Honduras

POLICIA DENUNCIA A SACERDOTES ANTE FISCALIA

También a 51 pobladores, a quienes les imputan por intento de homicidio, amenazas, lesiones, daños y obstrucción de la libre locomoción

SANTA BÁRBARA.
La representante legal de la Policía Preventiva, Rosibel Estrada, interpuso formal denuncia ante la Fiscalía de este municipio por cinco delitos contra dos representantes de la Iglesia católica y 51 personas más. Entre los denunciados están el padre Marco Aurelio Lorenzo, párroco de la iglesia de Macuelizo; Reinaldo García, vicario de la diócesis de Occidente; y 51 campesinos que protestaron el 17 de mayo en contra de la exploración y explotación que realizan las empresas mineras en el territorio nacional. En esa fecha, pobladores de occidente y agentes policiales se enfrentaron al desalojar la carretera, que había sido tomada por los primeros. Hubo golpeados y heridos de bala.

Ambos bandos se acusan de agresión. La abogada presentó el escrito cerca de las cuatro de la tarde del martes por los delitos de amenazas, lesiones, daños, tentativa de homicidio y obstrucción de la libre locomoción. Al salir de las oficinas de la Fiscalía, manifestó que tenía como pruebas un agujero de bala en el helicóptero que vigilaba la zona y en el que se conducía el comisionado Napoleón Nazar Herrera. Además dijo tener videos y testigos que presenciaron la agresión contra los uniformados.

gentes de la Fiscalía anunciaron que los representantes de la Iglesia no serán citados, pero sí los investigaría en torno a lo denunciado y, en caso de encontrar responsabilidad, van a ser requeridos ante los tribunales.

El párroco de este municipio, Miguel Pozuelo, expresó que esa denuncia que interpuso la representante legal de la Policía Preventiva es como un tapón en la boca de los católicos que fueron realmente los afectados y golpeados.

EXIMIDOS
El artículo 227 del Código de Procedimientos Penales exime a curas, vicarios y al presidente de la República de ser citados a declarar al Ministerio Público.

En este caso, los fiscales deben acudir hasta los despachos de los inquiridos para tomarles declaración.