políticos tradicionales, sin embargo, cuando de negociar con la minera se trata, nada ha cambiado. Es casi imposible. Cuando la nueva ley de minería entró en vigencia y se eliminó el canon municipal del 2 por ciento, el alcalde recibió una oferta de la empresa minera, un compromiso firmado por Monty Reed, en el que la empresa minera mantendría el pago del 2% a la municipalidad a través de cheque o transferencia bancaria además de los proyectos de infraestructura previamente acordados.

Al llegar al municipio de la Unión, Copán lo primero que se lee son los rótulos que evidencian que la minera trabaja en conjunto con la municipalidad en la construcción del puente, de la calle de cemento, de otras mejoras en la pequeña infraestructura de un pueblo al que se accede difícilmente porque la carretera nacional está destruida.

«Nosotros recibimos a la empresa con un problema en una parte de la concesión minera que es el cementerio, en este momento están paradas las exhumaciones debido a que un grupo de 7 personas interpuso un amparo en los juzgados de lo contencioso administrativo donde se admitió el recurso y se concedió la suspensión del acto reclamado. La mina no sólo opera en el cementerio, es mucho más grande, la concesión es muy grande, no tengo idea de cuantas manzanas son, pero es grandísima, prácticamente allí sólo queda libre la comunidad de Azacualpa, a un lado, está como a 500 metros de la aldea para abajo. La empresa está laborando en otras áreas respetando el proceso», el alcalde asegura esto y da la impresión que él llegó allí a intentar navegar un barco con piloto automático.

Cuando pedimos las actas y los acuerdos firmados anteriormente, especialmente en 2012 entre la corporación y la minera, nos mandó con la secretaria municipal a ver los cuartos de archivo, cerrados con cadenas y candados, las llaves se las llevó el alcalde destronado. El sistema y la base de datos fueron reseteados y aunque ya pusieron denuncia ante el Tribunal Superior de Cuentas, nadie llega hasta ese pueblo, son invisibles. Se le podría poner el adjetivo de pintoresco al cuadro.

«La mina nos adeuda 4 meses de tributos porque no ha podido operar y cabe mencionar que pagan mas de 3 millones mensuales a la municipalidad cuando opera normalmente con lo cual viene a ser un apoyo a la municipalidad para que nosotros podamos llevar a cabo proyectos de infraestructura como en educación y salud, sólo en estos ámbitos la municipalidad paga 1 millón 300 mil mensuales y las transferencias municipales en este momento llegan solo a 1 millón 50 mil, no podríamos ni sobrevivir con lo que el gobierno transfiere.  Nuestra decisión ha sido ser mediadores para que la empresa pueda laborar y llegar a un diálogo con estas personas para el desarrollo del municipio», explica nervioso y asegura que la gente ha sido influenciada por ongs que no conocen la situación de las comunidades.

Pagan ellos a través de ongs que vienen a mal asesorarlos, impulsarlos y que estén en contra de la empresa minera, yo les digo a la gente que por qué no están aquí (las ongs) para buscar un diálogo como solución para que todas las partes sean beneficiadas.

Esa huelga que no tiene principios ni fundamentos legales. Creo que lo que aquí quieren es dañar nuestra gobernabilidad. Yo lo único que he escuchado es a un tal Víctor Fernández que dice que ha sido amenazado no sé de qué forma porque yo nunca he visto que lo han amenazado, aquí lo único que hicimos fue a petición de los patronatos, en un cabildo abierto que la población pidió que las ongs que no vienen a impulsar el desarrollo del municipio fueran declaradas non gratas, y eso fue avalado por la corporación municipal, no hubo ni un sólo regidor que votara en contra de esa petición.

Y ser non grato, ¿qué significa?

Siempre y cuando vengan a entorpecer el desarrollo al municipio la gente no lo va a permitir, los va a sacar o no sé qué van a hacer, la población  pidió que no vinieran a quitarles el empleo aquí organizaciones que no contribuyen al desarrollo. Si esto no se arregla comenzarán a salir nuevas caminatas hacia EEUU y hacia no sé dónde más por eso se exige seguridad jurídica para la empresa.

Saúl, de la aldea de San Miguel coincide con el alcalde, si la situación no se arregla «nos vamos a tomar la justicia por la propia mano», nos dijo cuando preguntamos si le veía solución cercana al conflicto.

Azacualpa está a unos veinte minutos del municipio de La Unión, carretera de tierra, polvorienta, pero con un paisaje extraordinario, bosques de pino que terminan en un hueco rojizo y un cerro destajado.

Allí en el cementerio las mujeres que coronan a sus muertos dicen que viven en un paraíso, no hay violencia, tienen grandes sueldos, tienen salud y educación, la tierra a veces tiembla pero es normal, cosas de dios dicen.

Vamos al cementerio, ahora hay dos cementerios, nosotros le pedimos a la minera un nuevo cementerio y lo construyó, dice una, y nos insiste que vayamos que nadie ha querido ir a ver los nuevos cementerios mucho más bonitos que el anterior.

