Por Roberto Aguilar
(Tomado de EL COMERCIO, pág. 27, Sábado 29 de marzo de 2008=
El presidente Correa ya nos contó nuestro futuro: seremos un país minero.
El oro, la plata y el cobre fluirán a raudales de nuestros yacimientos, los mayores del mundo, y harán del Ecuador una nación próspera y boyante. Saldremos del subdesarrollo y nos volveremos ricos.
Las apartadas comunidades productoras serán las primeras beneficiarias de esos recursos. Podemos imaginar pueblitos adorables, limpios, dotados de todo servicio y poblados por mineros sanos, bien alimentados, longevos y felices, en un ambiente natural inmaculado y puro gracias a la conciencia ambiental y social de las compañías mineras y el Estado. Sigue leyendo