NO ES NO CARAJO
Perú

Las lagunas de Conga y el cambio climático

NO ES NO CARAJOSegún el Tyndall Center de Inglaterra, el Perú es el tercer país más vulnerable ante el cambio climático, y «en 40 años tendría el 60% del agua que tiene hoy”, según estima el Ministerio del Ambiente (Minam). Más allá del debate político e ideológico alrededor del proyecto Conga, de la minera Yanacocha, el conflicto social que provocó esta inversión puso en agenda la discusión sobre la importancia del agua, dado que su ejecución suponía la afectación de un sistema de lagunas y bodefales en las provincias de Celendín y Cajamarca. A partir de ello, veremos la importancia de los humedales.

SIN LAGUNAS, PERO CON MÁS AGUA

En defensa del proyecto, Yanacocha señala que la cantidad de agua que se almacenaría en sus reservorios es mayor al de las lagunas Perol, Mala, Azul y Chica. “Las lagunas tienen 1,4 millones de m3. Tres de los cuatro reservorios almacenarán 3,2 millones de m3, exclusivamente para la comunidad”, señaló la corporación en un suplemento difundido en 2011. “Los reservorios se construirán antes que la mina y se llenarán, principalmente, con agua de lluvia y con el agua que se trasladará de las lagunas. De esta manera, los reservorios empezarán a ofrecer agua antes de que la mina empiece a producir”, afirmaron. Dicho de este modo, la cuestión parece reducirse a “cantidad de agua”.

¿Y EL ECOSISTEMA?

Sin embargo, para los críticos del proyecto minas Conga, la empresa Yanacocha no toma en cuenta que esas cuatro lagunas forman parte de un sistema hídrico. 

“A partir de esas cuatro lagunas hay todo un ecosistema que funciona con bofedales, manantiales y fuentes de agua, de donde la población a través de una serie de canales los utiliza en función de sus actividades económicas. Esos ecosistemas prestan servicios ambientales que tienen un valor”, afirma José de Echave, investigador de CooperAcción en entrevista a Ideeleradio. De Echave, quien fue viceministro de Gestión Ambiental, criticaba el peritaje internacional al Estudio de Impacto Ambiental (EIA) de Conga, realizado a pedido del Ejecutivo.

El informe de dicho peritaje, publicado en abril del 2012, indicó que la pérdida de las cuatro lagunas y más de cien hectáreas de bofedales tendría un impacto “poco significativo”. Por el contrario, en un informe alternativo, Robert Moran, hidrólogo y geoquímico norteamericano, señaló que “buena parte del proyecto se encuentra en una zona que está considerada como “ecosistema frágil” por las leyes peruanas”. Con ello, Moran se refiere al Artículo 99 de la Ley General del Ambiente, el cual incluye a bofedales y lagunas altoandinas, como en el caso de Conga, en la categoría de “ecosistemas frágiles”.

LA IMPORTANCIA DE LOS HUMEDALES

Afirma Servindi que «una de las objeciones contra el proyecto minero Conga de la empresa Yanacocha es que éste destruiría, además de cuatro lagunas, los ecosistemas únicos de los humedales de la zona». «En Cajamarca, no tenemos nevados, nuestra agua nace de las lagunas, de los humedales», afirma Milton Sanchez, presidente de la Plataforma Interinstitucional Celendina (PIC), colectivo que se opone a Conga.

A partir del debate en torno a este proyecto, podemos presentar algunas consideraciones sobre la importancia de los humedales. ¿Qué sabemos de los humedales? En la última celebración por el Día Mundial de los Humedales, se dio a conocer que en el Perú «los humedales suman alrededor de 8 millones de hectáreas» entre 12.200 lagos y lagunas en los Andes.

Según el Minam, los humedales son importantes porque funcionan como reservorios de la biodiversidad, controlan las inundaciones, contribuyen al abastecimiento de agua, retienen sedimentos y nutrientes, brindan protección contra tormentas, juegan un papel importante en la estabilización de microclimas y retención de carbón, son fuente de una gran diversidad de productos naturales útiles para el hombre, sirven como lugares de recreación y turismo, funcionan como medios de transporte, son centros para la investigación y educación ambiental, y son de gran valor socio-cultural.

Ante ello, cabe preguntarnos: ¿Qué pasará con otras lagunas, bofedales y humedales cuando se proponga ejecutar otros proyectos que impliquen su afectación? Si como advierten los organismos internacionales, el Perú es uno de los países más vulnerables ante el cambio climático, entonces, se debe prestar mayor importancia a la conservación y el cuidado de estas fuentes naturales de agua.