Por Giorgio Trucchi*
Varias organizaciones(1) se movilizaron este último martes hacia la capital Tegucigalpa, para repudiar la decisión del Congreso de aprobar la reforma de tres artículos de la Constitución que dieron vida a las Zonas de empleo y desarrollo económico, popularmente conocidas como ciudades modelo (charter cities).
También rechazaron la aprobación de la Ley de Minería que, aseguran, representa un serio retroceso ambiental para el país.



Organizaciones garífunas, indígenas y populares les fumaron el puro a los diputados y “enterraron” simbólicamente el Congreso Nacional la mañana de ayer durante una protesta que realizaron contra la recién aprobada Ley de Minería y de las Regiones Especiales de Empleo y Desarrollo económico, o Ciudades Modelo.
Las concesiones mineras serán de hasta 15 años, con la posibilidad de renovación, extremos que rechaza la Coalición.
Un proyecto consensuado sobre la Ley de Minería fue presentado ayer al pleno del Congreso Nacional, por una comisión especial presidida por el diputado nacionalista Donaldo Reyes Avelar.
Defomin dice que se dejan de percibir 200 millones de lempiras al año por falta de ley. Compañías mineras radicadas en el país hacen un pago voluntario a la espera de que se aprueben las reformas legislativas.