Decididos a defender 19 mil 570 hectáreas. Un definitivo «no» ha dado este pequeño municipio de la Mixteca de no más de mil habitantes, al proyecto de una compañía canadiense para explotar una mina en sus terrenos comunales, por ser concesionados por la Secretaría de Economía (SE) durante el sexenio del presidente Felipe Calderón Hinojosa, sin respetar sus derechos y por la contaminación que generará en el medio ambiente.
«El pueblo se niega, no quiere la mina», afirmó el secretario del Comisariado de Bienes Comunales, Fulgencio Gumersindo López Rosales.