Silvia Ramos es una de las mujeres que con más indignación se dirige a nosotros. «Cerrada la empresa nos vamos migrados todos. Quince mil patrullas dicen que tienen en Guatemala, de donde nosotros se fueron como 50 y les ofrecieron 10 mil pesos para que se regresaran, ya están unos trabajando en la mina, por eso necesitamos que el gobierno nos proteja esta mina porque nos da trabajo y por parte del gobierno no tenemos nada» .

La amenaza más sonada es la de migrar en manada, la caravana les ha enseñado que se puede, y no sólo la gente de la ciudad que huye de las maras y pandillas o del crimen organizado es la que se arriesga, de esas montañas también salen ríos de gente y podría ser peor si la minera cierra.

En Azacualpa parece que no pasa nada. Por las calles vacías un niño frasea a Bad Bunny a mi las putas me llueven. Se escucha como con eco. «Aquí no hay violencia», dice doña Alba Luz Hernández, con sus ojos verdes bien abiertos y riendo. Pero ella, allí en el cementerio anda coronando a 7 hijos, y la última entre sus muertos fue una hija. «A ella sí me la mataron usted».

«Yo todos los días vengo aquí porque tengo 7 hijos enterrados aquí, vengo a sembrar florecitas y limpiar, tengo los angelitos por allá y por aquí a una muchacha que me mataron. Un muchacho que allí anda, un hombre de ella la mató, ay anda libre, ay que le ponga castigo aquel de arriba, de todas maneras… los otros se me murieron chiquitos, uno de neumonía otro recién nacidos, aquí se morían los niños recién nacidos por falta de medicinas. Yo ya les dije que a mis hijos los quiero sacar de aquí porque este cementerio tiene un peligro este cementerio nuevo es bien bonito, hay ya bastante gente enterrada allá. A mi hija la mataron un 15 de septiembre, ya la voy a sacar de aquí, a todos los quiero mover para  el otro cementerio. Porque me queda más cerca», dice doña Alba arrebatada mientras señala unos mausoleos, los pocos que han quedado llenos, alrededor sólo hay huecos.

A doña Alba se le morían los niños de enfermedades tratables en la ciudad, el padre de la mayoría nunca se hizo responsable de los hijos y a ella le tocaba mantenerlos a todos, lavando ropa, aseando las oficinas de la minera. «Allí anda ahora ése peleando contra la mina que le dio de comer a sus hijos cuando él nunca lo hizo», dice doña Alba, quien no ha podido exhumar los 7 cadáveres, eso en dinero se traduce en casi un millón de lempiras en indemnizaciones que está perdiendo, y se siente desesperada, una de sus hijas con apenas 24 años se fue en la caravana de migrantes de octubre de 2018 y ha regresado deportada, de nuevo a la desolación.

Allí las mujeres comparten historias de mucha violencia y aunque La Unión no circula en las estadísticas de violencia por no ser un municipio con alta tasa de homicidios entre los cinco departamentos con alta incidencia de homicidios está Copán, sus municipios más violentos son Florida y Santa Rita. Las comunidades esconden dinámicas de violencia que están sumergidas en cada familia de cada rincón de Honduras, eso no se mide con número de muertos. Los muertos de doña Alba son muchos y son producto de la violencia.

Mientras Alba mostraba las tumbas, doña Juana Guevara de 76 años coronaba a un hijo y sus padres.

Yo soy de Azacualpa, pero llegamos aquí porque mi papá nos trajo por el trabajo porque sólo jornaleaba a 150 lempiras (5 dólares) la tarea, mi papá fue el primero que se vino y después trajo la familia. Mi hermana la que venía tierna tiene 62 años, ya había mina aquí. Todo el tiempo la empresa nos ha visto bien, aquí si estoy enferma el carro va a traerme, me lleva a la clínica, si es mucha la enfermedad me mandan al hospital. Aquí  uno se enferma por casualidad, de una gripe, no por los humos de la mina ni por el agua, aquí no hay nada de eso, aquí no hay tradiciones de decir porque usted no esta a favor de la empresa no la van a atender. Yo tengo dos muchachas que están casadas, los maridos trabajan en la empresa, los nietos también, mi hijo es albañil e hizo plan básico y lo hizo por la empresa porque me lo puso a estudiar, yo desde que me casé no volví a trabajar, hace 43 años, mi esposo trabaja en la empresa, él está operado ahorita, la empresa hasta a Cemesa de San Pedro Sula me lo llevó porque él estaba desviado de la columna, porque él trabajaba moviendo máquinas.

Aquí todo eso no se da (los homicidios), ahora sí, ya ida la empresa aquí si quedamos comidos de tierra porque es la única fuente que tenemos aquí, no hay que dejar, hay que apretarle el pescuezo para que no se vaya.

Otra mujer interrumpe.

Si mis hermanos quieren los vamos a mover de aquí a los míos. En este cementerio hay fallas.

