En noviembre de 2009, Mariano Abarca Roblero, representante de la Red Mexicana de Afectados por la Minería (Rema), en Chicomuselo, Chiapas, fue asesinado frente a su hogar, tras haber participado en una serie de enfrentamientos con trabajadores de una empresa canadiense que extraía minerales cerca de la zona. Sin embargo, hasta la fecha, ninguna persona ha sido sancionada conforme a lo que marcan las leyes mexicanas cuando se comete un asesinato, denunció José Luis Abarca Montejo, hijo del activista.
El lunes pasado, el Tribunal Permanente de los Pueblos (TPP) determinó que empresas mineras canadienses, donde se encuentra la compañía Blackfire Exploration, incurrieron en violaciones a los derechos humanos en Sonora, Chiapas y en varios países de Latinoamérica, según anunció el jurado en su veredicto preliminar.
En 2009, Blackfire Exploration y su filial Blackfire Exploration México S.A., operaban en el municipio Chicomuselo y en 12 mineras más en el estado chiapaneco.