“El arsénico es un metal pesado…, sin embargo, la exposición prolongada puede causar problemas a la salud, como cáncer, cambios en la coloración de la piel, callos, verrugas e incluso la muerte por sobredosis a niveles elevados. La norma para consumo humano (NOM-SSA1-1994) permite concentraciones de 0.05 miligramos por litro (mg/1), pero en el río Sonora han detectado hasta 0.228mg/l), que representa miles de veces más de lo recomendable.”
Periódico Excélsior 15/9/2014
Pese al gran problema descrito y publicado por el periódico “Excélsior”, alrededor de dos meses después de la fecha arriba indicada, las autoridades federales junto con la mayor parte de los presidentes municipales de los H. Ayuntamientos afectados del Rio Sonora, han avalado la limpieza del río Sonora.
¿Cómo es posible que un problema tan serio y delicado se haya “evaporado” tan rápido? ¿Acaso raspando el suelo en ciertas partes mínimas y, por “encimita” se eliminó la grave contaminación?
¿A dónde fue a parar las grandes cantidades de arsénico?
Sabemos que el arsénico es un elemento que encontramos en la naturaleza. Por ejemplo, en pescados, cereales, carnes y, vegetales entre más. Por ello, cuando lo encontramos en forma de arsenobetaina, es mucho menos tóxico que el arsénico inorgánico.
Lo que no se comprende del todo es la estructura lógica de las respectivas declaraciones, ya que por un lado, “todo mundo” confirmó y quedó establecida como verdad objetiva de que la contaminación de los ríos Sonora y Bacanuchi rompían récord en toda la historia de la minería en México; para posteriormente en forma un tanto misteriosa o, mejor dicho, sospechosa, declarar limpio el río Sonora en menos de tres meses. Mayormente cuando las técnicas de limpieza se reducen a “rastrillar” por encima sólo algunos trayectos de los casi 300 kilómetros del causes del Río Sonora.
No es necesario romperse la cabeza en forma dramática, detectamos que existe una profunda contradicción con la realidad.
¿Cómo es posible que se hayan reconocido tantos venenos en cantidades industriales, para casi instantánea y mágicamente declarar la limpieza?
¿Cuál es el gran método científico tan efectivo? Que se nos diga la metodología tan efectiva que se empleó en la supuesta limpieza.
Sabemos por ejemplo que el agua potable para que obtenga tal denominación, requiere que sea tratada para eliminar de ella tanto la turbiedad, color y microorganismos. Dicho resultado se logra sólo mediante una combinación de procesos y mecanismos como la floculación, sedimentación, filtración, desinfección y, coagulación.
Pero hablar de arsénico, es decir, de un elemento químicos sumamente venenoso, es hablar de palabras mayores. Ya que exigen procesos más complejos y caros para poder eliminarlo del agua contaminada.
Para un magno-veneno como lo es el arsénico, no bastan la coagulación ni la floculación. También requiere involucrar la adsorción-coprecipitación, utilizando sales de hierro y aluminio. Además, adsorción en alúmina activada, ósmosis inversa, intercambio iónico y oxidación, para terminar en filtración. El día lunes 6 de octubre, Conagua confirmó contaminación de agua por derrame en rio Sonora:
“Al menos 5 pozos contiguos al rio presentan concentraciones peligrosas de arsénico y fierro.”
Ahora bien, veamos cómo se puede eliminar el arsénico del agua contaminada: Arsénico + 5 puede ser eliminado efectivamente por medio de la coagulación con sulfato de aluminio o en su defecto, con hierro y, por los procesos de ablandamiento con cal.
Después, los coagulantes antes señalados se hidrolizan formando hidróxidos, sobre los cuales el Arsénico + 5 se absorbe y co-precipita con otros iones metálicos.
¿Creen que dichos métodos se estén utilizando y vigilando para eliminar el arsénico por parte de Conagua, Semanart y, de la minera?… Yo tampoco. (Si no vigilaron e impidieron el derrame, siendo omisos y descuidados).
Conagua, en semanas pasadas reconoció presencias de fierro y arsénico en pozos en márgenes del Rio Sonora. Siendo los de San José de Baviácora, Guadalupe de Ures, San Felipe de Jesús, así como dos de Hermosillo, cerca de “El Molinito”; superando 11 veces los niveles permitidos de arsénico y, 4.3 de fierro. Todavía el 17 y 18 de septiembre Semarnat, reportó que 5 pozos presentaban metales pesados en parte media y baja de la cuenca del Rio Sonora. Al principio, Conagua, Profepa, Semarnat y Cofrepis, reconocieron metales pesados en las superficies, pero no en los pozos, posteriormente, también se contaminaron. Y, apenas hace unos cuantos días se avaló por parte de los H. Ayuntamientos ¡la limpieza! (?)
