29 de Agosto de 2011
Algunos datos de la realidad que El Ancasti pudo comprobar en Andalgalá revelan el escaso impacto económico que dejó hasta hoy la actividad en el principal departamento minero: los pocos puestos de trabajo que se generaron en la comunidad y la desilusión de los proveedores mineros que tenían cifradas esperanzas en la venta a las grandes empresas. Sigue leyendo
