Mexico

Ejército y PFP reprimen y cercan plantón campesino contra mineras

Por Gladis Torres Ruiz

México DF, 5 junio 08 (CIMAC).-

Ejidatarias y ejidatarios de Huizopa, del Mineral de Dolores, municipio de Madera, Chihuahua, denunciaron la represión de que fueron víctimas el 27 de mayo pasado, que dejó dos mujeres heridas, por parte de militares y Policía Federal Preventiva (PFP), quienes llegaron al plantón pacifico que realizan frente a las instalaciones de la Minera Dolores y la Minera Sol de Oro, ambas canadienses, en demanda de respeto a su territorio, sus riquezas naturales y a la conservación de sus bosques y aguas. Así lo informaron medios de comunicación locales y el Servicio de Noticias ISA, quienes detallan que el 27 de mayo de 2008, en helicópteros y en camionetas propiedad de la Minera Dolores, llegaron aproximadamente 50 elementos de la PFP y varios vehículos de militares al territorio del ejido Huizopa.

A decir de la secretaria del Trabajo del Gobierno legítimo de México, Bertha Elena Luján Uranga, los uniformados fueron a reprimir el plantón que, de manera pacífica, se mantenían en defensa de las tierras y recursos naturales. Violentamente trataron de desalojar a las y los campesinos de sus propias tierras y secuestraron a sus dirigentes, Enrique Torres González y José Armando González Banda, presidente y secretario del ejido, respectivamente. "Enrique Torres y José Armando González fueron trasladados por la PFP a la delegación de la Procuraduría General de la República (PGR) del estado de Chihuahua acusados de portación de armas, acusación inventada por la minera, y como no les encontraron ni presentaron ningún arma fueron liberados, pero sobre todo por la presión a las autoridades y solidaridad que se desató hacia el movimiento del ejido Huizopa", afirmó.

De la misma manera, Lujan Aranga denunció que durante la acción policíaca las personas ahí presentes fueron golpeadas y bombardeadas con gases lacrimógenos con el saldo de dos mujeres heridas, quienes fueron trasladadas a la ciudad de Madera, Chihuahua, para ser atendidas.

Pese a ello, al plantón acudió la gente del pueblo de Dolores, quienes fortificaron la resistencia y continúan en su lucha por sus demandas, a pesar de que policías federales y el Ejército mantienen rodeado al plantón, señala un comunicado de prensa. Ante estos hechos, las y los campesinos apuntan: "hacemos responsables al Gobierno federal y al Ejército, así como a las Minera Dolores y la Minera Sol de Oro de lo que pueda sucederles a las y los ejidatarios y sus familias"..

En tanto, Bertha Elena Luján Uranga, abundó en que estos hechos muestran cómo estas empresas multinacionales compran a la Policía y al Ejército para que infundan miedo y las apoyen en el despojo a las y los dueños de las tierras donde quieren explotar los minerales, arrasando con bosques, centros de población, manantiales y contaminando el agua, para obtener inmensas ganancias a costa del despojo y la miseria de las y los campesinos que siempre han sido marginados y excluidos del desarrollo.

Explicó que al frente de este operativo estuvo Armando Bejarano Arriaga, enviado de la secretaría de Gobierno del estado de Chihuahua, quien amenazó con regresar a "levantarlos a todos".

Luján mencionó también que las y los ejidatarios han pedido a las Comisiones de Desarrollo Rural y de Asuntos Indígenas de la Cámara de Diputados que sean los intermediarios en las negociaciones con la minera, pero han encontrado poca disposición por parte de ésta.

MINERAL DE DOLORES
La decisión de realizar el plantón pacífico frente a las instalaciones de las mineras se tomó en asamblea, señala un comunicado del 24 de mayo, debido a que estas empresas están explotando a cielo abierto mediante la lixiviación con residuos peligrosos y explorando respectivamente el mineral que contiene su territorio ejidal. Las y los ejidatarios denuncian además que "mediante engaños, (las mineras realizaron) la compra de líderes corruptos y el pago de una cifra irrisoria a algunas y algunos propietarios lograron un acuerdo desmedido para operar y el permiso de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat)". Por eso, la asamblea ejidal en 2007 destituyó a sus líderes, desconoció el contrato firmado con las mineras y ha propuesto y acordado con la Minera Dolores una nueva negociación que incluya a las y los ejidatarios como dueños de la tierra, en el desarrollo económico y no solamente los excluya y margine.

Sin embargo la Minera ha incumplido algunos de los acuerdos logrados y está operando en el centro de población todavía habitado, tirando casas y enviándolos a unas casas que construyeron en un fraccionamiento de 60 m2 por casa, con problemas de escasez de agua, donde les impiden tener cualquier tipo de animales y a las 9 de la noche les apagan la luz y no les permiten salir después de esa hora.

Han contaminado los manantiales y ya hubo una intoxicación masiva, además que instalaron una laguna de oxidación junto a las casas, denuncian las y los campesinos. Esta no es la primera vez que las y los habitantes de la comunidad del Ejido de Huizopa de Madera, son agredidos. El año pasado Salvador Gaytán, uno de los dirigentes del ejido y sobreviviente de un grupo guerrillero, sufrió un atentado. Varios ejidatarios fueron también víctimas, en los últimos días de diciembre de 2007, de aprehensiones sin órdenes judiciales, de tortura psicológica, según reportó Cimacnoticias el 31 de diciembre de 2007.

La compañía matriz, de la Minera Dolores es Minefinders Corporation (http://www.minefinders.com), una sociedad que cotiza en la bolsa de valores de Toronto y cuenta con proyectos de exploración en Estados Unidos y México.

La oficina central se localiza en Vancouver, Canadá y cuenta con oficinas regionales en Reno, Nevada, y Chihuahua, México.