“Felicitamos a Costa Rica por priorizar el interés general y proteger el ambiente de actividades que pueden causar daños irreversibles”, dijo Gladys Martínez De L., abogada de la Asociación Interamericana para la Defensa del Ambiente (AIDA). “Esperamos que este positivo paso, sea reforzado con la cancelación de la concesión otorgada al potencialmente dañino Proyecto Minero Crucitas”, agregó Martínez.
“En el hemisferio hemos sido testigos de innumerables proyectos con inmensos impactos ambientales y sociales, que desafortunadamente han causado graves daños. Las minas a cielo abierto son un ejemplo reiterado, por lo que esta Ley es un precedente histórico para la región”, dijo Anna Cederstav, Co-Directora de AIDA. “Esperamos que muchos otros países sigan el ejemplo de Costa Rica”, mencionó Cederstav. La Dra. Anna Cederstav, es una de las peritos que alertó a la Sala Constitucional en el 2005 sobre los impactos potenciales del controversial caso de la mina Bellavista.
AIDA es una organización no gubernamental de derecho ambiental internacional que ha luchado por la prevención de los impactos de la minería a cielo abierto en el continente americano, incluidos el caso Bellavista en Miramar de Puntarenas y el Proyecto Minero Crucitas en Curtis de San Carlos.