Dirigentes del gremio explican que hay grupos organizados que se concertan con otros, que reducen la carga.
La brutalidad del asesinato del conductor Mario Navarro para robarle 32 mil litros de petróleo diésel impactó al gremio en la Región de Antofagasta. Sin embargo, no fue sorpresa ya que este tipo de asaltos, especialmente en las vías que van a las mineras de la zona, es más habitual de lo que parece.
«El hecho de que se haya robado el combustible es más común en los últimos tiempos, y en este ilícito operan verdaderas mafias», explicó Adelina Carvajal, presidenta de la Agrupación Gremial de Dueños de Camiones «La Portada». Asegura que una decena de choferes que transportaban combustible, que en su mayoría viajaban solos, fueron asaltados en el desierto en los últimos meses, en zonas de bajo tránsito, pero «nunca se llegó a matar al conductor».