El Salvador

Ambicion al oro, dolor y llanto

“Hoy la tierra se estremece por este horrendo crimen”, fueron las palabras con las que inició la misa de cuerpo presente de Dora Santos Sorto Rodríguez, asesinada  en la comunidad Trinidad, la tarde del 26 de diciembre. El párroco Valentín Arias, fue enfático al señalar a la trasnacional Pacific Rim como responsable de la ola de crímenes y amenazas desatada en Cabañas. “La codicia y la ambición al oro es la raíz de todos estos males”, dijo y agregó “no estamos aquí para calmar la conciencia, estamos para despertar la conciencia, para fortalecer la organización comunitaria y para exigir que está empresa se vaya de una vez por todas y no queremos que se vaya para otra parte, porque a cualquier lugar donde llegue causará daño, queremos que se vaya de Cabañas, de El Salvador y del mundo”.
El acto religioso fue acompañado por una multitud de personas provenientes de distintas comunidades de la zona, además de representantes de instituciones como la Procuraduría para la Defensa de los Derechos Humanos, organizaciones sociales y ambientalistas como CESTA Amigos de la Tierra, quien han apoyado a las comunidades en resistencia frente a la minería.

El sepelio tuvo una amplia cobertura de la prensa escrita, radial y televisiva, puesto que no se trata de un hecho común. Dora Santos, fue asesinada por la espalda, sin importar su embarazo de ocho meses y que en sus brazos cargaba a su pequeño de dos años, quien también resultó herido de bala, pero sobre todo porque es la primera mujer ambientalista asesinada en el país y porque en palabras de sus vecinos su muerte se debe a la lucha que ella y su esposo han sostenido en contra de la empresa minera Pacific Rim.

Ante tan espantoso crimen cometido contra Dora Santos Rodríguez,  CESTA Amigos de la  Tierra El Salvador, se solidariza con la familia y el Comité Ambiental de Cabañas, a quienes les anima a no claudicar en su justa lucha en contra de la minería metálica. CESTA, condena enérgicamente este nuevo hecho de violencia y se une a las muchas voces que claman justicia y que demandan a las instituciones gubernamentales una pronta y eficiente investigación.

Consideramos que la empresa Pacific Rim, sembró el odio y la intolerancia entre la población de San Isidro Cabañas, por lo que es muy probable que estos acontecimientos sean producto de dichas divisiones. Esta muerte suma  4 asesinatos ocurridos en menos de 6 meses contra miembros del Comité Ambiental de Cabañas y de ninguno de ellos se conocen sus autores intelectuales.

Nos preocupa que estos crímenes continúen, porque la protección brindada por las autoridades policiales no ha sido efectiva, Ramiro Rivera, fue asesinado el 20 de diciembre, a pesar de estar acompañado por dos agentes de la policía y Dora Santos Sorto, fue asesinada el 26 del mismo mes, prácticamente en su casa y a pocos metros del puesto policial. A la fecha no hay ningún capturado.

Por consiguiente consideramos que la única manera de evitar nuevos asesinatos es que se haga una pronta y eficiente investigación que esclarezca estos crímenes y que lleve a los tribunales tanto a los actores materiales, como a los actores intelectuales.

PODRÁN MATAR EL CUERPO, PERO NUNCA EL ESPÍRITU.

NO A LA MINERÍA METÁLICA.

FUERA PACIFIC RIM