Y doña Juana reacciona.

Aquí hay fallas, hay fallas, por ejemplo en mi casa allá en Azacualpa está toda resbalada, pero son deslizamientos naturales y con lo que dios hace no se puede hacer nada.

Y doña Alba interrumpe para decir con ilusión que el cementerio nuevo es bien bonito, «una gran planada».

Aquí nada fue a la fuerza, es bien organizado nosotros vemos cuando sacan a los muertos. Hace poco vino el obispo aquí a dar una misa y por allá afuera había unos huesos de una bestia y dijeron que eran huesos de una mujer y los enterraron, eso es pecado, aquí todos vemos cuando sacan los cadáveres.

Las fallas

Ramiro Lara, trabaja en la Asociación de Organizaciones No Gubernamentales (ASONOG) y ahora es considerado non grato en las comunidades montaña arriba de la Unión. Él conoce el proceso que ha tenido la concesión minera en mano de varias empresas nacionales y trasnacionales. Es un hombre mayor con un rostro melancólico, más bien preocupado.

Se inicia cuando en 1983 el Estado le otorga una concesión minera por 100 hectáreas a la empresa que en aquel entonces se llamaba Minerales de Copán, era nacional pero con fondos del extranjero. En 1992 el Estado amplía la concesión con 300 hectáreas más para hacer un total de 400, ya en ese entonces se instala una trasnacional minera, Greenstone de capital canadiense, que empezó a operar a través de Minerales de Occidente. Entonces aquí se inicia lo que en Honduras se conoce como la minería a cielo abierto porque siempre había existido la minería subterránea como en El Mochito o San Juancito pero la minería a cielo abierto fue aquí en La Unión Copán, San Andrés cuando se inició en 1999.

Cuenta el cuento como si después del relato uno se pudiera ir a dormir.

En 2000 comienza el conflicto en San Andrés minas, era una comunidad tradicional con la maldición que debajo de ella había grandes cantidades de oro, las leyes actuaron en favor de la empresa minera y obligaron a la comunidad a moverse del sitio hacia donde está hoy, hubo gente que ofreció resistencia pero nadie pudo impedir, era un proceso nuevo y si la institucionalidad del Estado la avalaba era difícil detener aquello. La empresa siguió trabajando allí hasta 2015 y sigue hasta la fecha pero el conflicto se agudiza porque en 2012 se firma un convenio entre el patronato de Azacualpa y la empresa minera donde negocian que se va a trasladar el cementerio a cambio de ciertos beneficios sociales. Empieza el 2016 y la empresa no había cumplido nada de ese convenio, propone la empresa hacer un adendum a ese convenio y lo hacen y lo firman el 11 de agosto de 2016, y allí otra vez el patronato deja la puerta abierta para que la empresa pueda negociar con cada familia la exhumación de los cuerpos aunque siempre hubo gente que se oponía.

La comunidad de Azacualpa está ambientada la mayor parte del tiempo con los bombazos de las voladuras que hace la minera para aflojar la tierra y sacar la broza. Muchas casas tienen rajaduras y la empresa para resarcir el daño prometió una casa a cada familia de Azacualpa en miras de que en algún momento la próxima veta a explotar será debajo de la actual comunidad. En ese convenio que luego fue modificado con un adendum se habla del pago por daños en las casas pero también se estipula el traslado del cementerio. Esos acuerdos los firmaron miembros del actual comité ambientalista de la zona, los que ahora se oponen a la exhumación de los cadáveres. Los líderes comunitarios han cambiado de parecer al menos un par de veces, de un lado y de otro.

Lara asegura que esto ha traído división en las familias de Azacualpa y que la violencia se va manifestando.

El caso de Fausto Trigueros por ejemplo, estaban exhumando a su padre sin autorización y llegó con un machete el 14 de febrero de 2018, ya tenían el cadáver de su padres afuera y ese hombre llegó endiablado y les dijo: si ustedes no vuelven a meter a mi papá allí les vuelo la cabeza, se imaginan ustedes un campesino encabronado, no les quedó de otra que meter el cadáver a la tumba de nuevo.

En la oficina de San Pedro Sula, el abogado Víctor Fernández del MADJ contiene denuncias, expedientes, resoluciones de decenas de casos por conflictos socio ambientales, él más grande quizá es el de Berta Cáceres, él fue parte de la acusación privada en el juicio contra los asesinos de Cáceres, quien se oponía a una represa hidroeléctrica. El MADJ tiene presencia territorial en la zona noroccidental sobre todo y ha acumulado hostilidades por parte de la empresa privada y el gobierno. Sin embargo, sorprende que Fernández realmente se muestra preocupado por el conflicto en Azacualpa, que parece ser menos grave desde lejos. Nunca había sucedido que una corporación municipal los declarara non gratos, tampoco la campaña de desprestigio que se impuso en redes sociales por una acción legal que la empresa minera perfectamente puede apelar desde el derecho.

