Perú

¿Y la desaceleración? Cuánto crecerá la minería este año

 

Se ha abierto un debate interesante sobre las proyecciones de crecimiento del sector minero para este año. Ojo, de crecimiento y no de caída. El Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) y el Banco Central de Reserva (BCR), aparentemente no se ponen de acuerdo en la cifra pero si coinciden en que la actividad minería crecerá: mientras que el MEF (Marco Macroeconómico Multianual) proyecta un crecimiento para la minería metálica de 3.5%, el BCR es más conservador y anuncia apenas un 2%.

¿Quién se acercará a la cifra definitiva a fin de año? Las variaciones en las proyecciones se deben fundamentalmente al peso que se le da en el análisis al contexto desfavorable de la economía mundial y su impacto en las cotizaciones internacionales de los metales o en su defecto a los niveles de producción que se puedan alcanzar en el país este año en algunos metales.

 

Al margen de posibles aciertos o errores, lo importante es identificar algunas tendencias que ya se han comenzado a dar en la producción minera del país. Un primer elemento a destacar es que si cualquiera de las dos proyecciones se concretan, este sería el segundo año consecutivo de cifras en azul para el PBI de la minería metálica, luego de varios años de caída: como se puede apreciar en el gráfico, el año pasado el PBI minero creció en 2.12%, luego de sucesivas caídas desde el año 2009 hasta el 2011. Cabe señalar que el quinquenio del gobierno aprista fue el peor de los últimos 20 años para la minería peruana.

El otro dato interesante es que la producción minera del país dependerá cada vez más, del dinamismo de la evolución del cobre. El año pasado, en el último trimestre, entró en producción el proyecto de Antapaccay en Espinar, Cusco y para finales de este año se prevé la entrada en producción de la primera etapa del proyecto Toromocho, en un inicio a un 25% de su capacidad, proyectándose alcanzar el 100% a mediados del 2014. Además, están los procesos de ampliación de Cerro Verde, Southern Perú y Antamina, todos predominantemente de cobre.

Por lo tanto y pese a la caída de los niveles de producción del oro y las menores cotizaciones internacionales, todo indica que la evolución del PBI minero metálico seguirá siendo positiva, no solamente este año y que se ha entrado a un período de crecimiento que se sustentará sobre todo en el salto productivo del cobre con la maduración adicional de proyectos como el de Las Bambas, Constancia, entre otros. No incluimos en estas proyecciones al proyecto Quellaveco, en Moquegua, porque aparentemente quedará en espera, hasta nuevo aviso, por las dificultades financieras por las que atraviesa Anglo American.

En este contexto y con estas proyecciones cabe preguntarse por la desaceleración de la que se hablaba en los meses y semanas precedentes. Lo cierto es que no se ve por ningún lado. Ahora se anuncia una inversión minera de más de US$ 22 mil millones hasta el 2016, que si bien puede estar sobredimensionada, lo que no se discute es que en este quinquenio se van a superar largamente los niveles de inversión del quinquenio precedente.

 

Habrá que mirar con atención como este escenario se refleja en las futuras proyecciones del Producto Bruto Interno minero y no se debe perder de vista la agenda social y ambiental que sigue estando pendiente y que el gobierno no quiere atender.