Puntualicemos, primero, ya Greenpeace dictaminó que los venenos puede provocar a los habitantes daños al sistema nervioso, hepático, renales, reproductivos, neurológicos, pulmonares. Enfermedades complicadísimas como Alzheimer, mal de Parkinson, hepatitis, cáncer, osteoporosis, hemocromatosis y, la muerte por causa del arsénico.
Segundo, el aluminio que muchas de las veces es fiel acompañante del arsénico, tenemos que por lo profundo e intensamente contaminante que es, ya no se fabrica en Japón. Llevándose desde hace algunos años tal tarea a Australia y Brasil, donde la mano de obra es barata y, sus leyes permisivas a la contaminación en extremo, semejantemente a las leyes de México.
Tercero, en otras partes del mundo como por ejemplo en Taiwán, una tercera parte del arroz no se puede comer por el veneno que contiene en cadmio, y/o arsénico. En cambio, en Corea del Sur sólo se puede beber agua en una tercera parte de los ríos. En la mitad de los ríos de China ya no existen peces comestibles.
Cuarto, detengámonos ahora en el poder mortal del arsénico. La verdad que es de preocuparnos profundamente ya que debemos recordar que el arsénico lo utilizaban los egipcios para la momificación de los cadáveres de sus reyes. Precisamente por su alta intoxicación venenosa y, su garantía presencial en el espacio del tiempo por ¡miles de años!
Para darnos una idea de su venenosidad también lo encontramos en muchas semillas, en proporciones pequeñísimas con el fin de protegerlas. En otras palabras, como parte del mecanismo defensivo para que perduren por miles de años; conformando un veneno natural contra las bacterias, hongos y otros elementos enemigos de tales semillas. Por ejemplo, la semilla más antigua que corresponde a un arroz que se encontró en un pozo en china, se le aplicó carbono 14, dando una antigüedad de 5,000 años
Así, hasta los agentes y microorganismos más feroces de la putrefacción se detienen, ante la gran capacidad mortífera de dicho elemento.
Para ilustrarnos sobran ejemplos y enfoques de diversas narrativas, ya que también tenemos que en la gran novela y película “En el nombre de la rosa” de Humberto Eco, se utiliza para “sellar” hojas tratadas con arsénico en la Edad Media, del siglo XIV (puesto que una necesidad natural es el de humedecer los dedos para adherir el papel al dale vuelta a las hojas), era la forma en que fulminantemente se envenenaban sin darse cuenta los revisionistas y “traductores”.
Paradójicamente, es que si alguien se roba un pan por hambre o unos calcetines de 20 pesos o menos, son detenidos y arrestados en los centros comerciales. ¿Por qué en el caso de la magna-contaminación a 7 municipios, donde 24 mil personas se encuentran a corto y mediano plazo amenazadas de muerte y enfermedades (además de Cananea y Hermosillo), no hay nadie detenido? Quizá como dice el gran filósofo, poeta y escritor de que:
“Los violadores que más ferozmente violan la naturaleza y los derechos humanos, jamás van presos. Ellos tienen las llaves de las cárceles…las industrias más exitosas son las que más envenenan el planeta; y la salvación del medio ambiente es el más brillante negocio de las empresas que lo aniquilan. Son dignos de impunidad y felicitación quienes matan la mayor cantidad de gente en el menor tiempo, quienes ganan la mayor cantidad de dinero con el menor trabajo y quienes exterminan la mayor cantidad de naturaleza al menor costo.” Eduardo Galeano, “Patas Arriba La Escuela del Mundo Al Revés”
Por último, que no se nos olvide que en países donde se ha contaminado con metales pesados y arsénico, los niños nacen con labios leporinos, columnas vertebrales deformes, cáncer de todo tipo, leucemia, órganos perforados, etc., ya que la afectación es de tipo sistémica.
Por Víctor Manuel Estupiñán Munguía*
* Víctor M. Estupiñán Munguía: Pensador por distracción Cósmica, contador de estrellas por insomnio creativo, pintor de sueños por terapia humanista, especialista en transgredir las reglas ortográficas de la Real Academia Española, con neurosis cultural debido a que no puedo crear poemas que lleguen al corazón, víctima de la libertad, democracia y ecocidio del capitalismo bárbaro, pero con licencia de la Madre Naturaleza para cortar flores y olerlas.- Miembro de S.I.P.E.A. (Sociedad Internacional de Poetas, Escritores y Artistas)- Sonora “Por la paz del mundo” [email protected]