«A mí personalmente me han invitado desde 2015 para ver el asunto de Azacualpa. El asunto puntual para el que me convocaron fue el tema de la explotación del cementerio, es el tema final pero el que más sensibilidad tiene, ese tema es el que volvió a Azacualpa a la opinión pública, la mina vino trabajando normalmente durante los últimos años a pesar de la resistencia de la gente y los daños que hay yo fui para verificar eso, me costó un poco entrar al asunto justamente por las ambivalencias de la gente y de las estructuras organizativas que participan allí, a mí me presentaron el caso, ya el patronato y el comité ambiental, y muchas otras organizaciones nacionales habían participado de este proceso de diálogo que terminó en la firma del adendum a un contrato que se firmó desde 2012 en el que se hablaba de los términos de las operaciones de la empresa y los beneficios de las comunidades, y en este adendum se mete sutilmente el tema de la construcción de otras casas que la relacionan con la posibilidad de desplazar el cementerio y pagos individuales a la gente. Es un convenio confuso, yo le encuentro sentido jurídico en que además de ser un convenio poco claro no tiene participación comunitaria real, quienes participan es un grupo de 4 o 5 dirigentes comunitarios a los que yo interrogué, su primera reacción fue que ellos habían sido sorprendidos con la firma del adendum, es decir, que ellos no comprendían la dimensión de lo que firmaban y que además fueron sometidos a mecanismos de coerción para firmar».

Allí firman los presidentes de patronato y del comité ambiental, juntos los que ahora están enfrentados.

«Les pregunté: ¿qué antecedentes hay sobre el cementerio en términos de decisiones comunitarias? Me dijeron que en un cabildo abierto de 2015, de manera informada con opiniones técnicas la gente resolvió que el cementerio no se iba a mover. ¿Y ustedes tienen el acta? Sí la tenemos, bueno entonces ésa es una decisión comunitaria, ustedes no son la comunidad entonces quiere decir que ustedes debieron consultar a la comunidad para firmar. Yo le encontré sentido jurídico a eso, ese convenio es nulo porque viola las reglas básicas de la relación contractual. No importa si ya hay pagos, las cosas se deshacen en las cosas que se hacen, eso dice el derecho, si la cosa se determinó en un cabildo abierto lo único que puede modificar eso es un cabildo abierto», explica.

Según Fernández el Estado es el mayor responsable de lo que ocurre en esta explotación, y aunque la discusión reciente gira entorno al traslado del cementerio, hay aristas que siguen pendientes, por ejemplo, el abogado habla de 14 fuentes de agua que han sido afectadas y habla de personas afectadas en su salud, como el esposo de doña Juana y otros testimonios que están escondidos en la impunidad.

«Para el Estado lo más fácil es la tercerización de todo, si allí hay una empresa que tiene un centro de salud y arregla la carretera, el Estado desaparece. Lo mas fácil es que arreglen con la empresa, que sofoquen las posibilidades de resistencia que hay allí, el mayor riesgo de la gente opuesta a estas cosas es que todo el aparato está confabulado por eso tenemos buenos lugares por muertes violentas, impunidad…

Hay gente que le parece que no puede vivir sin esa mina, fácilmente pueden imponerse a hacer cosas, yo leí comentarios feos desde la disposición de agredir hasta la disposición de contratar gente para ejecutar esto, ya hay nivel de agresividad muy alto», agrega.

Lara, de Asonog asegura que el desarrollo que la explotación minera lleva a las comunidades aledañas no es sostenible.

«El costo ambiental que le estamos dejando a las presentes y futuras generaciones es incalculable. Esa mina en Azacualpa, La Union, Copán estará contaminando el río Lara con el drenaje ácido de minas que nadie lo va a poder detener, luego irá a caer al río Higuito de donde tomamos el 30% del agua en Santa Rosa, irá al Jicatuyo, al Ulúa y desembocará en el océano atlántico. Las futuras generaciones nos culparán a los que hoy no pudimos evitarlo, es una herencia que les estamos apenas dejando a los hijos y nietos.

A nosotros no nos preocupa que digan que se va a ir el desarrollo, que la gente se va a tener que ir, si usted va a San Pedro y Corquín tienen mucho más desarrollo que la Unión, sin empresa minera son comunidades más prósperas, estas comunidades vivían del café, maíz y frijol, no es cierto que van a quedar sin trabajo, los han entontecido. Si hablamos de desarrollo, si se va la empresa la gente no debería tener miedo porque debería sostenerse», explica.

El tema de la contaminación sólo se abordó en tres ocasiones cuando ocurrieron descargas de cianuro en el río Lara, la empresa minera llama a esto accidentes y la fiscalía no ha castigado el crimen ambiental. La última descarga fue el pasado 27 de junio de 2018, asegura Lara. Sin embargo ni la fiscalía ni la unidad de monitoreo de Ingeomin ni las organizaciones que acompañan a las comunidades han realizado un estudio científico que calcule el daño ambiental. La minería a cielo abierto es conocida como una práctica con múltiples riesgos para el ambiente, sobretodo por la remoción de suelo, la contaminación del aire y la filtración de cianuro y mercurio que llega a las fuentes de agua.

