Mexico

Narcos y Minería

15 de Abril 2011
En 2010, empresas del sector acerero perdieron 240 millones de dólares por robos.Cárteles buscan que los ricos yacimientos del país se conviertan en su nueva mina de oro

Cuetzala del Progreso, Gro., 14 de abril.

Cárteles mexicanos de la droga, deseosos de nuevas fuentes de ganancias, están volteando hacia las ricas minas del país, lo que ha elevado los costos por seguridad de empresas del sector y detenido al menos un proyecto minero.

Vastos depósitos de minerales han hecho de México el mayor productor de plata del mundo y un fuerte extractor de oro y cobre. Las potenciales riquezas son demasiado atractivas como para dejarlas de lado, de acuerdo con empresas que planean invertir más de 4 mil millones de dólares este año.

Pero mientras los precios internacionales de los metales suben, bandas criminales están convenciendo a trabajadores para que roben los minerales y equipo en los habitualmente remotos yacimientos, que están bajo la vigilancia de cárteles de la droga.
El mes pasado, la canadiense Torex Gold Resources Inc. detuvo las perforaciones exploratorias en su yacimiento en Guerrero, después de que les robaran camiones. Autoridades culparon a un cártel de las drogas por extraer ilegalmente mineral de hierro en otro sitio y exportarlo a China.

Las acciones de la empresa bajaron después de eso y a pesar de haber sido un incidente aislado, puso en alarma los sitios cercanos, incluso en una zona propiedad de la canadiense Newstrike Capital Inc., que está explorando prospectos de oro en Cuetzala del Progreso.
El oro llegó a un precio récord de mil 476 dólares la onza esta semana, el triple del precio en el que estaba hace cinco años.
México tiene todavía un fuerte atractivo para la inversión extranjera y es menos riesgoso que otros países mineros, como la República Democrática del Congo.

Con una larga historia en la minería desde la época en que llegaron los conquistadores españoles en el siglo XVI, aún conserva una enorme riqueza en depósitos no explotados y sus leyes favorables a la minería lo hacen atractivo para empresas extranjeras.
Se espera que la inversión en minería suba 7.3 por ciento este año a 4 mil 400 millones de dólares, de acuerdo con la cámara minera nacional. Entonces algunas bandas del narcotráfico están buscando llevarse una parte del pastel.

Productores de acero dicen que perdieron 240 millones de dólares por robos en 2010 y han visto que los hurtos han crecido al doble en lo que va del año, de acuerdo con la Cámara Nacional del Acero.
El deterioro en la seguridad es una preocupación creciente para los inversores, según sondeos entre industriales.

Más de 37 mil personas, en su mayoría supuestos miembros de bandas del narcotráfico, aunque también militares, policías y civiles, han muerto en México desde que el presidente Felipe Calderón lanzó una campaña contra los cárteles tras asumir la Presidencia a finales de 2006.
La violencia llevó a que México bajara de puesto en la lista del estudio anual del Instituto Fraser de los mejores destinos para la minería global.

Un 39 por ciento de las empresas consultadas este año mencionaron a la violencia como un «fuerte disuasivo» para la inversión, contra 33 por ciento en Colombia.
Yacimientos de mineral de hierro en Michoacán han sido asediados por La Familia, que opera en el estado, extorsionando negocios y extrayendo ilegalmente minerales para exportarlos.

Un presunto lavador de dinero de La Familia capturado confesó que se habían exportado 1.1 millones de toneladas de mineral de hierro a China el año pasado a través de tres empresas establecidas en México, obteniendo 42 millones de dólares, de acuerdo con la fiscalía general.
Por ahora, muchos mineros están todavía determinados a tomar el riesgo y sólo siete por ciento de las firmas consultadas por el Instituto Fraser dijeron que no invertirían debido a la violencia.

Algunas empresas se han visto forzadas a contratar más guardias o cambiar la forma en que transportan sus bienes, incluso trasladando por aire los valiosos metales en vez de por carretera.
«El año pasado incrementamos en 20 por ciento la inversión en seguridad», dijo Armando Ortega, vicepresidente para América Latina de New Gold Inc., que posee la mina de oro Cerro San Pedro, en el estado de San Luis Potosí.

«Hay mineros que han sufrido robo de sus productos de lingotes de barra de oro o de sus concentrados. Los altos precios lo convierten en un atractivo para el crimen organizado», subrayó.