Perú

Iamgold no tiene permiso para explorar en la Amazonía

EFE, 23 de noviembre de 2009

El ministerio de Energía y Minas del Perú informó hoy que la compañía minera canadiense Iamgold Perú no tiene autorización para realizar exploraciones en la Amazonía peruana.
La información fue confirmada por el director de la Dirección General de Asuntos Ambientales del Ministerio de Energía y Minas (MEM), Felipe Ramírez, luego que los pobladores de dos comunidades indígenas en la región Amazonas protestaran contra las actividades de la compañía.
Iamgold negó hoy a Efe la información de que un equipo de sus trabajadores fue retenido por los indígenas y anunció que el próximo año probablemente abandonará una concesión que supuestamente tiene en la zona.
Sin embargo, Ramírez afirmó luego, en una nota de prensa, que «el Ministerio de Energía y Minas no los ha autorizado para hacer ni exploración ni explotación en (la zona) el Cenepa».

«Lo que están haciendo es ilegal», remarcó el funcionario, quien después añadió que Iamgold tampoco ha gestionado ninguna autorización ante el Gobierno peruano.

Ramírez dijo que en similar situación está la empresa Sierra Dorada SAC, que supuestamente también ha sufrido la retención de tres trabajadores.

La Asociación Interétnica de Desarrollo de la Selva Peruana (Aidesep) informó hoy que cinco trabajadores de Iamgold habían sido retenidos en la comunidad Achuim, vecina a la zona del Cenepa, en la provincia selvática de Condorcanqui, por dos comunidades indígenas que se oponen a sus operaciones.

El equipo de Iamgold realizaba labores de monitoreo ambiental de agua y suelos para presentar esa información al dejar la concesión en el 2010, según el gerente de la empresa, Louis Gariepy.

Sin embargo, Aidesep denunció hoy que ingresaron a esa zona sin el permiso de los líderes nativos de las comunidades awajún y wampis, que residen en esas regiones y deben ser consultados según las normas nacionales y locales.

Tras negar la veracidad de esta información, Gariepy dijo a Efe que la empresa «ha pensado en abandonar la concesión (supuestamente ganada hace un par de años en la zona del Cenepa) el próximo año, cuando toca renovar la licencia».

«Nos damos cuenta de que es bastante costoso. Ese es el factor por el cual es muy probable que no regresemos», explicó.