«Toda la institucionalidad del Estado: la policía, el CONADEH, la Secretaría de Salud, Instituto de Conservación Forestal, Copeco, todos responden a los intereses de la empresa minera, Copeco dictaminó que el cementerio está en un sitio de riesgo por lo tanto hay que quitarlo pero no dicen que la empresa minera lo ha provocado con ese hueco que tiene a un costado del cementerio. La secretaría de salud dice que el cementerio es insalubre, pero ese cementerio es uno de los más bonitos que hay por su ubicación y la vista. El ICF dando permisos amañados, el 8 de septiembre dieron un permiso para cortar 1200 arboles pero los comunitarios dicen que fueron mas de 3007 arboles que la empresa misma los había sembrado, el articulo 48 de la ley de minería dice que no pueden ser explotadas áreas que ya habían sido explotadas y eso está haciéndolo la empresa ahora, eso nos dice la libertad con la que operan estas empresas en Honduras», culmina Lara.

Rolando Milla, del CONADEH tiene casi 20 años de trabajar como titular del comisionado de Derechos Humanos en Santa Rosa de Copán, cuando llegamos a su oficina sacó de inmediato el expediente que dice Azacualpa en la tapa, un bloque de documentos.

«Nuestro papel es intervenir denuncias mutuas, los pobladores se han quejado, hubo jóvenes que estuvieron antes protestando que la minera les dio trabajo y ahora le cuidan el cerro a la minera, es un poco complicado. Nosotros como institución no somos competentes para esto porque el mandato del CONADEH es ver violaciones a DDHH entre el Estado y la población y no entre particulares pero en este caso nosotros remitimos a la fiscalía. El problema ha sido la falta de una visión social en la zona y la desconfianza a las instituciones que tienen que ver con el tema ambiental que hoy por hoy la gente desconfía sobre las medidas de mitigación, se logró en un momento que la DECA tuviera acompañamiento de la población a las inspecciones que se hacen de manera regular en la zona, pero ahora que hay gente que se opone hay desconfianza sobre los análisis que se hacen en la mina.

Lo que nosotros garantizamos es que los defensores de DDHH tengan las condiciones para ejercer su labor independientemente estemos de acuerdo o no, se mandó una carta a Azacualpa pidiéndole al alcalde que enmendara su actitud y que reflexionara de poner en precario la seguridad de los defensores de derechos humanos y que hubiera libre locomoción para realizar su trabajo, pero no tuvimos contestación», explica Milla e intenta lavarse las manos, es un funcionario preocupado por el conflicto a pesar que no es visto con confianza, sobre todo por el sector crítico a la minera.

«Es evidente que la explotación minera a cielo abierto genera un impacto ambiental fuerte, el desarraigo de comunidades que hay que hacer movilizaciones de territorio de personas hacia otro sector, eso genera impacto en la parte emocional en las personas, también el tema de las voladuras, el tema del polvo y de ciertos gases que se remueven con los movimientos de tierra que ha sido denunciado por parte de varias organizaciones que se ha afectado la salud de los pobladores, el cianuro con el que se esparce, la contaminación de los ríos que se ha dado en algún momento que han denunciado los pobladores, el problema para nosotros es el acompañamiento de las instituciones del Estado, no le puedo decir si realmente se está contaminando o no», y de repente toma un papel y lápiz y comienza a dibujar:

«Ésta era San Andrés, todo esto no había, estaba en la parte plana, el cerro de San Andrés desapareció, era bien bonito, bien pintoresco, yo conozco desde el 94 aquí, hace 23 años estoy aquí en CONADEH, este cerro desapareció, es mi visión lógica de esto, aquí estaba San Andrés y lo movieron, explotaron, este otro cerro aquí es el cerro el cementerio ellos quieren el cementerio porque es una de las vetas mas ricas de oro, si este cerro desaparece solo queda este cucuruchito aquí que es Azacualpa, no hay duda que al explotar este cerro se pone muy vulnerable Azacualpa, así que tendrán que salir, tiene que haber otra negociación porque la gente no quiso las casas de abajo. ¿Qué se visualiza? que si no hay cambios por parte de la forma cómo invertir, desarrollar lo que habrá al final de esto es más pobreza, porque la mina va a haber dejado trabajo temporal pero sin inversión y evidentemente el impacto del daño ambiental es fuerte porque las pilas van a quedar varios años después de retirada la minera», culminó.

En 2016 la empresa minera solicitó una inspección a COPECO para evaluar una falla geológica en el cerro del cementerio, el informe fue realizado por un ingeniero que en sus primeras páginas asegura no tener las suficientes capacidades técnicas para confirmar teorías a pesar de que al final concluye que el cementerio tiene un riesgo inminente por una falla geológica natural.

