Chile

Eike dice que se queda en Chile por alta demanda y “diálogo abierto con el gobierno”

MPX Energía, que desarrolló el proyecto termoeléctrico Castilla mantiene esta iniciativa entre su portafolio futuro.

MPX Energía, la filial de negocios eléctricos del multimillonario Eike Batista, no tiene planes de abandonar el proyecto Castilla en Chile.

La central a carbón, que inicialmente iba a ser instalada en la costa de la comuna de Copiapó, Región de Atacama, fue frenada por la Corte Suprema en agosto del año pasado, cuando ya había conseguido el permiso para iniciar obras por parte de la autoridad ambiental.

La empresa brasileña informó en su balance a diciembre de 2012 que llevó a cabo una reestructuración de su actividad en Chile y que en principio no contempla eliminar esta iniciativa, que consiste en la construcción de una central a carbón con una potencia de 2.100 MW, además de un puerto y las respectivas obras asociadas.

La razón de esta decisión está en que Chile cuenta con una elevada demanda por energía, a lo que se suman las buenas relaciones con el gobierno de Chile.

“La administración reelaboró su estrategia de negocios en Chile, la que seguirá esperando por el desarrollo de la planta de generación térmica en Chile. Esta decisión está basada en la gran demanda por energía que existe en Chile y en el diálogo abierto con el gobierno de Chile”, dijo en su balance 2012 la empresa en cuya propiedad participa el holding empresarial de Eike Batista y la alemana E.On.

La compañía no ha dado muchas luces sobre si insistirá con el proyecto Castilla, para lo que está obligada a enviar nuevamente el estudio de impacto ambiental para su estudio y tramitación por parte de la autoridad ambiental, luego que la Corte Suprema invalidara el proceso de tramitación tras un reclamo de una comunidad de pescadores de Totoral.

Tampoco se ha manifestado públicamente si MPX decidirá finalmente insistir con Castilla bajo su diseño original, o planteará una unidad más pequeña, teniendo en cuenta que el tamaño ideado inicialmente -que consideraba una capacidad instalada de 2.100 MW, cifra equivalente al 25% de la demanda promedio del SIC- fue objeto de críticas y fue tomado por los opositores para “advertir” que en las costas de la región se construiría la “termoeléctrica más grandes de Sudamérica”.

Qué hacer con Castilla
Una alternativa que se baraja es tramitar Castilla por etapas, teniendo en cuenta que el proyecto contempla construir seis módulos de 350 MW cada uno y que, además, desde un principio la idea era concretar primero sólo una unidad e ir creciendo en la medida de que la demanda energética en la zona en que se ubica lo justificase.

Esto imitaría lo ocurrido, por ejemplo, con la central Ventanas (AES Gener) y Guacolda, que también comenzaron con una central y que fueron creciendo en la medida en que la demanda justificaba añadir nuevas unidades. Si se opta por ese modelo, se debería tramitar cada unidad de forma independiente.

La empresa rediseñó su situación en Chile, lo que incluyó la reducción del personal y un cambio en el perfil profesional hacia temas más relacionados con el desarrollo del proyecto, más técnico y, además, de evaluación de la situación social y judicial de la central termoeléctrica Castilla.

Fuente / Pulso