La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente inició el protocolo de atención para cuantificar el derrame de una solución con baja concentración de cianuro, en piletas de contingencia de la planta Merrill Crowe de Minera Penmont, S. de R.L. de C.V., unidad La Herradura, ubicada en el municipio de Caborca, Sonora.
En atención a un reporte de la representación legal de la citada empresa minera el pasado día 6 de mayo y confirmado este jueves ante la Delegación Federal de la Profepa en la entidad, la inspección preliminar señala que el incidente provocó una suspensión de las actividades productivas de casi 14 horas en la mina.



Mediante un grupo en redes sociales llamado “NO a la explotación minera de Samalayuca” se denuncia que la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (CONANP) dejó fuera a esta zona que anteriormente se encontraba dentro de la protección con el fin de iniciar un proyecto minero de una empresa canadiense.
Organizaciones civiles como el Frente Ciudadano en Defensa del Agua y la Vida y el Agua Vale más que Oro, denunciaron que el proyecto minero Los Cardones, en Baja California Sur, pretende instalarse en las inmediaciones de la Reserva de la Biósfera Sierra La Laguna “violando derechos mediante argucias legaloides, e incluso violando flagrantemente leyes y reglamentos federales y estatales”.
Lo quieren todo. No se conforman con tener a su favor las leyes, el aparato estatal que las aplica y las políticas gubernamentales para hacerlo posible. Con el argumento de que necesitan garantizar la seguridad jurídica de sus inversiones en el sector energético, en la industria minera e incluso en proyectos de agua, a los que los pueblos indígenas y comunidades campesinas se oponen porque violan sus derechos al territorio y al acceso preferente a los recursos naturales, entre otros el señor Gerardo Gutiérrez Candiani, presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), en una reunión con la Unión Social de Empresarios de México, expresó su interés de que las consultas a los pueblos indígenas, reguladas en la Constitución federal y el derecho internacional, no sean de cumplimiento obligatorio.
El 30 por ciento del territorio mexicano está en manos de 293 empresas de capital extranjero que extrae, explora y transforma los recursos minerales, así lo destacan cifras oficiales y grupos ambientalistas que defienden el derecho de los ciudadanos a su tierra y a la propiedad de lo que ésta genera. A la par del crecimiento de la industria minera, también han aumentado las violaciones a los derechos de las comunidades y a las garantías laborales de quienes trabajan en la extracción, así como la cada vez más preocupante “devastación” al medio ambiente que, de acuerdo con diversas organizaciones, ha generado daños irreversibles que afectan a todo el país.
La Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) advirtió que Grupo México está obligado a indemnizar, ofrecer consultas médicas y dar seguimiento durante 15 años a todas las personas con daños a la salud por el derrame de la mina Buenavista del Cobre, denunciada por las comunidades aledañas al río Sonora.
Recientemente en un artículo publicado en Russia Today que había sido publicado antes por la Jornada el domingo, se explica claramente cómo el 70% de las minas mexicanas están concesionadas a mineras canadienses. Quedando el restante de 30% para inversores mexicanos, todo de acuerdo a informes de la Cámara Minera de México (Camimex). El asunto no acaba ahí, puesto que derivado de la reforma energética, se aprobaron una serie de puntos que pretenden privatizar el agua, y obstaculizar el acceso al agua a diversas comunidades en el país. Por citar algunos ejemplos claros, Grupo México derramó en el Río Sonora, 40 mil metros cúbicos de solución de cobre, arsénico y demás, que se derramaron desde la mina Cananea, operada por la compañía Buenavista del Cobre en el Estado de Sonora.

Organizaciones civiles y expertos en la materia denunciaron que la Secretaría de Economía (SE) promueve el despojo de tierra y la violación de derechos humanos al publicar su “
En el Ejido Ovando Turquía, Municipio de Escuintla, Chiapas; siendo las 4:00 de la tarde del día 08 de marzo del 2015, reunidos los ejidatarios, avencindados y pobladores del mismo ejido, para tratar asuntos relacionados con las minas.