Omar Lagos, subcomisionado de COPECO en Santa Rosa de Copán asegura que en su unidad ellos saben poco ya que ese trabajo lo hizo gente de Tegucigalpa pero que sí están enterados de la falla.

«Sí existe una falla geológica interna que pone en riesgo el patrimonio de la gente, aunque sea la gente que ya falleció es patrimonio de los familiares, existe riesgo que ceda aunque explote o no la mina, en el occidente existe una falla geológica en el Jagual, eso es interno, 500mts de carretera y 40 manzanas de tierra, eso en el occidente es normal», explica nervioso Lagos, quien intenta desmarcarse del conflicto siempre que puede. Asegura que como COPECO han recibido intimidación de la oposición por haber hecho el estudio a petición de la minera.

«Según estuve viendo COPECO recomendó trasladar el cementerio. El tema de la explotación eso ya quien tiene que evaluarlo es INGEOMIN pero con el tema de la explotación y la vulnerabilidad de Azacualpa, la comunidad está en una zona de riesgo, hay unas casas que están ubicadas en mal sector, en zona de riesgo, allí hay que hacerse estudios pertinentes para saber si la explotación está empeorando la vulnerabilidad, a nosotros no nos solicitaron eso sino que fue por otra cosa, el tema de explotación si eso genera riesgo, si la mina contamina el río Higuito, si es así se deben hacer los estudios en tiempo y forma», y reafirma el discurso de COPECO de que la vulnerabilidad es provocada por la manera en la que las poblaciones se asientan en lo territorios de Honduras.

«Si la vulnerabilidad ha aumentado probablemente sea porque a veces la población construye en zonas de derrumbe, de alto riesgo, posiblemente haya aumentado aunque pudo haber reducido porque algunas personas fueron trasladadas a la Nueva Azacualpa. Si usted lo relaciona con la mina y con la explotación y eso allí se tiene que hacer un estudio, en 2016 sólo se hizo del cementerio, ya un estudio relacionando a la mina con la vulnerabiliadd en su momento se debe hacer porque la mina debe ser responsable y tener protocolos de acción, el tema de riesgo no sólo es de COPECO también de INGEOMIN, para evaluar si esto afecta la vida de los pobladores», agregó.

Manuel Rodríguez es uno de los pocos vecinos de Azacualpa que se opone a las operaciones de la empresa minera, no sólo al traslado del cementerio, para Rodríguez la empresa debería cerrar. Manuel tiene miedo y nos habla desde el interior de un vehículo, encerrados para que nadie lo escuche.

«Ellos nos amenazaban por los medios de comunicación hace poco decían que querían la cabeza mía y la de otro compañero que se llama don Lito López y así venimos aguantando amenazas y humillaciones de la mina, dicen que hemos estado allí por dinero pero eso es falso nosotros sólo queremos que se respete el bosque, porque de repente vamos a tener un problema con la comunidad pero va a ser por la destrucción que ha hecho la minera, está a la vista», cuenta Manuel y cuando habla de «ellos» se refiere a sus vecinos, los que están ahora en un campamento vigilando que las operaciones de la mina no sean interrumpidas. La última vez que Manuel intentó frenar una máquina de la empresa, un grupo de trabajadores se le fue encima.

«A mi la mina nunca me ha dado un presupuesto, me dedico a sembrar café y he sembrado maíz, frijoles, soy agricultor, la gente dice que se va la minera y se mueren de hambre, es que no quieren trabajar. Aquí no hay nada de beneficios, ésa es la mentira que no la compartimos, allí está el centro de salud que es por parte del gobierno y el gobierno es irresponsable porque no paga el personal, la mina apoya para estarnos manipulando aunque eso no sea nada, no es justo», agrega.

Mientras habla, Rubio Méndez, secretario del Comité Ambiental muestra las grietas en el suelo de la casa de su compañero Miguel, presidente del comité. Ambos firmaron el adendum que acordaba con la empresa poner precio a los muertos como parte del paquete de mejoras a la comunidad que la empresa había prometido por los daños causados con las voladuras.

«Yo planteé que para evitar los problemas a futuro la solución era que reubicaran la comunidad totalmente, en vista de eso, el gerente de ese tiempo se llamaba Carlos Calderón, él estaba de acuerdo pero vino el nuevo gerente pero no estuvo de acuerdo, ellos proponían hacer una urbanización con 396 viviendas que salieron en el censo. Fue esa etapa que hicieron 120 casas, en 2013, en 2015 tenían que estar construidas todas. En vista que en 2013 pararon la construcción de las viviendas, la empresa pidió una prorroga el 16 de septiembre, se le dio, en la comunidad siempre ha habido buena voluntad de colaborar con la mina, en diciembre no cumplieron, desde allí a 2014 hubo una manifestación, en youtube la pueden encontrar», explica Rubio, en esa protesta hubo desalojo y un grupo de personas terminaron judicializadas por daños a la empresa, entre ellos Miguel. Al final el trato quedó vacío, la gente decidió que no quería ya las casas sino el dinero.

