Internacional

El pánico vendedor en las commodities: alarma para una nueva recesión

27 de Septiembre de 2011

AVANZAN UN DESPLOME DEL CONSUMO

El desplome del precio de las commodities puede significar dos cosas: o que la burbuja –al estilo del ladrillo- ha estallado o que efectivamente se aventura una catástrofe. El oro ha retrocedido más allá de cuando empezara su espiral al cielo, la plata y el cobre le siguen el paso; mientras que los futuros del Brent malviven desplomados. Todo ocurrió la última semana, todo, por cierto, conocido, pero ¿dónde quedan las soft commodities? Hay quien dice que en el momento en que empiecen a caer, será tiempo de recogida y ponerse a salvo porque la recesión estará entonces a la vuelta de la esquina.

‘I told you so’, clamaba el columnista de The Wall Street Journal Charles Lewis ayer mismo acerca de sus advertencias sobre la burbuja que se estaba generando en torno a la cotización del oro. El metal dorado, activo refugio por excelencia, ha perdido todo el camino recorrido hasta ahora en tan sólo media decena de días. Cotiza ya al borde los 1.600 dólares, después de que a principios de septiembre marcaba máximo histórico de 1.900. Cifras que traducidas suponen una revalorización del 28% en el total anual; superior a un 35% los primeros días de septiembre.

Patricia Mata, analista de CMC Markets, asegura que ‘la tendencia alcista se mantendrá en los próximos meses y no descartamos volver a verlo testando los 1.900 dólares, ya que los tipos de interés de Estados Unidos se mantendrán bajos hasta mediados de 2013’. Uno de los pilares sobre los que apoya la analista su creencia es en la inversión de 550 millones de dólares que Barrick Gold, el mayor productor de oro del mundo, realizará en Perú dentro de dos años.

Gráfico cotización ORO (última semana)

FUENTE: YAHOO FINANCE

Frente a las perspectivas de futuro, la realidad que está sobre la mesa pinta negra y en la despensa repleta de dólares. Daniel Pingarrón, analista de IG Markets, apunta a la fortaleza de la divisa estadounidense frente al euro como causa principal de la caída del oro y es que en septiembre ha subido un 6% y ‘hay que tener en cuenta que las materias primas cotizan en dólares’. Es decir, USD más caro = ventas.

Patricia Mata recuerda que ‘no podemos olvidarnos tampoco que la caída se debe a la recogida de beneficios de inversores que ya estaban abiertos en oro’. Mientras que desde Inversis Banco señalan a la ‘búsqueda de liquidez’ como el origen del desplome en su cotización. ‘Los inversores necesitan cubrir las pérdidas que han generado otros activos en su cartera. Si rompe el soporte del 1.700 debería buscar niveles de entorno a 1.580, máximo del mes de mayo, por encima de la directriz a medio plazo y de las medias de 200 y 260 sesiones.

Gráfico EURO/USD (última semana)

FUENTE: YAHOO FINANCE

Castañazo también para la plata. El pasado viernes se desplomó un 18%, su mayor caída de los últimos 27 años y ha perdido el soporte de los 30 dólares la onza. Según Inversis Banco, ‘la disminución de un 50% en la demanda del metal para usos industriales ha intensificado su caída esta semana, al igual que en el caso del platino’.

Al unísono se mueven también otras commodities como el cobre y el petróleo anticipando una nueva recesión de la economía. Los futuros del Brent para venta en noviembre caen del orden de un 2,2% en el mercado de futuros londinense. La semana pasada el crudo de referencia en Europa firmó la mayor caída desde el 6 de mayo, un 7,35%. Y atentos al cierre de semana: ‘si el cierre semanal no mantiene el nivel de los 105 dólares el barril, buscaría la zona entre el soporte del canal bajista y la directriz alcista del largo plazo, en niveles de entorno a 98 dólares’. El oil Texas, por su parte, se debate en los 80 dólares y perdiendo fuelle.

‘El mercado se ha venido abajo durante un largo tiempo y muchas de las malas noticias parecen ahora haberse puesto precio’, apunta Christopher Bellew, broker especialista en crudo de la casa Jefferies Bache, según recoge la agencia Reuters.

The fear is back
Ya está aquí. Siempre lo ha hecho, pero en esta ocasión basado en algo más que en simples especuladores. Es tan sencillo como entender que hay caídas en las commodities que se producen por fuertes movimientos de los especuladores y otras que vienen de la mano de una bajada –real- de los fundamentales. ‘Si exceptuamos al oro, la caída del precio del resto de las materias primas supone un miedo a un parón de la economía, basado en la creencia de que se va a producir una caída de la producción industrial, de la demanda y, por tanto, del consumo’, asegura Susana Felpeto, de Atlas Capital. ‘Si el precio de las soft commodities baja, aventuran una caída del consumo y con ello una recesión’.

En la misma línea, Daniel Pingarrón apunta a ‘la percepción de fuerte enfriamiento económico que tienen los mercados desde julio. Las commodities son activos totalmente cíclicos y un parón de la economía supone una caída de la demanda a corto plazo’.

Pero es que hay más. Si los mercados habían descontado el rescate luso antes de producirse, el segundo plan de ayuda a Grecia antes de hacerse público, los stress test, el plan de estímulo de la FED y otra infinidad de decisiones económicas a nivel internacional,Roberto Ruiz-Scholtes, de UBS, asegura que ahora, exactamente, están haciendo lo propio, ‘con el cobre cediendo más de un 20%’, en su carácter de activos refugio. Los inversores se han marchado ahora a buscar cobijo al mercado de divisas, sobre todo en ‘las más robustas: franco suizo, divisas escandinavas y el dólar, que puede mantener el rebote’. Ojo avizor, por tanto, los próximos días porque tal vez el miedo ya no lo sea tanto y pase a quedar escrito en los libros de Historia como la segunda recesión en tan sólo tres años.