«El patronato tiene mucha responsabilidad en esta división porque aparecía en ese adendum un terreno, empleo, no dieron nada. En la comunidad somos unas 15 familias que se oponen y en otras comunidades pequeñas, estamos en la protesta preocupados por tanta situación, dónde va a ubicarse a toda esta niñez de Azacualpa. Según la explotación que se realiza, el terreno es vulnerable, en un movimiento sísmico esta comunidad puede deslizarse, si se resbala esta comunidad se corre el riesgo de que se pierdan muchas vidas», culmina Rubio, mientras Miguel Ángel muestra los documentos del adendum donde sale su firma.

Miguel Ángel López es presidente del Comité Ambiental de Azacualpa pero fue de los primeros trabajadores mineros de la actual empresa, comenzó en 1997 cuando no había sindicato y la explotación venía iniciando, fue operario de máquinas y supervisor. Ahora lucha para que la empresa minera no avance devorándolo todo hasta llegar a su comunidad.

«Usted ve el peligro en el que vivimos aquí, las casas están dañadas, las pasamos parchando, el terreno es vulnerable, una parte donde ya en una ocasión el mismo COPECO dijo que la comunidad estaba en una zona vulnerable y a diario recibimos el impacto de las voladuras, se siente por debajo de la tierra», dice Miguel, habla de las fallas, las geológicas y las institucionales.

Don Armando, el actual presidente del patronato coincide con sus opositores, de hecho, los que se colocan en dos bandos opuestos tienen más coincidencias en lo que dicen de lo que aceptan. «Esta comunidad tarde o temprano la van a tener que reubicar, ya el daño está hecho».

En el foro anual que realiza la Universidad Politécnica de Ingeniería (UPI) realizado el pasado julio de 2018, Aura Minerals y Minosa realizaron una serie de actos de protesta para exigir al Estado de Honduras protección a su inversión, el stand donde mostrarían su labor empresarial y social estaba vacío con un rótulo exigiendo seguridad jurídica. Allí el exgerente de Minosa, Monty Reed destituido justo tres días antes de que la minera cerrara de nuevo sus operaciones, aseguró a Contracorriente que «estamos tratando de tratar a todos con respeto pero hay algunos que están usurpando los otros derechos y cometiendo delitos flagrantes y dañando equipo, amenazando gente, tirando rocas sobre equipo», Reed habla de pérdidas millonarias, pero enfatiza que la mayor pérdida la tiene el Estado, «la ganancia para reinvertir en el país ya se acabó, no vamos a tener. Otra parte de estos cientos de millones que se retornan al país está perdido. Por el país se está perdiendo más que todo, no por nosotros», dice en su atropellado español.

Reed habló a los estudiantes de la UPI sobre la minería moderna y la responsabilidad social de la industria extractiva. «La minería tiene una historia muy fea de desprotección del medio ambiente pero en los últimos 40 años esto ha cambiado. Hay estándares mundiales que nosotros respetamos. En general esperamos dejar mejor el ambiente que cuando llegamos, también en el ámbito social. Queremos dejar socialmente y ambientalmente algo mejor, en términos de escuelas, salud  y todo.

1986 estudiantes becados beneficiados. ASONOG y otras ONG ¿Cuántas estudiantes están beneficiando ellos? ¿Cuántas becas? ¿Cuántos pacientes han tratado en nuestra clínica?

En el medio ambiente, cada año sembramos 50 mil árboles. ¿Cuántos han sembrado ASONOG y el Movimiento Amplio?».

Si el cementerio es reubicado, dice Reed, al menos quedarían unos diez años de explotación en esa zona, la exportación de la empresa ronda los 100 millones de dólares anuales pero de eso la ganancia es muy poca, trata de convencer, Reed, que el negocio de la minería no es tan bueno como se piensa.

Lejos de Tegucigalpa, del hotel lujoso desde donde Reed nos habló, Miguel nos pide que veamos a su alrededor, hay mucha gente en la comunidad que vive en la pobreza y con tantas décadas de explotación, sacando el oro en el que se asentaron sus antepasados que llegaron en busca de oportunidades a esas montañas. Las nuevas generaciones ven cada vez menos un futuro prometedor en su pueblo.

Los deportados

Los deportados –sus historias de vida– van narrando este país, pero los deportados de este pueblo minero descubren el velo del espejismo en el que viven y del cual al final también se huye.

Oneida de 28 años, hija de doña Alba Luz, supo de la caravana por la televisión y se unió a 150 jóvenes de Azacualpa que en la frontera de Aguas Calientes se sumaron al grupo de más de 7 mil migrantes que viajaron en manada, en lo que luego se llamó éxodo y a cuenta gotas va filtrándose por la frontera de Estados Unidos.

Ahora está de regreso, firmó la deportación voluntaria a cambio de un apoyo de 10 mil lempiras que le prometieron representantes del gobierno en la frontera, ha pasado casi un mes y del dinero no ha sabido nada, la mandaron con un ticket que le daría un viaje gratis de retorno a su aldea, nadie la llamó después de eso.

«El primer día que nos llegamos al puente la policía nos tiró bomba lagrimosas y por la noche nos estuvieron leñateando, agarrando con leños porque no nos abrían el portón, hubo niños golpeados y niños que murieron.

–de aquí hubo muchachos que sí tenían empleo y se fueron (interrumpe su madre)

Al llegar, la pensada que llevábamos era trabajar y sacar adelante nuestras familias porque así como yo, tengo 3 niños pero estoy viviendo de arrimada con mi mamá. Tengo uno de 12, uno de 8 y la niña de 4 años. Sí me gustaría intentarlo de nuevo como aquí no hay empleo».

Oneida ha tenido trabajos temporales en la minera, como barrendera, pero sus hijos comen todos los días, ya de regreso sólo puede pensar en cómo retomar el camino de nuevo.

–El papá de los niños no está aquí, y para qué si no le ayuda a los niños.

es torcida como la mamá interrumpe doña Alba. Sólo madre tenían mis hijos aquí, así está ella, ella es la mamá y papá de los niños. Ríe nerviosa.

La voz se regó en el pequeño pueblo  y los deportados iban saliendo, hablando, con sus rostros tristes, quemados.

Francis de 23 años nunca había salido de su comunidad pero el hambre lo empujó a unirse a la caravana. «Tengo una niña y la mujer embarazada. estuve con la COMARC, cuando llegamos no nos dijeron nada sólo nos dijeron que íbamos a un albergue, al día siguiente me tomo la foto para llenar el formulario y esperamos tres días pero no nos respondieron nunca, entonces yo no aguanté y me regresé, me tuvieron dos días en el corralón de México y hablé con el consulado de Honduras entonces me deportaron. En el aeropuerto nos dieron una bolsa solidaria que le dicen, y me dieron el boleto para que pudiera venir aquí. Ahora a lo mismo como estaba antes, pidiéndole al gobierno que nos ayude porque si uno ayudándole cómo se va a ir de su país, uno con un trabajito que tenga que gane más o menos para mantener a su familia, con eso», cuenta Francis, quien como la mayoría de los deportados no terminó la primaria.

«A veces nos tocaba pedir jalón, a veces caminando, a veces corriendo, el camino es pesado», cuenta Melvin de 29 años, un campesino que no podía sostener a su familia con el pago diario de 150 lempiras. «Como no hay empleo nos toca emigrar, me dedicaba a trabajar en la tierra, aquí ya no se puede, entonces por eso uno emigra, yo cuando me di cuenta que iba una caravana me uní a ellos, les dije a mi familia que me iba para darles una mejor vida, aquí cien pesos gana uno, no ajusta para la comida. Muchos emigramos por eso», afirma Melvin quien con apenas 12 años comenzó a sostener la familia porque a su padre lo mataron por robarle 1000 lempiras (alrededor de 50 dólares).

«Yo ayudaba a mi mamá y a mis 7 hermanitos, con sal y tortillita se pasa pero a veces uno se siente hostigado, si no hay nada de repente me voy a volver a ir. Cuando yo le digo así a mi mamá se pone a llorar, uno en las noticias ve como matan la gente en ese camino», las mujeres alrededor interrumpen:

                        –por eso defendemos la mina, al menos da trabajitos.

«De nada sirve estar pobre», suelta Joselino, otro de los deportados, allí en su casa de adobe donde tiene conectado apenas un foco y le llegan a cobrar grandes cantidades por consumo de energía. Él y su vecina se fueron en la caravana y las lágrimas se les quedan atrapadas en los párpados cuando recuerdan lo duro del camino y la frustración de regresar al espejismo que los expulsó, el que los deportados cuentan mejor en la Honduras más olvidada.

Joselino regresó desde México en un bus a las 5 de la mañana, con ropas que a simple vista no eran de él, el pantalón le quedaba corto y el saco le quedaba grande, debajo, nada, aquel saco varias tallas más grande que la suya era todo lo que lo protegía del frío a su llegada a la Frontera de Agua Caliente, para ser recibido por los agentes de migración, por los empleados de COPECO que rápido, sin darle tiempo para asimilar lo que estaba sucediéndole a él y a otros tantos adultos y niños, lo metieron a otro bus en dirección a la terminal de San Pedro Sula, ésa fue la primera vez que lo vimos. Lo vimos sin verlo, y luego en su casa, su casita pequeña de adobe, en Azacualpa, desde su casa como desde toda las casas de Azacualpa, se suele ver a la maquinaria de la minera sacando el oro del que jóvenes como Joselino jamás se beneficiarán.

 

Fuente:https://contracorriente.red/2018/12/29/exodo-desde-el-espejismo-minero/?fbclid=IwAR2M41M-6z8_UafbB0VotlH-kWizvQN_VqEkkeTQe0HYlI7HCjLK6hlWrek